Zonas foráneas del estado siguen siendo las más afectadas con hasta seis horas de racionamiento.
Maracaibo. La administración de carga, que lleva más de 10 meses aplicándose en el Zulia, continúa, aun después de que el ministro de Energía, Luis Motta Domínguez, anunciara el pasado domingo la reactivación de Termozulia 1, con la generación de 150MW y la reconexión del cable sublacustre del Lago de Maracaibo.
“Todo sigue igual”, dijo Matilde Balza, habitante de la parroquia San Isidro al oeste de Maracaibo. “Esas promesas se las come un burro por paja, porque aquí la luz se sigue yendo. Ayer estuvimos seis horas sin luz y hoy igual, desde la madrugada estamos a oscuras. Uno no puede comprar nada porque todo se echa a perder, ya estamos hartos, no tanto de los cortes de luz sino de las mentiras de ese señor”.
Los municipios foráneos como Machiques, Villa del Rosario de Perijá, Costa Oriental del Lago, Jesús Enrique Lossada y Mara siguen sufriendo los embates de los cortes eléctricos por más de seis horas e incluso días enteros, como es el caso de la Guajira. Renato Aguilar, habitante de Los Filúos, comentó que en esa zona no hay apagones, sino “alumbrones”.
“Es difícil, pero uno se va acostumbrando a hacer todo sin luz. Los que más sufren son los muchachos porque pasan bastante calor, la gente mayor tiene que mantener un cartón pata echarse fresco y en las noches ni hablar, los zancudos nos llevan en peso”.
En Maracaibo el escenario sí cambió. “Pasamos de la oscuridad al atletismo”, comentó Javier Núñez, ingeniero. “Nos tienen en una sola guachafa, ahora no se va la luz, sino que tenemos que estar corriendo a cada rato para desconectar los pocos aparatos buenos que nos ha dejado esta gente. Aquí hay hasta seis bajones al día, ya se nos dañó otro aire y nadie responde por los daños. El hombre (Motta Domínguez) dijo el domingo que no se iba a ir más la luz y lo cumplió, ya no hay sistema de corte, pero volvieron los bajones, que es peor, yo no sé hasta cuándo miente esta gente”.
María Mercedes Urdaneta, maestra, comentó que en el sector La Rotaria, al oeste de Maracaibo, no ha dejado de fallar el sistema eléctrico “ni un solo día” y que las interrupciones eléctricas son de cuatro a seis horas. Sin embargo, en la Unidad Educativa donde labora, solo se producen los llamados bajones.
“Cada vez es más fuerte y hasta peligroso diría yo, el tema de los bajones. El lunes, recién arrancando los niños las clases, a las 10:00 de la mañana, hubo un bajón y seguidamente dos más, eso ocasionó un corto circuito en uno de los aires acondicionados del salón de primer grado y explotó. Todos estábamos horrorizados y los niños muy nerviosos. Tuvimos que retirarlos del plantel y llamar a sus padres. Creo que esto que estamos viviendo no es justo y menos que, supuestamente, arreglen algo y enseguida adviertan sobre nuevos ‘y que sabotajes’. Que le inviertan al sistema eléctrico es lo que tienen que hacer, hasta cuándo”.
Comercios en jaque
Los comercios de la ciudad siguen afectados. Los pocos que quedan y que, aun con las interrupciones, se atreven a subir la santamaría registran pérdidas de hasta 85 %. Carlos Briceño es dueño de un negocio de víveres. Para él, permanecer en el mercado es un acto de valentía:
“Aquí abrimos porque se está consiguiendo el efectivo y ya un poquito más de gente paga de esa manera, pero el punto de venta es un serio problema. Las plataformas bancarias y las telecomunicaciones no levantan cabeza. Las pérdidas que registro a diario son de hasta 90 %, porque hay días en los que no se vende nada. Lo peor es que tuve que dejar productos perecederos porque, con el tema de la electricidad, todo se daña incluyendo las cavas. Este año ya he repuesto seis reguladores de voltaje”.
La promesa
El ministro del Poder Popular para la Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez, aseguró que las largas horas de interrupción del servicio eléctrico terminaron, pero advirtió: “siempre y cuando no reincidan los ataques al Sistema Eléctrico Nacional. Debemos estar alertas, trabajar de la mano con los consejos comunales, porque van a seguir queriendo sustraer material estratégico que tanto debilita a los servicios de la nación”.
No descartó que ocurran interrupciones del servicio por nuevos “actos terroristas y de sabotaje”, como incendios, explosiones, derribado de torres, robo de cables y equipos o por causas naturales como lluvias, descargas atmosféricas, inundaciones o caídas de árboles sobre las líneas de tendido eléctrico.
Así mismo, señaló que pueden generarse interrupciones por fallas técnicas como falta de transformadores, conectores, fusibles, seccionamiento de un cable o desprendimiento de aisladores. “La administración de carga de tantos días, de tantas horas, se suspende con la inauguración de Termozulia 1 y la reconexión del cable submarino”.
Por su parte, el presidente de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) recordó que continúan trabajando para la recuperación del cable, situado debajo del puente Rafael Urdaneta, que fue “saboteado” a principios de año.
“Pero no tengan ni la más mínima duda, que lo vamos a reparar y reconectar nuevamente, porque Copoelec, la Gobernación del Zulia y el Gobierno revolucionario de nuestro presidente Nicolás Maduro van hasta la victoria siempre”, expresó.
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