Una vez más el Gobierno restringe el libre tránsito vehicular y cierra estaciones del Metro de Caracas para evitar avance de las marchas convocadas por la oposición. Esto generó caos durante todo el día, pero fue más fuerte en horas de la tarde cuando la gente se quedó varada en las paradas.

Caracas. El cierre de 16 estaciones del Metro de Caracas y la restricción vehicular por parte del Gobierno de las principales avenidas de la capital, este jueves 6 de abril, generó molestias en los ciudadanos que como plan B debieron usar el transporte público. Desde muy temprano se observó el colapso en las paradas y las unidades pasaban full, tal cual “latas de sardinas”, como refirieron algunos pasajeros.

Pero a medida que pasaron las horas, la situación se tornó más caótica, pues ya en la tarde había menos busetas prestando servicio y las que pasaban no cumplían la ruta establecida.

Decenas de pasajeros tuvieron que hacer largas caminatas hasta llegar a sus destinos. Otros aguardaron con paciencia en largas e interminables colas. Donde se observó mayor colapso fue en los alrededores del centro del municipio Libertador, en Plaza Venezuela y Chacaíto.

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En la avenida Urdaneta, después de las 5;00 p. m. el caos reinó de punta a punta. La cantidad de gente que esperaba el transporte público abarrotaba los bordes de las aceras. Las estaciones del Metro más cercanas -a tres cuadras- Capitolio, La Hoyada, Parque Carabobo, Bellas Artes, a esa hora todavía estaban cerradas.

En la avenida Universidad, solo estaba permitido el paso hasta la esquina El Chorro. Allí habían varios policías desviando todos los vehículos. Esa arteria vial estaba cerrada mientras desmontaban la tarima que trancó la calle, por la concentración oficialista que marchó hasta la Asamblea Nacional.

Los que quizá se iban a movilizar a zonas cercanas, caminaban hasta llegar a su destino. Frente a la plaza Rafael Urdaneta, de La Candelaria, el bululú de gente no era normal, como tampoco lo era en la parada de Los Salesianos.

En ambos sentidos de la Urdaneta, y la avenida Andrés Bello, las camionetas por puesto no se daban abasto para recoger los usuarios. La estación del Metro, Colegio de Ingenieros también estuvo cerrada durante todo el día.

La avenida Nueva Granada, a la altura de El Peaje, fue epicentro de desespero por parte de los usuarios. “Imagínate vengo caminando desde la esquina El Socorro, me da miedo por la hora, pero como vi gente decidí seguir. o se pueden agarrar las camionetas pasan full”, declaró Justina Díaz, quien vestía uniforme del Saime.

Durante el recorrido no se observó presencia policial. Los transeúntes trataban de caminar acompañados para resguardarse. Pese al desorden el gobierno local no desplegó un operativo para trasladar a los pasajeros varados, tras la jornada de concentraciones y protestas, unos a favor de la Constitución Bolivariana y otros en defensa de las elecciones libres, de la Asamblea Nacional y la democracia.

Foto referencial Luis Miguel Cáceres


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