En barrios de Antímano el agua tarda hasta un mes en llegar

Al celebrarse este lunes 8 de mayo los 396 años de la fundación de esta parroquia del oeste capitalino, sus habitantes hacen un llamado a Hidrocapital para que resuelvan el problema que los aqueja. Debido a la falta del servicio pasan roncha para preparar la comida, hacerse el aseo personal y realizar las labores de limpieza del hogar.

Caracas. Los habitantes de las barriadas altas de Carapita como Las Terrazas, El Mamón y Callejón Caracas están molestos con Hidrocapital por el perenne racionamiento del agua al que los tienen sometidos. Las familias que allí residen pueden tardar hasta un mes sin recibir agua potable, por lo que se ven obligadas a buscarla en sectores donde llega cada 15 días, que también es un lapso prolongado sin contar con el servicio.

María del Carmen Rodríguez señala que cuando sufren de escasez de agua, los vecinos de esos sectores no reciben apoyo de cisternas de parte de ningún ente público. En las comunidades dicen que no son camellos y exhortan a la operadora de acueductos que acabe con la sequía que aqueja a esta parroquia.

Tenemos que almacenar el agua en pipotes y rendirla para no pasar trabajo, en mi caso no tengo tanto tanto rollo porque somos pocos en la casa. Para mí el problema principal es la venta del gas doméstico, eso sí está grave en muchos sectores”.

La compra del gas doméstico se ha convertido en un dolor de cabeza para todos los habitantes de Antímano porque algunos expendedores de las bombonas no quieren subir a las barriadas donde han sido víctimas de la delincuencia. Los que se atreven a hacerlo, llegan a las 4:30 de la madrugada a las casas donde las distribuyen, por lo que las familias que requieren comprar gas deben acercarse a las 5:00 de la mañana para hacer la cola.

José Gregorio Ochoa, dirigente vecinal de Antímano, afirma que el gas doméstico se ha convertido en un negocio lucrativo para las personas que lo reciben en las viviendas y lo distribuyen a la comunidad. Por cada bombona que pagan a 300 bolívares arrojan una reventa a los habitantes de 700 bolívares por unidad.

Ochoa indica que la acumulación de basura es otro problema de la parroquia porque no hay sitios para la compactación, por ello se evidencia la acumulación de desechos a lo largo de la Avenida Intercomunal: “La están colocando en horas de la tarde. Cuando falla el servicio de recolección, se acumula y esos hedores se mezclan con la venta de comida de los buhoneros”.

A su vez, denunció el mal estado de las vías y, en la calle principal de Carapita, roturas de viejas tuberías de aguas servida y agua potable, que deterioran el pavimento. “A estos problemas hay que sumarles la escasez de establecimientos para la compra de alimentos de primera necesidad, la gente pasa horas esperando un número, después hace cola para comprar”.

Mayerling Méndez, otra habitante de Antímano, coincide con sus vecinos en que la basura, deterioro de las calles y escasez de agua son calamidades que sufren a diario. “Pero también lo sufrimos en el Hospital El Algodonal, allí el agua escasea, hay que llenar pipotes”.

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Domingo Pérez, residente de esta parroquia cumpleañera, afirma que llevan años sin poder celebrar la fecha debido al abandono que tiene deteriorado al sector. Afirmó que el gobierno local y distrital tiene deudas pendientes en cuanto a obras luchadas por la comunidad, como el anhelado Mercado Municipal.

En el sector la Gran Chivera, en la entrada del sector El Progreso de Carapita, hay una valla que indica el nombre de la obra, con 10 trabajadores que no están haciendo nada, eso lo usan como un garaje. El Mercado Municipal comenzó a construirse en el 2014, el alcalde Jorge Rodríguez prometió inaugurarla a finales de ese año, no cumplió y no vemos avances”.

Los vecinos se quejaron de la falta de participación en actividades que son de interés para la parroquia. “No hay tribuna, lo que fue el Módulo de Servicios Múltiples de Carapita, donde se realizaban asambleas vecinales con todos los factores políticos y sociales de la parroquia ya no se hace, es un comando del chavismo, dirigido por una misma familia”, dijo Pérez.

Fotos: Norma Rivas | José Gregorio Ochoa