La noche del lunes 26 de junio funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro de la Guardia Nacional Bolivariana allanaron tres apartamentos de las residencias Erise, en la calle 3A. También reprimieron y causaron destrozos en las instalaciones de las calles 2 y 3A.
Caracas. “Cuando estaba subiendo las escaleras sentí un ruido en el pasillo, al voltearme eran tres funcionarios vestidos de negro y entraron a mi casa a revisar todo. Al salir oí que dijeron: ¿dónde se nos metieron estos carajitos?”, contó un residente del edificio Erise.
Funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) ingresaron la noche del pasado lunes 26 de junio a tres apartamentos de residencias Erise, en la calle 3A de La Urbina.
Vecinos relataron que los uniformados llegaron acompañados por una tanqueta, con la que derribaron barreras de seguridad e irrumpieron en las urbanizaciones. Además, atacaron con bombas lacrimógenas y perdigones a los apartamentos, que por seguridad tenían las luces apagadas.
La represión se dio luego de que durante el día los habitantes mantuvieran la zona trancada, en apoyo a la actividad convocada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), en rechazo al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
“Fue algo muy pacífico, participamos muchos vecinos. De vez en cuando pasaban motorizados de la GNB pero no se detenían, así estuvieron durante el día”, señaló un habitante.
Alrededor de las 8:30 p. m., cuando aparecieron los funcionarios, los jóvenes que se encontraban con barricadas en las calles tuvieron que correr para evitar ser detenidos por los uniformados. En la manifestación los apoyaban muchachos de Petare.
“Mientras estuvimos abajo, la tanqueta estuvo en el puente 5 de Julio, luego vecinos comenzaron a alertar que se estaban acercando y todos tuvimos que correr y resguardarnos”, contaron.
Testigos denunciaron que vieron a presuntos funcionarios, vestidos de negro, bajarse de taxis gubernamentales en cuadras más abajo de las calles que agredieron con lacrimógenas. Esos funcionarios subieron caminando, armados, para apoyar al resto que llegó en motos con la tanqueta, según testimonios. La avenida principal de La Urbina estuvo llena de unidades policiales.
A la conserje del edificio Erise le robaron el celular cuando ingresaron a su casa a revisar. Los uniformados tocaron la puerta y tras “sondear” todo se fueron. “Cuando fui a ver mi celular ya no estaba en la mesa, donde lo había dejado”.
El diputado a la Asamblea Nacional (AN), Miguel Pizarro, indicó que tres personas resultaron detenidas pero fueron puestas en libertad. Añadió que dos jóvenes quedaron heridos tras la represión de la GNB: uno de ellos recibió 18 perdigonazos y a la otra la rozó una metra en la cabeza. Ambos se encuentran fuera de peligro.
En estas residencias causaron destrozos en el salón de fiestas, rompieron el espejo del baño y reventaron el correo, la cartelera y espejos. En el edificio Conchita también sufrieron daños.
En la herradura sur de las calles 2 y 3A, y la calle 2 de la herradura norte, también agredieron a las garitas de vigilancia, rompiendo sus vidrios de seguridad y cámaras. “Tenemos en resguardo el video de la cámara donde se ve a los funcionarios cuando entraron con las tanquetas”.
Añadieron que oyeron muchísimas detonaciones, además del gas que arrojaron. “Esos eran tiros y tiros, fue horrible. Estuvieron en el puente 5 de Julio y se oían muchos tiros”.
Denunciaron que durante “el platón” se registraron robos en la autopista Francisco Fajardo por parte de sujetos, que presuntamente bajaron de algunos sectores de Petare, aprovechando la ocasión.
El pasado 2 de mayo, los vecinos de la calle 3A de La Urbina sufrieron más de siete horas de represión y fueron atacados por grupos paraestatales, mientras la GNB se encontraba en la zona. Los militares no actuaron.
En las residencias Los Mangos abrieron un boquete por el cual entraron al estacionamiento y desvalijaron vehículos. Varios apartamentos sufrieron quemaduras por las lacrimógenas que les arrojaron.
Fotos: Yohana Marra
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