El bloque 12 de la primera etapa de La Rinconada se hunde

Las familias de la planta baja cuando consiguen cemento tapan las grietas de las paredes y los huecos del piso. Piden a los bomberos hacer una inspección antes de que socaven las bases del edificio.

Mabel Sarmiento Garmendia/@mabelsarmiento

Caracas. Cerca de 20 familias tienen un pendiente más en la lista de los problemas. Sumado a la angustia que les genera la inseguridad, la falta de agua y la escasez de alimentos, ahora no duermen tranquilos porque el bloque donde viven se está hundiendo.

Cada día la estructura tiene grietas y huecos más profundos. Y según Mercedes Silva, habitante de uno de los apartamentos ubicado en la planta baja, ya se siente el desnivel en el suelo.

“Cuando consigo cemento tapo las rajas y los huecos que salen entre la cerámica y las paredes. Pero esto es angustiante. Queremos que vengan los bomberos a inspeccionar y que nos resuelvan este problema, que sabemos no es nada nuevo en esta zona”, señaló.

Coche
Los hundimientos desnivelaron las paredes.

La zona es la primera etapa de La Rinconada en la parroquia Coche. En 2009 se registró un hundimiento en el bloque 1 que obligó a los habitantes a hacer desalojos voluntarios. En esa oportunidad los Bomberos del Distrito Capital realizaron una inspección y determinaron que el edificio presentaba alto riesgo estructural “endémico”, por lo cual sugirieron a las autoridades tomar acciones para evitar pérdidas humanas y materiales a futuro.

A raíz del hundimiento se fracturó la caseta de las tuberías del gas. Los vecinos pasaron más de un año sin ese servicio. Esta es una de las cosas que temen que ocurra. Betzaida Josefina Sifontes, también afectada, explicó que por la parte de atrás, que da hacia la autopista Valle-Coche, hay una separación de casi 15 centímetros entre el piso y la placa horizontal.

Coche
La pared parte de atrás que da a la autopista Valle-Coche se está separando de la placa.

También denunció que la fachada del inmueble están abombándose. “Por lo menos ahora no ha llovido, pero cuando caigan los palos de agua puede aumentar el riesgo. Tenemos miedo que nos pase lo que sucedió en 2009. vamos a levantar un informe y lo llevaremos a todas las instituciones que sean necesarias”, dijo.

Las letras A y B de la residencia tienen además un racimo de quiebres. Las rejas de las puertas ya se están aislando, y por los huecos salen los roedores. “Por eso le puse tela metálica a mis ventanas porque ya se estaban subiendo la paredes”.

Con este problema llevan más de seis años, pero el asentamiento del terreno ahora es que agarra fuerza.

Coche
Las grietas en el primer piso se están haciendo más grande.

Fotos: Angeliana Escalona


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