“Estoy dispuesto a morir por Venezuela”

La marcha que salió de Coche, El Valle y Santa Mónica se encontró a su paso con barricadas de oficialistas, quienes gritaron algunas consignas a favor del Gobierno. Del edificio de la Misión Vivienda que está en el sector Las Malvinas lanzaron algunos objetos, pero ninguno de esos ataques superó la represión con gas y perdigones que soportaron una vez que llegaron a la autopista Francisco Fajardo.

Caracas. Con un arnés médico y un bastón, con más de ocho décadas encima y con la fuerza de la voz reducida, un señor imploraba a los funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que dejarán pasar la marcha opositora hacia la autopista Francisco Fajardo. “Estoy dispuesto a morir por Venezuela”, le dijo en la cara a uno de los funcionarios. Por su puesto, la petición de este señor no fue escuchada. Una cuadra más atrás, una multitud —los vecinos de Coche, El Valle y Santa Mónica— esperaba impaciente.

No pasaron 10 minutos de la súplica del señor cuando dos bombas lacrimógenas ya estaban en el aire. La gente se dispersó para evitar los gases, pero de inmediato se agrupó y siguió la marcha hacia Los Chaguaramos y Bello Monte.

9:00 a. m. Los vecinos de la parroquia Coche no perdieron tiempo y se agruparon bien temprano con sus banderas y pitos en los alrededores del liceo Pedro Emilio Coll, en plena intercomunal Valle-Coche. A la cabeza de la concentración pautada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en defensa de la democracia, estaba el diputado a la Asamblea Nacional José Guerra (Primero Justicia). Ya tenían aviso de que grupos oficialistas estaban desplegados por la parroquia El Valle, lo que obligó al desvío de la marcha en tres oportunidades.

Los opositores gritaban “y va a caer, y va a caer, Maduro va a caer”. A los que se asomaban a los edificios les decían: “Pueblo, únete a la lucha”. Los camioneteros tocaban sus cornetas; mientras las cacerolas retumbaban a lo largo del camino.

El paso de la manifestación por los Jardines de El Valle no tuvo contratiempos. A cada cuadra se sumaban más seguidores y la marcha, que salió ocupando cerca de una cuadra, cuando llegó a El Valle superaba las tres.

A las 10:00 a. m. ya estaban pasando por el sector Cerro Grande, donde no más de 20 personas con franelas rojas gritaban consignas a favor del Gobierno. Los opositores pasaron sin caer en provocación y cuando llegaron a Longaray, la tensión se apoderó de la primera avanzada, pues otro grupo —muy reducido— lanzaba cohetones.

Llegando a la plaza El Valle se desviaron y pasaron por la urbanización Alberto Ravell, debido a que los chavistas tenían tomada la avenida Intercomunal. Ese cerco rojo pudieron pasarlo sin problemas, así como también lograron burlar la provocación desde la Misión Vivienda ubicada en el sector Las Malvinas. De ahí lanzaron objetos a los marchantes, pero pudieron llegar ilesos a Santa Mónica.

11:15 a.m. “Aquí estamos los vecinos de Coche y El Valle”. Con esa consigna llegaron a Santa Mónica, donde los esperaban para tomar la autopista Valle-Coche y dirigirse a la Defensoría del Pueblo.

Los diputados Guerra y Dinorah Figuera intentaron negociar con los funcionarios de la Guardia Nacional para que les permitiera pasar a la autopista, pero el militar a cargo dijo que tenía orden de lanzarles bombas.

Un señor de la tercera edad intercedió para condoler a los funcionarios y, en respuesta, lanzaron las primeras dos lacrimógenas y luego otras cuatro. Se armaron varias escaramuzas en el sitio, pero el músculo de la marcha —en su mayoría— decidió seguir a la autopista por la vía de Los Chaguaramos.

11:45 a.m. Un fuerte cordón policial les impidió acceder a Plaza Venezuela. A esa altura ya estaban incorporados varios indígenas y su representación ante el Parlamento Nacional. Se presentaron con su indumentaria tradicional. También sacerdotes y monjas caminaron pacíficamente.

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Llegando a Bello Monte el olor a gas lacrimógeno se apoderó de los marchantes, que no titubearon y llegaron a la autopista, incluso zanqueando los tubos que cruzan el río Guaire.

Los dos pisos de la autopista Francisco Fajardo desbordaron gente, del este y del suroeste llegaron hasta por los caminos verdes.

12:14 m. La muralla formada por los funcionarios de la GNB que estaba a la altura de El Recreo se mostró ante los opositores como el enemigo impaciente. Apenas vieron llegar a los opositores, la lluvia de lacrimógena no paró.

Los marchistas se lanzaron a las orillas del río Guaire. Por Ciudad Banesco, por El Recreo y hacia Sabana Grande hubo refriega hasta bien entrada la tarde.

En medio de los que marchaban se colaron los encapuchados que lanzaron bombas molotov. También despegaron postes del segundo piso de la autopista y con ellos hicieron barricadas. En las calles laterales hacia Sabana Grande prendieron varias candelitas y fueron emboscados por unidades motorizadas.

La marcha comenzó a disgregarse. La gente trató de ponerse a salvo de los gases, pero a más de uno se le vio caer al piso debido a la asfixia. Hubo señoras que rodaron por el pavimento. Como ya no había dirección respecto al sentido de la marcha, las personas en grandes grupos corrían de un lado a otro, desesperadas. Las bombas caían hasta en el sitio menos esperado. El miedo se vio reflejado en los rostros de quienes saltaban de la autopista, pero a la vez hubo expresiones de impotencia ante el desmedido ataque de la GNB.

Se observó que los muchachos se protegían entre ellos para evitar ser detenidos y marcaban las rutas de escape por calles menos concurridas, en vista de que incluso estaban siendo perseguidos por el helicóptero militar.

Hubo narices, frentes y rodillas rotas en medio de las escaramuzas. La brigada de estudiantes de medicina se desplegó a lo largo de la autopista para socorrer a los golpeados y desmayados. Más de 40 lesionados reportaron desde Salud Chacao.

Se denunciaron robos de celulares. Incluso por los lados de Bello Monte un presunto atracador se lanzó al río tratando de escapar de una golpiza, pero no se salvó de los peñonazos.

2:45 p.m. Con la gente replegándose hacia El Recreo, Chacaíto y Las Mercedes, la autopista Francisco Fajardo se vació y varios tramos fueron tomados por equipos antimotín.

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En Bello Monte, los protestantes armaron barricadas con piedras y troncos quemados y hacia los lados de Chacao se desplegó otro grupo de marchistas. Las rejas de la Base Aérea de La Carlota fueron tumbadas en varios tramos, la tanqueta de la Guardia se metió a la autopista y aumentó la represión. Para el cierre de esta nota todavía se reportaba disturbios en esa zona del municipio Chacao.

A la Fajardo llegaron Henrique Capriles, gobernador de Miranda; el alcalde de Baruta, Gerardo Blyde; María Corina Machado, de Vente Venezuela; los diputados José Guerra (PJ), Henry Ramos Allup (AD) y Miguel Pizarro (PJ). Cada uno hizo acto de presencia por separado e igual se vieron afectados por las bombas. Celebridades, como Norkys Batista, también pretendieron llegar hasta la muralla de la GNB.

Fotos: Mabel Sarmiento