Denuncias de las comunidades serán órdenes para que los Clap sancionen comercios y plantas

La estructura de control a los privados se amplía y además de los Comités estarán los Consejos Productivos de los Trabajadores.

Caracas. El Gobierno continúa aumentando el poderío de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap) y ahora las denuncias de las comunidades se convertirán en órdenes para que esas instancias pueden fiscalizar y sancionar comercios e industrias.

El pasado martes, durante la juramentación de los Consejos Productivos de los Trabajadores, el presidente Nicolás Maduro mantuvo la premisa de “todo el poder para los Clap” y le otorgó más atribuciones para regular al sector privado.

Los detalles los dio el superintendente de precios, William Contreras, quien apuntó que “en el golpe de timón se ha establecido con los Clap un nivel de desconcentración” que implica la instalación de “985 puntos de denuncia y activación de operativos y acciones contra la especulación”.

Con esos puntos las denuncias serán órdenes inmediatas. El funcionario indicó que “la denuncia se convierte en una orden popular de inspección. Las comunidades no denuncian, nos ordenan. Vamos a corregir un elemento, porque se hacían fiscalizaciones y no llegaban a sanciones. Los cierres los harán los Clap y vamos a delegarles el poder de sanción”.

Con los decretos de emergencia económica el Gobierno le ha delegado una serie de funciones a los Comités que abarcan el control en la producción y distribución de alimentos y otros artículos básicos, así como regular el orden público y “neutralizar” acciones para defender la “revolución”.

En línea con los roles que deben tener los Clap, el jefe de los Comités, Freddy Bernal, señaló que con los Clap se tiene que seguir “avanzando y controlando, además de agrupar a los consejos comunales y las diversas formas de organización popular”.

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Más controles

La estructura de control a las empresas se amplía. A la Gran Misión de Abastecimiento Soberano (GMAS) y los Clap, se suman los Consejos Productivos de los Trabajadores (CPT).

A fines de septiembre, el Jefe de Estado anunció la conformación de esas figuras con el fin de monitorear la elaboración de alimentos, medicinas, artículos de higiene personal y de limpieza. Los CPT revisarán la producción y la distribución e informarán a la Misión.

El pasado 8 de noviembre, Maduro juramentó los Consejos, que están integrados por: tres empleados de las empresas, la milicia, un representante de Unamujer y un representante de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.

En el acto, el mandatario dijo que “los Consejos deben estar en cada empresa para elevar la producción y resolver los problemas logísticos, financieros y organizativos. Deben posicionarse como instancias de poder”.

Aunque ya los entes oficiales saben cuánto producen las empresas y deciden el destino de los productos, el Presidente estimó que “es necesario que se sepa cómo y a dónde llega cada producto, sea de empresa pública o privada, para que no se pierda el esfuerzo productivo a manos de los capitalistas, ladrones, del parasitismo del bachaqueo y de las grandes corporaciones”.

Orlando Castillo, representante de la Central Bolivariana de Trabajadores, apuntó que los Consejos buscan garantizar la distribución y elevar la producción, porque actualmente hay una baja capacidad: “Y adicionalmente, van a estar articulados con la Misión de Abastecimiento”.

Estos CPT ayudarán a los Clap para que se inserten en el proceso productivo: “Vamos a ayudar a los Comités para que produzcan en sus ámbitos propios [zonas donde están ubicados]”.

Según Bernal, el rol de los Comités está vinculado con el sistema comunal. El Plan de la Patria, que incluye las líneas del sistema comunal, señala que es necesario “fortalecer las cadenas estatales, comunales y mixtas que representen alternativas en la distribución”.

Foto:AVN


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