El sueldo de quien no sea bachaquero no alcanza para sobrevivir en La Guajira

La escasez de alimentos aumenta en la frontera venezolana. Los rubros aumentan de precio en el mercado informal. Bs. 200 pagan por un rollo de papel sanitario

Nataly Angulo/ @natalyaav

Maracaibo. La escasez de alimentos se agudiza en La Guajira tras el cierre de la frontera con Colombia, que hoy cumple una semana, desde que el presidente Nicolás Maduro lo ordenó.

Las bolsas de comida que vende el Gobierno, a través de Mercal, a los habitantes del municipio Guajira no son suficiente. Cada 15 días les venden a las familia una cuota de rubros que no les alcanza para cubrir la quincena: 4 kilos de harina de maíz precocida, 4 kilos de arroz, 2 kilos de leche, 2 litros de aceite, ½ kilo de caraotas, 2 pollos, 2 kilos de carne, 2 margarina, 2 mayonesas y 2 latas de sardinas.

“Esto no nos alcanza, igual nos toca comprar con sobreprecio al bachaquero”, lamentó Carlos Reverol, habitante de Paraguaipoa, en entrevista con Crónica.Uno.

Dijo que con el cierre de la frontera el bachaquero se aprovecha y aumentó los precios de los productos, sobre todo los de higiene personal que no son facilitados por las redes del Gobierno. Precisó que compró un rollo de papel sanitario en 200 bolívares.

En La Guajira no hay supermercados. Hay abastos que venden con sobreprecio, a pesar de que sus dueños tienen códigos Sada, denunció el docente jubilado.

Los establecimientos más cercanos están ubicados en el municipio Mara, pero ahí no pueden comprar. Luis Caldera, alcalde de esa localidad, ordenó que solo pueden vender los productos a los habitantes de Mara.

“Un sueldo mínimo no alcanza. El sueldo de quien no sea bachaquero no alcanza para sobrevivir en La Guajira”, replicó Reverol.

En el municipio fronterizo con Colombia, se vende un kilo de arroz en 600 bolívares, el de harina en Bs. 500, el de azúcar en Bs. 300, el de leche sobre los 1.500 bolívares y dependiendo de la marca, un litos de aceite en Bs. 700, el paquete de papel sanitario (4 rollos) en Bs. 800.

Hoy se cumple una semana de que Maduro ordenó el cierre fronterizo con Colombia por el pase de Paraguachón. Tras la declaración del estado de excepción en Guajira, Mara y Almirante Padilla, sus habitantes deben mostrar en los peajes una carta de residencia al salir o entrar a esos municipios.

En la alcabala del Río Limón que conduce a Paraguachón, Sinamaica y Paraguaipoa, solo está permitido el paso del transporte público. Hasta cinco horas tardan en cola para poder cruzar el puente, ya que los efectivos militares hacen una revisión exhaustiva a los vehículos.

En La Raya (pase fronterizo a Colombia en Paraguachón) solo está permitido el paso de los wayuu, quienes lo hacen sin mayores complicaciones. Deben demostrar que viven en la zona fronteriza para transitar.

El Gobierno planea frenar el contrabando de combustible y alimentos con la medida, ante la mirada incrédula de quienes habitan en la Guajira.

“Espero que esto redunde en algo positivo. Aunque les digo: el contrabando no lo para nadie. Es mucho dinero lo que se maneja. La frontera es muy amplia y por cualquier lado se puede pasar a Colombia”, dijo Carlos Reverol, quien toda su vida ha vivido en Paraguaipoa.

Lo que se pregunta es por qué el Gobierno habla de acabar con la guerra económica y no de la guerrilla que “está en todas partes en la Guajira”. “Contra ellos no hace nada. Ellos también manejan el contrabando”.


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