Cañada La Frontera se traga el sector Brisas del Sur en el Zulia

Al menos 2000 familias corren peligro por la inestabilidad de sus casas que están al borde de la quebrada. Exigen a las autoridades que embaúlen la cañada.

Maracaibo. Los habitantes de los sectores Brisas del Sur y Bello Monte de la parroquia Manuel Dagnino, al sur de Maracaibo, tienen que maniobrar para poder cruzar la avenida 127. La cañada La Frontera que atraviesa el sector ya se comió la mitad de la calle por la falta de embaulamiento y la inconsciencia de los ciudadanos del parcelamiento “Los Ranchos”, que lanzan objetos pesados como aparatos dañados, colchones y muebles al cauce.

Más de 2000 familias rezan al unísono cada vez que llueve porque el cauce crece y se desborda llevándose todo a su paso. La Frontera, con el paso de los años, ha socavado los cimientos de las casas cercanas a ella. Leydis Montilla tiene un abasto al lado de la cañada y aún se le eriza la piel al recordar como a la vivienda de una de sus vecinas “se la tragó la cañada”. La joven, que vive al fondo del abasto con su madre y sus dos niños, teme por su vida, sobre todo cuando llueve, pues el agua se desborda formando una laguna de aproximadamente una cuadra de largo.

La falta de mantenimiento a la cañada por parte de las autoridades se une a la falta de ciudadanía. José Luis Rodríguez denunció que la cañada no puede drenar por la cantidad de basura que la gente lanza:

Lavadoras viejas, televisores, colchones, de todo tiran ahí, entonces nosotros tenemos que pagar 50.000 bolívares para que nos ayuden a destaparla.

José Luis dijo que en lo que va de mes, 15 vehículos han caído en la quebrada en la noche por la falta de alumbrado público y señalizaciones de seguridad. Los fines de semana es peor, a veces nos tenemos que parar a las 11 ó 2 de la mañana a ayudar a la gente que se cae. El último vehículo que termino al fondo del hueco “casi no la cuenta”. Según relató el hombre, a bordo iba una mujer embarazada que por poco pierde la vida.

La casa de José Luis se inunda cada vez que llueve, lamentó que con el último aguacero que cayó sobre la ciudad varias gallinas se le ahogaron porque el agua alcanzó casi un metro de altura. Sobre el bahareque que lo separa de la cañada fue tajante: Yo estoy esperando que se caiga esa pared y todo esto se hunda, porque no tenemos más para dónde agarrar.

Luis Villamizar, otro vecino, comentó que los hombres de la comunidad se han puesto de acuerdo y con picos y barras se han metido en la cañada a limpiar, pero que los habitantes de la invasión “Los Ranchos” no colaboran y echan todo ahí. El olor es insoportable, uno tiene que estar encerrado porque los zancudos y las ratas, que parecen conejos, se meten en las casas.

Los vecinos aprovecharon para hacer un llamado a los entes pertinentes para que atiendan la situación.

Inseguridad

La inseguridad también es inclemente con los habitantes del sector Brisas del Sur. Los delincuentes aprovechan la falta de alumbrado público y la maleza de la cañada para esconderse y cometer sus delitos. Se roban los cables de Cantv para sacarles el cobre y venderlo, dejando a sus vecinos sin internet ni servicio telefónico. Un kilo de cobre en el sector se vende en 20.000 bolívares.

Foto: Mariela Nava


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