Transportistas señalaron que si no les pagan a los delincuentes las sumas que piden, les queman o pican los vehículos en venganza. Al día pueden registrarse al menos 10 robos dentro de las unidades
Yohana Marra/@yohanamarra
Caracas. Además de lidiar con los atracos dentro del transporte, pues al día se registran al menos 10, hay otro dolor de cabeza para los conductores de Ocumare del Tuy: el secuestro de unidades.
Los delincuentes piden de rescate más de 100 mil bolívares a los transportistas, según declararon representantes del gremio sin revelar su nombre, en vista del aplique que les tienen las bandas de la zona.
“Hace como dos años robaron a seis conductores. Pidieron hasta 50 mil bolívares, según las condiciones en las que estaba la unidad, y muchos prefirieron pagar el dinero”, soltó uno de los afectados.
Y si no cancelan las cantidades que piden por el rescate les pican o queman las unidades. “Un vez nos pidieron 60 mil y no queríamos pagar, nos volvieron a llamar bajaron la suma y seguíamos diciendo que no. Resulta que como a los tres días nos llamaron y nos mandaron a una zona para que fuésemos a ver el carro. Cuando llegamos estaba todo picado y quemado. Entre todos reunimos y ayudamos al compañero a comprar otro”, relató un chofer.
Agregaron que en vista de que el hampa los tiene a monte decidieron organizarse y trancar las calles en protesta, cada vez que se vean afectados por secuestros o robos en las camioneticas. Según sus relatos, la situación es tan fuerte que en una oportunidad un funcionario de la alcaldía los ayudó a pagar la vacuna, para que levantaran la manifestación.
Por eso mantienen la amenaza a las autoridades de Ocumare de que si secuestran una unidad, y en 24 horas no aparece, paralizarán todo el sistema de transporte, aunque están claros de que los vecinos no tienen la culpa pero no tienen otra opción.
El gremio pidió desesperadamente que tomen acciones en contra de la inseguridad, ya que tienen miedo de salir a trabajar y están hartos de que los roben a cada momento y nadie haga nada. Exigieron más vigilancia policial, así como módulos, ya que para ellos las alcabalas no sirven.
“Los malandros se avisan entre ellos y evitan pasar por esa zona, así que eso no funciona de nada, deben estar permanentemente en la calle”, agregaron.
Hay miedo de sobra
Aunque parte de los transportistas se han resteado y denunciaron públicamente la situación con la inseguridad, muchos decidieron comenzar a pasar desapercibidos porque viven en el barrio, con los mismos delincuentes.
“Me montaron un aplique por eso las denuncias las hago bajo perfil. Yo vivo donde los malandros tienen una garita en la vía y con armas te apuntan o amenazan, tenemos que cuidar nuestras vidas”, soltó un exdirectivo de una línea de transporte.
El miedo también hizo que disminuyeran sus horas de trabajo tras tantos cuentos de secuestros de unidades, robos y hasta homicidios. En Ocumare funcionan 11 líneas urbanas y tres suburbanas.
“Tengo 35 años en el transporte de Ocumare y nos dábamos el lujo de decir que el transporte no dormía. La Circunvalación 1 trabajaba hasta las 4:00 am y cuando salía la Circunvalación Ocumare los otros dormían”, detalló un transportista.
Antes laboraban hasta las 12:00 am pero desde que aumentó la delincuencia los más valientes, o los que no hicieron suficiente dinero en el día, se quedan hasta las 8:30 pm, máximo 9:00 pm.
“Ni hablar del terminal, ahí llegan los motorizados, se bajan y roban a conductores o usuarios a cualquier hora del día”.
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Fotos: Cristian Hernández
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