Falta de hostias y precios de velas, túnicas e incienso empañan la Semana Santa

Las Siervas de Dios, que fabrican las hostias, no tienen harina desde la semana pasada. A ello se suma que la feligresía no dispone de efectivo para comprar los artículos religiosos.

Caracas. Las hermanas Siervas de Dios, una de las casas fabricantes de hostias, se quedaron la semana pasada sin harina de trigo. En consecuencia, justo en la época de mayor demanda del año, están limitando los envíos de esta oblea que simboliza el cuerpo de Cristo.

Alba Rosa Arreaza, hacedora de hostias, dijo que, aunado a las fallas de luz está la escasez de este ingrediente principal y aseguró que, por lo menos, para esta Semana Santa garantizan la cobertura de las principales parroquias, aunque con baja dotación.

Es decir que, si los curas les pedían 10.000 unidades, solo pueden enviarles la mitad, principalmente en los templos grandes como Catedral, El Valle, la Milagrosa, La Coromoto y San Benito.

Este taller ubicado en la parroquia Altagracia tiene una producción de aproximadamente 20.000 unidades por día y suministra además a otros estados, a los cuales les está enviando también la mitad de la demanda.

En 2017 también enfrentaron una severa escasez de harina de trigo.

Según Alba Rosa, en estos momentos Mérida es el que está más crítico. “Ya se quedaron sin hostias”, dijo.

Hay casos en los que padres sustituyen este alimento por pedazos de pan para continuar con el acto religioso.

Las orquídeas las venden en Bs. 50.000 en efectivo.

Pero no solo la merma en la producción pone en tres y dos las festividades religiosas. Hay otros elementos propios de la Semana Santa que podrían quedarse fuera de la tradición este año: las túnicas moradas, las velas, las estampitas, los rosarios y el incienso tienen costos que no son nada santos. A la par, está el tema de la falta de efectivo.

Una túnica, que se usa principalmente el Miércoles Santo, no baja de los Bs. 350.000; una franela con motivo religioso ronda los Bs. 450.000 y 100 gramos de incienso se consiguen en Bs. 60.000.

Hasta las velas son un lujo para la feligresía. El cajero me dio Bs. 10.000 y eso es lo que cuesta una vela pequeña. No la pude comprar, ahora ni eso, comentó Griselda Ramos, quien echaba un vistazo en los tarantines que colocan en los alrededores de la Basílica de Santa Teresa.

“Eso que le pasa a la señora le sucede a todo el mundo aquí. Las ventas están muy malas y no es solo por los costos, sino también la falta de efectivo. ¿Cómo uno le pide a alguien que traiga 400.000 bolívares para comprar una túnica?”, dijo Omaira Vizcaino, vendedora con siete años de trabajo en la plaza.

Las orquídeas, que suelen donarse al Nazareno de San Francisco para su decoración, cuestan Bs. 50.000 en efectivo y Bs. 150.000 si se paga en un punto de venta.

Y es que no se puede. El año pasado una caja de velas costaba Bs. 150.000 y ahora pasa del millón de bolívares. Lo mismo con el incienso que lo venden hasta en 5 millones de bolívares. Pero nosotros mantenemos la fe de que por lo menos el martes, cuando las misas comienzan a partir de las 9:00 p. m. en adelante, la cosa mejore. Esta tradición no se puede perder, acotó Vizcaino, mirando a lo largo de la plaza, donde este año solo se han podido colocar cinco vendedores.

Fotos y video: Mabel Sarmiento Garmendia


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