Después de las 5:00 pm el transporte no sube hasta la Terraza C y los habitantes deben caminar kilómetros para llegar a su casa por la carretera oscura. Los malandros se esconden en el monte
Yohana Marra/@yohanamarra
Caracas. “Aquí no hay luz en la calle y después de las 5:00 pm hay que subir caminando porque no tenemos transporte. Luego de las 10:00 pm no se puede llagar, he caminado con mi hija hasta la casa y mi esposo tiene que esperarme para vigilar que no nos pase nada”.
Mayra Guedez tiene dos hijas pequeñas. Debe recorrer bastante para llegar a su casa porque normalmente la camionetica no la deja en la Terraza C de Nueva Tacagua, donde vive. Se arriesga con ambas niñas a que un malandro le salga del monte y le robe todo en plena oscuridad, como suele ocurrir.
Añadió que los antisociales no son de la zona sino que van hasta la terraza a atracar a la gente, o a esconderse de sus enemigos, lo que ocasiona que una que otra noche aparezcan buscando a sus “culebras” y los habitantes estén nerviosos.
“Hace poco tuve que bajar caminando con mis hijas a otra terraza para comprar en el Mercal y me dijeron que no me metiera por esos lares porque habían matado a un chamo recientemente, y los tipos estaban alborotados. Gracias a Dios no me pasó nada, pero fue un riesgo que debí tomar para comprar comida”, contó.
Y aunque Mayra, afortunadamente, no ha sido víctima del hampa cuando le toca darle a pie hasta su hogar, otros habitantes no han cargado con la misma suerte. “Aquí por lo menos estamos medio tranquilos porque somos pocos y nos conocemos, entonces sabemos cuando viene algún malandrito huyendo de otro lado o a robar”.
La joven madre, al igual que sus vecinos, tiene miedo de que en algún momento un delincuente los confunda con otra persona, porque han oído comentarios cuando ven a alguien caminando por la carretera. “No, dale, este no es”, gritan los choros después de saltar de los matorrales.
Invasiones a ruinas
La Terraza C de Nueva Tacagua está en el olvido al igual que las demás. Por sus calles solo hay escombros y casitas que siguen de pie, gracias el esfuerzo de sus dueños.
Pese a esto hay personas que llegan con la intención de invadir alguna vivienda -a medias- que esté vacía. Una vecina, que no se identificó por seguridad, sostuvo que pasan varias veces en moto cazando a ver cuál está sola.
“Necesitamos que haya patrullaje y una alcabala permanente, porque si alguien viene con otra intención no tenemos cómo defendernos. Estamos desprotegidos en todos los sentidos”.
Habitantes comentaron que tiempo atrás en la redoma de Nueva Tacagua había un módulo de la extinta Policía Metropolitana (PM), pero fue invadido y ya no tienen a quien acudir para exigir seguridad.
“Dejaron perder ese módulo. Antes había un malandreo feo ahora muchos se han ido a los Valles del Tuy porque les asignaron sus casas”.
Esta comunidad pide a gritos que las autoridades les presten atención y los saquen de ahí de una buena vez, ya que pasan las de Caín con el deficiente transporte público, que después de las 5:00 pm no los sube hasta el barrio, y por ende deben caminar kilómetros hasta su casa por esa carretera oscura.
Fotos: Angeliana Escalona
Lea también: En Nueva Tacagua viven encerrados porque los roban dentro de sus casas
Participa en la conversación