En la Memoria el jefe de Estado dio pocos datos de la gestión 2015. Volvió a anunciar la instalación de mesas con el sector privado y a decir que es necesario subir el precio de la gasolina. Se molestó con la propuesta de dar la propiedad de las viviendas
Mayela Armas/@mayearmas
Caracas. Más de tres horas estuvo el Presidente Nicolás Maduro en la Asamblea Nacional para presentar su Memoria y Cuenta y durante su discurso fueron pocos los datos sobre la gestión económica del ejercicio pasado, sí señaló que las “cifras fueron catastróficas”. Y para afrontar la crisis reedita acciones como las mesas de trabajo con los empresarios, que entre 2013 y 2015 no tuvieron buenos resultados.
El jefe de Estado al tocar el tema económico empezó diciendo que “el 2015 fue la etapa de la revolución más difícil. Un año terrible, porque se intensificó la guerra económica. Cayeron los precios del petróleo y los ingresos en divisas bajaron 62% (…) Propuse planes para la sustitución de las importaciones, que no se cumplieron”.
En ese marco, apuntó que los factores que afectaron la economía fueron: el descenso de los precios del petróleo, la falta un aparato productivo sostenido, la ausencia de alianzas con el sector privado y el ataque “monstruoso a la moneda y al sistema de cambio y la imposición de mecanismos y la vulneración de la vida monetaria”.
Tras insistir en que el país afronta una “guerra económica”, reiteró que aprobó el decreto de emergencia económica que ahora requiere del aval de la Asamblea Nacional y del Tribunal Supremo de Justicia, el cual debe darse en un lapso de ocho días.
El jefe de Estado dijo que “¿cuál es el espíritu de esta emergencia nacional? Impulsar un modelo de recuperación, de garantía de los derechos sociales, un nuevo sistema de distribución”. Aunque el decreto está contemplado por 60 días, prorrogables, expresó que la emergencia económica “ocupará todo el 2016”.
“Esta es la oportunidad de dar el salto o lo hacemos o no hay opciones ante el daño que puede sufrir la Nación”, apuntó el Presidente, quien agregó que “el modelo socialista no es estatista, no es negador de la propiedad”.
No obstante, el decreto de emergencia crea vías para ocupar propiedades, pues indica en uno de sus apartes que “el Ejecutivo nacional podrá requerir de las personas naturales, jurídicas, propietarias o poseedoras, los medios de transporte, canales de distribución, centros de acopio, beneficiadoras, mataderos y demás establecimientos, bienes muebles y mercancía que resulte necesario para garantizar el abastecimiento oportuno”.
Luego de instar a los diputados a aprobar la emergencia, el mandatario informó que el lunes se instalará el Consejo Nacional para la Economía Productiva, coordinado por el Vicepresidente, Aristóbulo Istúriz y el Vicepresidente de Economía, Luis Salas. En el encuentro se crearán otra vez mesas por motores de la economía, donde participarán los empresarios. A la reunión fue invitado el diputado, José Guerra.
Maduro dijo que “hay nueve motores productivos, hay que ver sus problemas y solucionarlos”, y anunció el plan de los 50 rubros para 2016-2018
Las mesas por motores de la economía se han estado realizando desde hace tres años. En 2013 se efectuaron diversas reuniones para evaluar los cuellos de botellas que enfrentaban las industrias para aumentar la producción y allí las autoridades se comprometieron a revisar los trámites y agilizar la entrega de dólares, lo cual no se concretó. Encuentros similares se hicieron a mediados de 2014, cuando además la Vicepresidencia de Economía, a cargo de Rafael Ramírez, tenía un plan de convergencia cambiaria y flexibilización del control de precios, que no se ejecutó.
Al inicio de 2015, en plena crisis de abastecimiento, nuevamente se coordinaron mesas con el sector privado y de esos encuentros no hubo humo blanco. Las industrias siguieron enfrentando problemas para producir y ello se reflejó en los resultados presentados este viernes por el BCV, que señalan que la manufactura en el tercer trimestre del pasado año retrocedió 11%.
Maduro en su discurso dijo que “el pueblo espera respuesta, acciones. Que nadie piense que esas soluciones corresponden a un solo sector y a una sola autoridad, nos corresponde a todos. El pueblo no está en contra de las políticas económicas, está en contra de que no se cumplan, que sean unos falsos positivos como dice Luis Salas”.
En ese contexto, expresó que activó un plan para mantener el cierre de la frontera.
Además de las reuniones con el sector privado, el primer mandatario nacional volvió a tocar el tema del ajuste del precio de la gasolina, que se ha venido repitiendo desde hace tres años.
Comentó que no aumentó el precio del combustible el pasado año, porque “iban a quemar 30 ciudades. Decidí no hacerlo por la paz. Pero hay que hacerlo, llegó la hora de hacerlo”. Añadió que tiene que haber “un nuevo sistema de cobro de los combustibles internos, que sea beneficioso”.
El argumento del jefe de Estado para no subir la gasolina eran las elecciones, sin embargo, en 2014, que no fue un año electoral, la revisión no se hizo y eso que se plantearon dos escenarios de incremento.
Poco balance
De la gestión de 2015 Maduro no dio mayores detalles. El BCV antes de la Memoria y Cuenta informó que la inflación hasta septiembre del pasado año fue 108,7% y la caída de la actividad económica 4,5%. Maduro se limitó a decir que las cifras fueron “catastróficas”.
Señaló que la pobreza por necesidades básicas insatisfechas bajó a 19,1% y que el desempleo en diciembre cerró en 6%.
Destacó que el pasado año se culminaron 326.323 viviendas (81% la meta del 2015) y en la intervención manifestó su molestia con la propuesta de la oposición sobre la ley que otorga la propiedad de las casas construidas en la Misión Vivienda.
“¿Dónde has construido tu vivienda (Tomás) Guanipa, Richard Blanco? No han construido una vivienda. Nosotros hemos hecho un millón y no nos vamos a calar que las privaticen. Tendrán que derrocarme para aprobar esa ley para que privaticen. No, no y no!”, gritó Maduro.
Las viviendas hechas bajo el plan habitacional creado en 2011 han sido adjudicadas y fue a mediados del año pasado cuando el Ministerio de la Vivienda comenzó el censo para empezar a entregar los títulos de propiedad.
Lo que no se dijo
De la gestión de 2015 el jefe de Estado no dijo: la pobreza por ingresos (que es la que refleja el impacto de la inflación), los resultados completos del comportamiento de la economía, la asignación de dólares por parte de Cencoex y Simadi y la gestión de Pdvsa y las empresas estatales.
Y aunque para el 2016 señaló que habrá una emergencia económica no detalló las acciones que se tomarán en las materias cambiaria, de precios, fiscal y monetaria. Tampoco ahondó en el contenido del decreto.
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