Guaidó: Me apego al 233, 333 y 350 y convoco al pueblo y a la FANB a la transición

En un cabildo abierto realizado en Caracas, la Asamblea Nacional y los ciudadanos juraron luchar juntos hasta sacar a Maduro del poder. El presidente del Parlamento convocó a una protesta para el 23 de enero próximo. Representantes de la sociedad civil le exigieron a la AN “cumplir su responsabilidad”. Asistentes a la actividad saludaron que Guaidó “no cometiera errores del pasado autoproclamándose presidente”.

Caracas. Aunque la Constitución de 1999 establece en su artículo 70 que los cabildos abiertos son una de las instancias de participación popular y que sus decisiones tienen carácter vinculante, el cabildo abierto convocado por la Asamblea Nacional para este viernes en Caracas terminó sin que los asistentes tomaran decisión alguna. Sirvió más bien para que fueran notificados de las acciones que planea el Parlamento y para que diversos sectores de la sociedad opositora ratificaran su apoyo a los diputados.

El cabildo se realizó en las afueras del edificio Parque Ávila (Torre Hewlett-Packard) en la avenida Francisco de Miranda. La selección del sitio no fue casual: allí está ubicada la oficina del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), representación oficial de la ONU en el país. Una representación que, por cierto, acompañó a Maduro en el acto realizado el pasado jueves en el TSJ.

El discurso central de la actividad fue el último, el del presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó (VP-Vargas), quien fue recibido por los asistentes con el grito de “¡Guaidó presidente, Guaidó presidente!”.

Luego de escuchar con atención todas las intervenciones, Guaidó invocó la Constitución, el apoyo popular, internacional y de la Fuerza Armada, como únicas garantías de llevar con éxito un proceso de transición.

Me apego a los artículos 233, 333 y 350, que me dan la legitimidad para ejercer la encargaduría de la presidencia de la República, dijo.

Pero de inmediato aclaró: Como todos sabemos, esa presidencia está siendo usurpada, y no basta con apegarnos a los artículos de la Constitución. Para hacerlo realidad necesitamos la sumatoria de la fuerza nacional e internacional. Por lo tanto, convoco al pueblo de Venezuela, a la Fuerza Armada y a la comunidad internacional para lograr la conformación efectiva del Gobierno de transición que convoque elecciones libres, de acuerdo con los artículos 333, 350 y 233 de la Constitución nacional.

Las afirmaciones de Guaidó generaron confusión al equipo de prensa de la AN y de su propio partido pues en un comunicado oficial reportaron que el dirigente de VP había asumido las competencias presidenciales. El primer vicepresidente de la AN, Edgar Zambrano (AD) aclaró a Crónica.Uno que se trató de una mala interpretación:

Lo que él hizo fue invocar los artículos mencionados para abrir el camino al gobierno de transición. Y para ello pidió el apoyo del pueblo, la comunidad internacional y la Fuerza Armada. Pero en ningún momento se proclamó presidente de la República.

Volviendo al acto, el presidente de la AN también aprovechó el cabildo abierto para convocar una protesta nacional contra la usurpación de la presidencia para el próximo 23 de enero y ratificó que el Parlamento prepara un Decreto de Amnistía para los militares y civiles presos políticos.

Respaldo ciudadano

Diputados y ciudadanos juraron luchar hasta restituir la Constitución de 1999. Foto: Gleybert Asencio

El acto tuvo tres fases: derechos de palabra para la sociedad civil —que ya estaban preacordados—, derechos de palabra para los diputados de los principales partidos de la oposición y discurso de Guaidó.

Las intervenciones estuvieron matizadas por consignas que llamaban a la unidad de la oposición, calificaban a Maduro de usurpador y clamaban la aplicación del artículo 233 de la Constitución. Como se sabe, este artículo señala que ante la ausencia del presidente para la toma de posesión del cargo, corresponde al presidente de la AN tomar su lugar y convocar elecciones presidenciales en 30 días. Desde el 5 de enero, tanto Guaidó como diversos dirigentes de la oposición han explicado que ese artículo no se puede aplicar si no se cuenta con el respaldo popular, institucional, militar e internacional necesarios para garantizar su efectividad.

Tomaron la palabra los jóvenes y estudiantes Rafaela Requesens (UCV), José Riera (Congreso de Juventudes), Marlon Díaz (UC); el representante del chavismo disidente, Nicmer Evans; el dirigente José Elías Torres en nombre de la Unidad de Acción Sindical; la representante del movimiento de mujeres del Frente Amplio, Belsai Yánez; y el dirigente vecinal de Caracas, Carlos Julio Rojas.

Todos coincidieron en dos aspectos. Uno, exigirle a la AN asumir su responsabilidad y ofrecerle su respaldo en las acciones que emprendan. Y dos, instar a los soldados y oficiales de la Fuerza Armada así como a los chavistas que “siguen secuestrados” para que depongan su respaldo a Maduro y defiendan la Constitución del 99.

Los diputados Miguel Pizarro (PJ), Williams Barrientos (UNT), Williams Dávila (AD) en nombre de la bancada de la Unidad, se encargaron de explicar por qué la AN no designó a Guaidó presidente interino, que el Parlamento está dispuesto a asumir la responsabilidad histórica que tiene enfrente pero que no lo hará de forma desordenada; y que el respaldo de la Fuerza Armada y de los funcionarios que hasta ahora han apoyado al Gobierno es fundamental para el éxito de la transición.

Desde el acto de ayer [jueves] Maduro se convierte en un presidente de facto porque rompe con la Constitución y es desconocido por el pueblo y la comunidad internacional. ¿Por qué era importante no pisar el peine ayer de nombrar a Guidó presidente? Eso es lo que ellos querían para justificar una radicalización de un proyecto al margen de la ley. Lo importante es que Guaidó es reconocido como presidente sin lugar a dudas por toda la comunidad internacional, dijo Barrientos.

Dávila, por su parte, pidió a los asistentes y a los diputados jurar “luchar hasta sacar a Maduro del poder, ustedes acompañar a esta Asamblea y nosotros acompañarlos a ustedes en esta lucha hasta el final”. Todos juraron con la mano derecha en alto.

Piden no repetir errores

La actividad que inició una hora después de lo fijado logró una asistencia regular. Para las 11:55 de la mañana habían copado la plaza frontal del edificio y los seis canales de tránsito en sentido este y oeste de la avenida frente a la torre. Y terminó a la 1:15 de la tarde.

Una de las asistentes, Carolina Dumas, calificó de interesante la convocatoria a cabildo abierto: Es el primer llamado para reactivar a la oposición, es la primera expresión ciudadana después de la pantomima que vimos ayer [jueves], de la coronación de un rey de papel. En lo personal estoy muy de acuerdo con la convocatoria realizada para el 23 de enero. Nos toca agarrar las riendas de la transición, ya no es momento de críticas. Todos tenemos que colaborar con la transición.

Ana Isabel D’Urso sostuvo que la asamblea fue una buena manera de reactivar a la gente “que pasó 2018 tristes y metidos en la casa”. Saludó los discursos y la amplia representación ciudadana que tomó la palabra. Pienso que las palabras de Guaidó fueron las apropiadas. Aún nos faltan las Fuerzas Armadas Nacionales, ellos tienen las armas. Nosotros solos en la calle somos blanco fácil para un gobierno al que no le importa matarnos. Yo no quiero más muertos, dijo.

Aunque algunos asistentes pedían la aplicación del 233, D’Urso opinó: “Creo que Guaidó hizo lo correcto al no autonombrarse presidente. No podemos cometer los mismos errores del pasado”.

Por su parte, Héctor Arenas consideró la actividad como un escenario propicio para la reunificación de la oposición y coincidió con D’Urso: Estoy de acuerdo con que Guaidó no se haya ido por el camino del 233 y autonombrarse presidente porque eso significaría un preso político más y no queremos un presidente de la Asamblea Nacional preso.

Fotos: Gleybert Asencio


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