En zonas como El Valle y Coche, los vecinos denunciaron que los miembros de los consejos comunales se distribuyeron varios de los pocos perniles que aparecieron.

Caracas. Entre gallos y medianoche repartieron a dedo el pernil navideño en varios sectores del municipio Libertador. Las piezas de carne llegaron contadas y, según denuncias de los vecinos, gran parte se lo repartieron entre los integrantes del consejo comunal y sus allegados.

En varios sectores de la parroquia Coche ni siquiera avisaron a la comunidad de la llegada de las piernas de cerdo.

Por el movimiento de los voceros comunales que salían de una casa fue que nos dimos cuenta de que estaban repartiendo unos números. Pero solo lo dieron a sus allegados, no beneficiaron a todos los vecinos, dijo una de las vecinas de Las Veredas de Coche, que pidió mantener su nombre en reserva.

La entrega, en la víspera de Año Nuevo, generó disputas entre los residentes, hubo insultos, gritos y amenazas de golpes.

A unos les dieron número y a otros les pasaron la cuenta para que hicieran la transferencia.Todo quedó entre ellos. No hicieron una reunión. ¿Cómo puede ser posible que, entre vecinos, que nos conocemos toda la vida, estén pasando estas cosas? Ya me había dicho uno de los comuneros que el pernil era solo para los que votaron por el Gobierno en las elecciones del 10 de diciembre. Eso es una discriminación tremenda, se trata de comida, expresó Anabel Díaz —seudónimo que se usa para proteger la identidad de la mujer.

En zonas de El Valle también la distribución del pernil fue a discrecionalidad de los consejos comunales. Los vecinos de un edificio de Los Jardines del Valle comentaron que el 29 de diciembre llegaron 10 perniles. Los voceros comunales se repartieron cuatro entre ellos y rifaron seis. Los vecinos apuntaron molestos que no supieron en qué momento se efectuó dicho sorteo.

En otros conjuntos residenciales se registraron casos similares, llegaron las piezas de carne y los miembros de los consejos se los asignaron a sus familiares y los repartos —relataron los vecinos— los hicieron en horas de la noche.

Para el 30 de diciembre se esperaba la entrega de la carne de cerdo en varias zonas del oeste de la ciudad. Sin embargo, las molestias en las comunidades crecieron. En el barrio El Esfuerzo de Carapita, el Gobierno pretendió rifar las piezas, pero los del consejo comunal rechazaron la propuesta por considerarla una burla hacia el pueblo, dijeron que era una discriminación y que se usó como un elemento político.

En Antímano la situación fue parecida. En varias barriadas, los residentes se quejaron de que los voceros de los consejos comunales no hicieron una justa distribución de los 47 perniles que entregó el Ministerio de Alimentación para cada sector.

En el casco central, el consejo comunal Toromaima quería rifar 25 perniles, pero no convocó a todas las familias, comentó Mayerlin Méndez.

Quienes aceptaron participar en las rifas y quedaron sorteados para recibir un pernil de 5 kilos, el 31 de diciembre en horas de la tarde, fueron llamados por los voceros e informados que debían agruparse en pareja con familiares o mejores amigos para recibir el producto porque habían llegado de 11 kilos.

Estas familias bajaron del barrio y pagaron hasta 10.000 bolívares en carnicerías para picar el pernil en dos. En el sector Carapita Central, los vecinos bajaron en cambote a defender sus piezas porque se enteraron de que unos funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana tenían intención de llevarse los perniles de las personas que hacían cola para picarlos.

Desde hace semanas hay protestas a escala nacional por el retraso en el despacho de las bolsas de comida de los Clap y del pernil. En días pasados, el presidente Nicolás Maduro indicó que los problemas obedecían al “saboteo” de Portugal, lo que fue negado por la cancillería de ese país. Luego, empresas lusas indicaron que el gobierno venezolano les debía 40 millones de euros por la carne importada en 2016.

Después, el ministro de Agricultura Urbana y jefe de los Clap, Freddy Bernal, culpó a Colombia de retrasar el proceso y a través de su cuenta de Twitter dijo que 2200 toneladas están retenidas en el vecino país desde hace siete días. Las autoridades de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) indicaron que no había gestiones por parte de los exportadores para movilizar el pernil. Con todo, el sábado Colombia empezó con el despacho de la carne de cerdo.

Foto referencial: AVN.


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