Hidrocapital hace caso omiso a las denuncias de los vecinos. En la misma calle hay poca iluminación y las aceras están en mal estado
Caracas. “Yo creo que todos los vecinos hemos hecho la denuncia a Hidrocapital, pero no nos paran, me piden mi nombre y el número del celular y no hacen nada”, así de tajante fue el comentario de Alfonso Hernández, vecino de residencias Los Ceibos, quien denunció que desde hace más de tres meses hay un bote de aguas blancas que poco a poco ha ido deteriorando el asfalto en la avenida Intercomunal de El Valle.
“Cuando se comenzó a filtrar el agua era un hueco pequeño, pero con el paso del tiempo se hizo más grande y dañó todo”, dijo Pedro Terán, dueño de un quiosco en esa calle.
Esta semana se socavó una parte del pavimento de aproximadamente sesenta centímetros de diámetro. Los habitantes del sector aseguran que en el hueco han caído carros y hasta camionetas por puesto.
Al frente de las residencias Los Ceibos desde hace un año y medio se construyen varios edificios de la Gran Misión Vivienda Venezuela. Justo en el portón por donde entra la maquinaria para la construcción está la tronera. Los choferes de los camiones tienen que ingeniárselas para ingresar a la obra sin caer en el agujero y dañar los cauchos.
“El bote de agua todo el día, el peso de la maquinaria pesada y las camionetas por puesto que siguen su ruta, hizo que se socavara esta calle”, detalló Raúl Espejo, también residente de Los Ceibos.
Mientras el equipo de Crónica.Uno estuvo en el lugar pasó justo por encima del agujero un camión con obreros de Hidrocapital, pero siguieron de largo. Los vecinos le atravesaron un palo para alertar a los choferes y motorizados.
La avenida Intercomunal tiene tres canales de circulación, pero el hueco que ya se convierte en hundimiento inhabilita uno, por lo que el congestionamiento vehicular es incesante. Los vehículos pasan por el canal del medio que igual está afectado por la filtración y también allí está creciendo un cráter.
“Los carros pasan y salpican el agua a la acera. Yo estaba un día comprando el periódico y un carro me bañó todo. Pero ¿qué le voy a reclamar al chofer? No es su culpa”, comentó Alfonso Hernández preocupado porque este tramo puede colapsar si no es atendido con urgencia.
Llueven las penas
Otro problema que enfrentan los habitantes del sector es la falta de iluminación en la calle. “Yo cierro el quiosco asustado. Esta calle después de las 6:00 pm es una boca de lobo. El poste de luz más cercano está justo en la entrada de Tiuna El Fuerte y, de paso, está dañado”, detalló PedroTerán.
Como en la zona no hay ni un poste de luz los habitantes optan por no andar en la calle pasadas las 7:00 pm. Y por si fuera poco, las aceras están de mírame y no me toques. Tienen desniveles como consecuencia de las raíces de algunos árboles que no reciben mantenimiento.
“Mi mamá tiene 94 años y siempre es un peligro para ella caminar por allí. Queremos que vengan los bomberos o alguien a cortar el árbol que está al frente de la residencia Los Ceibos, porque ya ni sombra da y lo que hace es estorbar”, finalizó Alfonso Hernández.
Fotos Cristian Hernández
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