Los venezolanos sin nada que celebrar a 70 años de la Declaración Universal de los DD. HH.

El artículo 25 de la Declaración Universal de los DDHH, referido al derecho a un nivel de vida adecuado, en Venezuela ha quedado sepultado. El deterioro de los derechos económicos, sociales y políticos es una muestra de las restricciones y limitaciones que los venezolanos enfrentan día a día en busca de la subsistencia.

Caracas. Lo extraordinario se ha vuelto rutina: Los venezolanos están en “modo” supervivencia: sin agua, sin luz, sin alimentos, sin medicamentos, sin vestido, sin empleo. Un nivel de vida adecuado dejó de ser una posibilidad para muchos. Hace 70 años se firmaba en París la Declaración Universal de los Derechos Humanos en la Asamblea General de las Naciones Unidas. Resultó proclamada y adoptada por 56 Estados miembros de la ONU, entre ellos Venezuela.

El reconocimiento a la dignidad humana quedó recogido en 30 artículos que tienen como centro la libertad, la justicia y la paz.

El artículo 25, referido al derecho a un nivel de vida adecuado, en Venezuela ha quedado sepultado. El deterioro de los derechos económicos, sociales y políticos es una muestra de las restricciones y limitaciones que los venezolanos enfrentan día a día en busca de la subsistencia.

Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez y otros casos de pérdida de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad, refiere el artículo 25 de la declaración.

Las cifras sobre la situación social del país que han levantado importantes instituciones son una muestra: 82 % de la población, equivalente a 28.621.000 de personas, no recibe agua de manera continua y la que recibe esporádicamente es de dudosa calidad o no potable, apunta el reporte sobre la Emergencia Humanitaria Compleja en el Derecho al Agua.

La FAO, en un reciente informe publicado la primera semana de noviembre, contabiliza 3,7 millones de personas subalimentadas. Mientras que la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida indicó que 28 % de los escolares no asistieron a clases en 2018 por falta de agua, 22 % por carencia de alimentos en el hogar y 13 % en la escuela. Los 12 meses en hiperinflación han pulverizado el salario. En lo que va de año hasta octubre la inflación acumulada fue de 287.623,9%.

A 70 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, tenemos una situación difícil en Venezuela. El deterioro cada vez es mayor. Hoy tenemos más pobreza, fallas considerables de los servicios públicos, ausencia de la garantía al derecho de salud, sobre todo, más restricción de la posibilidad y el ejercicio de la libertad de expresión, la manifestación y el derecho al voto en unas elecciones que libres, equitativas, sostiene Marino Alvarado, coordinador de investigación de la ONG Provea.

Para Marcos Gómez, director de Amnistía Internacional en Venezuela, esto es consecuencia de la mala gestión gubernamental, que se ha traducido en una pérdida de la calidad de vida. Nos preocupa muchísimo la crisis de derechos económicos, sociales y culturales que se está viviendo en el país, que se manifiesta con el alto nivel de pobreza, la crisis de salud y de educación. Este gobierno, que tiene un enfoque de justicia social, lo que más ha perdido es precisamente lo que tiene que ver con derechos sociales. Día a día las personas luchan por saber cómo sobrevivir, explicó.

Hasta octubre de 2018 el Observatorio Venezolano de la Conflictividad Social contabiliza 10.773 protestas ante el colapso de los servicios básicos y los derechos laborales

Protestar, documentar y denunciar

Milagros Betancourt, profesora de Derecho Internacional, sostuvo durante su participación en el Foro del Observatorio Venezolano de Prisiones 70 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que, sin un Estado democrático, de derecho y acceso a la justicia, el país no puede estar apegado al cumplimiento de la declaración.

En Venezuela estamos viendo una situación en la cual carecemos de acceso a la justicia. Los organismos no son independientes ni autónomos; sin embargo, la lucha de los defensores en Venezuela es constante y permanente, siempre alzan la voz ante casos notorios y no tan reconocidos, dijo Betancourt.

Destacó la necesidad de apelar a tres verbos clave para ejercer los derechos humanos en Venezuela: Protestar, documentar y denunciar. Alvarado coincide y agrega perseverancia. Esto nos impone el reto de perseverar en la lucha de exigir nuestros derechos, defenderlos, rescatar la democracia y empezar la reconstrucción del país

Foto: Luis Morillo


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