En menos de 72 horas, el plantel Fray Pedro de Ágreda, en El Valle, ha sido atacado dos veces por delincuentes. Para el amanecer del lunes se llevaron todo el material del departamento de Sociales y este miércoles, los docentes se encontraron con el hurto de las computadoras de la Dirección.

Caracas. El liceo Fray Pedro de Ágreda, conocido como “el pollito”, ubicado en la parroquia El Valle, está completamente desvalijado. El lunes 29 se informó a través de este medio que en lo que va de año lo habían robado cinco veces. Y no se había enfriado ese ataque cuando de nuevo los malandros incursionan y destrozan toda el área de la Dirección.

Con esa sorpresa se encontró el cuerpo de docentes la mañana de este miércoles. El impacto fue de tal proporción que no pudieron dar clases y, de inmediato, se declararon en asamblea permanente, debido a que no solo se trata del hurto de materia y equipos de oficina, sino que además en los 6 ataques ocurridos este año el plantel quedó en muy malas condiciones: 15 salones deteriorados, se llevaron 35 lámparas, los aires acondicionados, los ventiladores, los microondas —comprados por los mismos profesores—, el cableado eléctrico y desvalijaron la cantina.

En el sexto asalto al plantel, le tocó el turno a las computadoras de la Dirección.

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Cuando los profesores y la comunidad educativa estaban en plena asamblea, llegó José Romero, representante de la fundación Moral y Luces, quien hizo un recorrido por las instalaciones e informó que solo podía encargarse de las reparaciones menores; pero las mayores, como la restauración de la red de tuberías y la reconstrucción del muro perimetral, es competencia de Fede.

También llegaron tres representantes de la Zona Educativa, entre ellos Jhon Coliver, quienes tampoco se comprometieron a dar soluciones inmediatas, sino a llevar la problemática a instancias superiores y ante las propuestas de los profesores, quienes hablaron de ejercer presión, Coliver sacó a colación el comunicado del 11 de mayo firmado por el ministro de Educación, Elías Jaua, en el que se establecen las multas y sanciones si se suspenden las clases.

Su participación fue tomada por algunos docentes como una medida intimidatoria, “puesto que las condiciones del liceo son diferentes, aquí no estamos haciendo guarimbas ni hay actos terroristas, estamos tomando medidas porque ya estamos cansados de tantos robos”, refirió el profesor José Chacón, quien recordó que la cancha de la institución está inutilizada desde hace cuatro años y que desde hace dos ellos se han reunido con todos los viceministros, e incluso acudido a Miraflores, con toda una resma de oficios donde están planteados los problemas.

Los docentes acordaron terminar con las actividades académicas para no perjudicar a los 945 estudiantes. No obstante, ven difícil continuar con las labores administrativas, puesto que se llevaron todo el material y las computadoras donde está toda la información como notas y datos de los alumnos.

Fotos: Mabel Sarmiento


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