14.000 personas y 900 niños no tienen antirretrovirales por problemas de importación de los medicamentos. 36 organizaciones enviaron una carta abierta al Ministerio para la Salud para exigir soluciones.
Caracas. Tres antirretrovirales que mantienen con vida a las personas diagnosticadas con VIH ya no están en el país desde hace dos meses, mientras que otros siete se distribuyen de forma intermitente.
Estevan Colina, director de la Red Venezolana de Gente Positiva, denunció que 64.000 pacientes que viven con VIH tienen un futuro incierto en 2017. Ya desde hace dos meses, 14.000 personas que consumían el antirretroviral atazanavir no tienen el tratamiento. Explicó que la casa comercial que vendía el medicamento en Venezuela demandó a la empresa India que suministra el genérico al Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de Salud y el ente internacional no ha podido negociar la venta.
Mientras que los antirretrovirales lamivudina y nevirapina, que se importaban a través del Convenio Cuba-Venezuela, también dejaron de comprarse por presunta falta de materia prima. El Ministerio para la Salud no ha dado soluciones inmediatas para estos pacientes.
Esta semana, 36 organizaciones que trabajan por los derechos de quienes viven con VIH firmaron una carta abierta en donde denuncian la escasez.
“Durante el último año se han agudizado los graves problemas de abastecimiento de tratamiento antirretroviral (ARV) con ausencias intermitentes de: atazanavir, raltegravir, ritonavir, nevirapina, efavirenz, rilpivirina, tenofovir, emtricitabina y abacavir, que ponen en peligro la vida de los pacientes con VIH por interrupciones y cambios no programados del esquema terapéutico. El desabastecimiento de medicamentos antirretrovirales y reactivos imposibilita el control de la epidemia del VIH/SIDA en el país, lo que dificulta el control de la transmisión del virus de la madre a sus hijos y en la población general”, expresan.
Colina además resaltó que no hay antirretrovirales pediátricos para tratar a los 900 niños que nacieron con el virus, pese a que con el tratamiento se puede bajar la carga viral de la madre para prevenir que se transmita la enfermedad al bebé al momento del nacimiento. Tampoco hay acceso a las fórmulas lácteas para estos niños que no pueden ser amamantados por las madres diagnosticadas.
“Tenemos a una empresa que quiere donar 80.000 fórmulas lácteas pero el Ministerio para la Salud no nos ha facilitado el ingreso”, agregó Colina.
“El no disponer del tratamiento antirretroviral limita la consecución de los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) en el marco de la Agenda 2030, acuerdo suscrito por Venezuela en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Exigimos que las autoridades involucradas tomen las medidas pertinentes”, precisaron en un comunicado los activistas e infectólogos.
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