En un acto de campaña celebrado este miércoles 9, en la plaza El Venezolano, la burgomaestre perteneciente al partido de gobierno, PSUV, dijo que después del 20 de mayo hay que radicalizar la revolución y, en su caso, lo hará transfiriendo poder al pueblo para que regule el transporte público.

Caracas. Sin ningún prurito en la lengua, la alcaldesa de Caracas, Érika Farías, dijo que a partir del 20 de mayo la revolución se profundizará. “En tiempos de crisis hay que radicalizar”. Y en su caso, haciendo uso de la transferencia de competencias, indicó que está buscándole solución al problema del transporte público en el municipio y que para ello va a vincular al pueblo. Dejó en las manos del soberano, como suele llamarlo, el manejo de las rutas, concesiones, horarios y tarifas.

Como alcaldesa soy la que firmo las rutas y las concesiones de las líneas de transporte que operan en Caracas, pero como alcaldesa tengo la competencia de ley de las tarifas, de las rutas, de dar las concesiones. En la agenda de Érika después del 20 de mayo, está el transferir al pueblo organizado esas competencias, a ver si de verdad los transportistas van a poder más que nosotros. Cada comunidad decidirá qué ruta debe operar, destacó.

El público que la escuchaba aplaudía cada frase de la funcionaria. Se escuchó decir: Está muy bien eso, así no siguen abusando. Vamos a meterles mano a esas concesiones, ahora serán del pueblo.

La otra cara de la moneda

En Caracas, el transporte está agrupado en cinco bloques, para un total de 327 líneas. Para septiembre de 2017, había 42.450 camionetas accidentadas, de una flota de 65.400. Es decir, estaban rodando solo 22.800 en los cinco municipios.

Las causas son las habituales: escasez y alto costos de insumos y repuestos por la falta de entrega de divisas al sector desde 2007.

A la fecha, los bloques calculan que queda 15 % prestando el servicio a medias, por tanto, no se cubre la ruta completa ni los horarios establecidos. Por citar un caso, la parroquia Caricuao, con 13 organizaciones que agrupaban 800 unidades entre troncales y urbanas, en la actualidad solo tienen funcionando aproximadamente 100 carros

Basta ver las paradas de zonas como El Valle, las avenidas Baralt, Fuerzas Armadas, los alrededores de Plaza Venezuela y los terminales de la periferia, para medir el flujo de usuarios que pasan hasta dos horas esperando por una camioneta de la línea.

Ahora es más común ver circular a los llamados piratas y a los camiones que la gente llama “perreras”. Cobran a partir de Bs. 5000, incluso Bs.  10.000 en un trayecto que va de Plaza Venezuela a Coche; Bs. 7000 de la carretera vieja Caracas-La Guaira a Catia, por ejemplo.

Sobre la medida expuesta por Farías, Crónica.Uno buscó reacciones de los grupos de transportistas. Mostraron preocupación y para el momento de publicar esta nota estaban organizando las ideas para asumir una posición.

Foto: Francisco Bruzco

Video: Mabel Sarmiento Garmendia


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