Escasez de medicamentos para problemas estomacales puede llegar a 100%

Convite A.C. realizó dos mediciones durante el mes de septiembre de la canasta básica de principios activos relacionados con la hipertensión, la diabetes, la diarrea y las infecciones respiratorias agudas, comprobando que hay una escasez con tendencia a alcanzar 100 % de desabastecimiento.

Caracas. Durante la primera semana de septiembre, el Área Metropolitana de Caracas (AMC) presentó índices de escasez “escandalosamente alarmantes”, todos cercanos a 100% de desabastecimiento de medicamentos y principios activos.

El resultado que más inquieta es el índice de medicamentos para la diarrea, con una probabilidad de que solo 1 de cada 100 personas podría tener la oportunidad de acceder a estos fármacos.

A ese resultado llegó la Asociación Civil Convite, la cual realizó dos mediciones —durante el mes de septiembre— de la canasta básica de principios activos relacionados con la hipertensión, la diabetes, la diarrea y las Infecciones Respiratorias Agudas (IRA).

En el caso de la hipertensión arterial, para la segunda semana, mejoró el abastecimiento. El índice se redujo 9 puntos porcentuales, pasando de 97,5 % a 88,5 %, lo propio ocurrió con la diabetes de manera poco significativa.

En cambio, con las infecciones respiratorias, el índice aumentó aproximadamente dos puntos porcentuales, acercándose casi al 100 % de desabastecimiento, mientras que la diarrea se mantuvo casi sin variación.

El estudio hecho por Convite comprendió dos mediciones mensuales ubicadas temporalmente entre el 13 y 14 de septiembre de este año; así como del 26 al 29 del mismo período.

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Se realizó en cinco ciudades capitales: AMC, Barquisimeto, Mérida, Maracaibo y Porlamar. Y se basó en el recorrido técnico por 155 farmacias, en las que se buscó el Indicador de Escasez por Morbilidad (IEM).

El resultado, como se informó al principio, es una tendencia a la falta absoluta de medicamentos, lo cual acarrea gravísimas consecuencias para las personas cuya vida depende de estos fármacos.

En Barquisimeto, por ejemplo, durante la primera semana de medición, los medicamentos asociados a la hipertensión arterial, presentaban 85,8 % de escasez, sin embargo, para la última semana monitoreada, la ausencia ascendió a 92 %.

Lo mismo se encontró para la diabetes, diarreas e infecciones respiratorias agudas, donde los investigadores observaron una tendencia al alza casi cercana al 100 %.

Mientras que los resultados para la ciudad de Maracaibo —tanto para el tratamiento de los problemas estomacales como para la hipertensión arterial— se constituyeron en casi 100 % de desabastecimiento.

Según el informe de Convite, estas cifras sorprenden a primera vista, puesto que se esperaba que por ser el Zulia un estado fronterizo el índice de desabastecimiento arrojara números más bajos en relación con los obtenidos en las otras ciudades incluidas en el estudio.

Por su parte, la situación de desabastecimiento mejora significativamente durante la última semana del estudio: la escasez de los fármacos asociados a la hipertensión arterial se reduce casi a la mitad, pasando de 97,5 % a 54,8 %, bajando casi 43 puntos porcentuales; y lo mismo ocurre con la diarrea, en menor medida, pues se redujo en 39,9 puntos porcentuales, aun cuando esta última morbilidad manifestó en la primera semana un desabastecimiento de 99 %.

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El índice de escasez se reduce igualmente para la diabetes, pasando de 96,1 % a 75,3 %.

En cuanto al análisis comparativo para la ciudad de Mérida, arrojó que durante primera semana de medición, el IEM se mantuvo por debajo de 80 % al menos para tres de las cuatro morbilidades incluidas en el estudio: para la hipertensión arterial fue de 73,1 %, siendo este el más bajo, seguido por la diarrea y la diabetes con 76,9 % y 78,2 %, respectivamente.

En todos los casos, el indicador empeoró para la segunda semana evaluada, principalmente en el caso de las enfermedades infecciosas respiratorias agudas.

Tanto que, según Convite, durante el mes de septiembre fue prácticamente imposible para los merideños encontrar medicamentos destinados al tratamiento de las IRA.

Y en el caso de Porlamar, comparativamente entre la primera semana de medición y la última, la situación se agravó. En tres de las 4 morbilidades, el índice de escasez es superior al 90 %, empeorando con el transcurso del tiempo.

Al igual que en Mérida, se pudo concluir que era prácticamente imposible que los neoespartanos encontraran medicamentos destinados al tratamiento de las infecciones respiratorias.

Para la fecha de publicación de los resultados, la situación en las regiones monitoreadas se mantiene y en algunos rubros incrementó su déficit.

Gráficos: Cortesía Convite


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