Los funcionarios marabinos se vieron obligados a pedir en la calle para soportar la protesta que se ha extendido por más de un mes, en reclamo del pago de sus prestaciones sociales.

Maracaibo. Este viernes, los bomberos jubilados de Maracaibo cumplen un mes de protesta para exigir el pago de sus prestaciones sociales. Un grupo de 48 uniformados mantiene tomadas las instalaciones de la comandancia general del Cuerpo de Bomberos de Maracaibo, ubicada en la avenida 8 Santa Rita. Ni el cierre de la vía, ni la huelga de hambre, ni la toma de la sede les dieron resultado. La respuesta del director de la institución, Helin Pírela, es la misma: “No hay dinero”.

Hoy las medidas para subsistir mientras la Alcaldía de Maracaibo paga progresivamente la deuda van más allá de levantar la voz:

“Nos tocó pedir en la calle porque mientras esperamos que nos paguen, nos morimos de hambre”, declararon.

Un toldo enclenque los cubre del sol y tres colchonetas les dan descanso mientras se turnan para reunir para la comida.

Los números

Los jubilados en protesta brindaron entre 20, 30 y 35 años de servicio a la institución municipal.  La cifra que recaudan a diario va de 37.000 a 45.000 bolívares, ahí mismo preparan y cocinan las tres comidas.

Evelio Montiel, teniente coronel, dijo que aún no hay respuesta precisa del pago:

La alcaldesa solo dijo que no tenía dinero y que nos puede pagar a dos o tres por año, lo que tardaría 16 años en solventar la deuda.

El jubilado lamentó que luego de tantos años de servicio este sea el pago que la municipalidad otorga a los héroes anónimos.

“Prestamos un servicio ininterrumpidamente durante años y desde hace un mes nos suspendieron la pensión a los 21 que tildan de revoltosos. Seguiremos en pie de lucha, aunque no estamos cobrando nada”, expresaron.

Armados con una bolsa y un pote, de dos en dos cubren la alcabala improvisada. Un pedazo de cartón anuncia el potazo que los jubilados activan  desde las 7:00 a. m. hasta las 2:00 p. m., hora aproximada cuando logran reunir para el almuerzo: “En la tarde nos paramos otro rato para la cena. Nuestras familias nos apoyan porque saben que si no hacemos así, no nos pagan nunca pero es triste que tengamos que llegar a todo esto, sentimos pena, pero tenemos que hacerlo. Ahora no solo pasamos hambre nosotros, también nuestras familias porque no nos pagan”.

Los jubilados anunciaron que permanecerán en pie de lucha hasta que se les cancele la deuda. Exigen justicia, sinceridad y una respuesta que dé solución a sus problemas.

Lidardo González pide junto con sus compañeros frente a la Comandancia general de los Bomberos de Maracaibo.

Guerra política

Lidardo González, primer teniente con 27 años de servicio, comentó que Eduardo Labrador, el diputado oficialista al Consejo Legislativo del Zulia, les regaló una caja de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción hace 20 días: “Nos prometió ayuda y no le hemos visto más la cara”.

Por otra parte, denunció: “La semana pasada se paró un carro e hizo disparos, que gracias a Dios no fueron contra nosotros, pero era para amedrentarnos y no lo van a hacer. Los compañeros activos son solidarios con nosotros, pero están bajo amenaza, que si se acercan les levantan expedientes administrativos o sanciones y los entendemos”.

Fotos: Mariela Nava


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