Los ciudadanos culpan a Maduro de la crisis económica y critican la falta de medidas

Los caraqueños cuestionan las acciones del jefe de Estado y consideran que por el control de precios hay escasez de productos básicos. No rechazan el aumento de la gasolina

Oliver Lugo/@Oliver_Futve

Caracas. Los ciudadanos están molestos por la crisis económica y aseguran que el presidente Nicolás Maduro debió tomar acciones de manera rápida y eficiente a fin de intentar solventar la situación. Para los caraqueños los controles han generado la escasez y están a favor de aumentar el precio de la gasolina, aunque expresan que dicha medida se tuvo que implementar mucho antes.

Rogelio Meza considera que el panorama es complicado. “Maduro tiene un arroz con mango, no sabe qué hacer con la economía y las cosas que hace no favorecen en nada al pueblo. Se llenan la boca diciendo que quieren al pueblo, pero en realidad cada día somos más y más pobres”.

Meza es un jubilado que vive en Catia y afirma que la escasez de medicinas lo tiene al borde, porque no logra conseguir los medicamentos para el tratamiento de su enfermedad “Yo padezco de una enfermedad en la próstata y tengo tres meses que no consigo mis medicinas. Esto no es justo para los adultos mayores. Solo me queda esperar la muerte, porque sin esos medicamentos lo más probable es que mi enfermedad avance, pero eso no le importa a ningún gobernante, ellos solo piensan en ellos mismos”.

Carolina Ramírez expresa que desconoce por completo las medidas económicas y el tema de la devaluación, pero estima que hay que replantear las políticas económicas. “No conozco mucho acerca de las medidas económicas, pero desde mi humilde opinión considero que la crisis no fue atacada a tiempo, ahora el Gobierno coloca precios justos a las cosas y no se consiguen los productos de la cesta básica ni los artículos de primera necesidad, todo es peor. Tan sencillo que es llegar a un acuerdo con las empresas privadas para que les den sus dólares y ellos puedan traer las cosas básicas de los venezolanos, pero no se ponen de acuerdo ni por un lado ni por el otro”.

Para esta secretaria que vive en el oeste de la ciudad, “aquí no hay guerra económica sino una crisis mal administrada por parte del Gobierno. Lo que está pasando actualmente es culpa del mismo Nicolás Maduro. Ellos se escudan diciendo que es la guerra económica, un sabotaje para disfrazar su mala gestión, pero todos sabemos que la culpa no es de la empresas privadas sino del Gobierno”.

Un estudio de Datanalisis de noviembre de 2015 reveló que 70% de las ciudadanos no se comían el cuento de la guerra económica.

Los ciudadanos, además, culpan al control de precios y a las expropiaciones de la ausencia de productos esenciales como alimentos, pañales, papel higiénico, entre otros rubros.

Las hermanas Perdomo, Magaly y Magdalena, aseguran que por el control de precios “no se consigue nada”. Expresan que comprar alimentos se ha vuelto una completa tortura, porque se tiene que madrugar para adquirirlos, y apuntan que por el control de precios se consiguen menos productos. Agregan que “el dinero que tiene la gente no lo pueden ni gastar porque no hay nada en que gastarlo. Las medidas del Gobierno han sido muy malas sinceramente”.

La preocupación de los venezolanos ha llevado a suspender sus actividades diarias como el trabajo o el hacer deporte por esperar el ansiado día para la adquisición de alimentos. “Tuvimos que pedir las vacaciones por adelantado, ya que no tenemos tiempo de comprar el día que nos toca y cuando llega el día no hay nada, así que decidimos pedir las vacaciones y dedicarnos todos los días a comprar las cosas para la casa. Lo mismo estamos haciendo con los medicamentos, hay que patear la calle y caminar bastante para conseguir las medicinas, lo demás es lo de menos ya ni ropa compramos”, expresa Magdalena Perdomo.

José Reyes, es administrador y trabaja en Plaza Venezuela, y al igual que las hermanas Perdomo dice que por las regulaciones hay escasez. “Es bastante grave lo que está pasando en el país, eso de querer controlar los precios no sirve de nada, genera más escasez y al no conseguirse aparecen los famosos bachaqueros. Siempre el pobre es el que saldrá más perjudicado, el rico siempre podrá pagar lo que sea, pero el que gana sueldo mínimo ya no le alcanza ni para comprar un pantalón”, acota.

Magaly Perdomo añade que las expropiaciones generaron problemas. “Cuando empezaron a expropiar en el mandato de Chávez, yo sabía que esto se iba a poner feo, expropiando sin razón alguna, lo peor es que las empresas las paraban, no producían, producían un rato para salir en las cadenas de Chávez y luego no se sabía más nunca de la planta de leche, harina, atún. Se perdían del mapa y luego uno se enteraba que estaba parada y no producía nada y ahora estamos viviendo las consecuencias de eso”.

Pero para Salomón Quintero, un albañil que habita en Catia, la crisis económica no solo se vive en Venezuela sino a nivel mundial y hace un llamado al pueblo y al Presidente a estar juntos para superar la crisis. “Para mí la situación mala no solo se vive en el país, sino a nivel mundial, es cierto que tenemos una crisis, pero los medios se enfrascan en que es en Venezuela, que Venezuela es lo peor, pero es algo mundial que nos afecta, el precio del petróleo bajó y son muchas cosas que juegan en contra de los venezolanos. Pienso que debemos estar unidos Gobierno y ciudadanos”.

Dice que la oposición y el Gobierno mantienen un conflicto que repercute en todos los venezolanos. “Mientras sigan esa pelea de la oposición con el Gobierno, esto no va a terminarse nunca. Nosotros los pobres, el pueblo, somos los más afectados, hacemos cola, no tenemos medicinas, no tenemos con que vestirnos, es una mala calidad de vida. Sinceramente estoy cansado de hacer colas no quiero hacer más colas”.

La gasolina 

Un ajuste en el precio del combustible es aceptado, sin embargo, los ciudadanos estiman que ese incremento tuvo que haber sucedido antes.

Salomón Quintero está a favor de subir el precio de la gasolina. “Si estoy de acuerdo, ya que esa entrada podemos invertirla en otras cosas, pero para mí es algo que se tenía que haber decidido antes, pero así es este país y así es todo”.

José Reyes también el avala el ajuste, aunque indica que es una medida pequeña para un gran problema. “Eso no va a resolver nada, es un paño de agua tibia, o un arma de doble filo. Es cierto que nuestra gasolina es la más barata del mundo y por allí el Estado puede obtener algunas ganancias extras, pero si no se pone de acuerdo con la empresa privada jamás saldremos de la crisis”.

Foto: Angeliana Escalona


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