El paro nacional por las primeras 24 horas se acató en 85% en las 27.000 escuelas, según datos de Raquel Figueroa, de la Unidad Democrática del Sector Educativo. Las federaciones convocaron a nuevas jornadas de protestas para este miércoles. Un funcionario de las FAES visitó el liceo bolivariano José Ávalos para pedir la lista de los docentes que se unieron al paro.
Caracas. En el patio central del liceo bolivariano José Ávalos a las 8:15 a. m. unos estudiantes juegan con la pelota, otros están acostados en el piso y el resto ve cómo les cuelgan los pies desde escalón donde están sentados. En la pared dice “clases normales del 21 al 25 de octubre”. Pero en el plantel de 30 profesores, a esa hora, apenas había 6. El director Andrio Fregoza sostiene la lista de asistencia de profesores. “Ese paro no es legal”, dijo.
Al tiempo en que agrega que un funcionario de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) visitó el liceo y le pidió esa lista, pero él se negó a entregarla. “La modalidad es colocar la inasistencia al profesor y mandar la información a la zona educativa”, aclaró. Naciones Unidas reconoce que 6.000 personas han muerto en operaciones de las fuerzas de seguridad de las FAES y que muchas pueden constituir ejecuciones extrajudiciales.
Pero desde el lunes ya los supervisores circuitales, enviados por el Ministerio de Educación, estaban visitando los planteles y amenazaban con suspender el pago a quienes dejen de asistir, denunció Raúl Parra, presidente del Sindicato Venezolano de Maestros en Caricuao. En la Unidad Educativa Caricuao y en la Guayana Esequiba, los directores comunicaron que, ante el paro, el plan Chamba Juvenil atendería a los estudiantes.
Raquel Figueroa, de la Unidad Democrática del Sector Educativo, también denunció que los supervisores, en represalias, están iniciando procedimientos administrativos en contra de los maestros.
No hay clases para nadie, es lo que repiten los alumnos a sus compañeros que van llegando a las escuelas. En la calle los liceístas y estudiantes de primaria se ven regresando a sus casas. Es la segunda convocatoria a paro nacional —esta vez por 48 horas— que 8 federaciones del Magisterio convocaron. La razón: pago de 300 % de aumento salarial, incumplimiento de 85 % de las cláusulas del contrato colectivo, pago de las intercategorías, bono asistencial de los jubilados, seguridad social, la dotación de material mobiliario para los planteles, así como también, la alimentación balanceada para los estudiantes y docentes.
El paro nacional por las primeras 24 horas se acató en 85 % en las 27.000 escuelas, según datos de Raquel Figueroa, de la Unidad Democrática del Sector Educativo. Las federaciones convocaron a nuevas jornadas de protestas para este miércoles.
“¿Qué vamos a hacer con los niños? No hay maestras”, repite Margarita Riera, parte del equipo directivo del Colegio San Pedro, perteneciente a la Asociación Venezuela de la Educación Católica (Avec). Está parada en la entrada del plantel y pregunta a quienes van llegando de qué grado son. “Tampoco está la maestra de ese salón”, dice. De 30 maestras, 20 firmaron un acta en que dijeron que no asistirían para unirse al paro nacional. Pero a las 7:15 a. m. apenas había dos docentes.
Alexis Suárez toma a su nieta del brazo y se van del colegio: “No hay acuerdo entre las partes. Quienes pagan son los representantes. Tendré que llevarme a la niña al taller mecánico donde trabajo”.
En la unidad básica doctor Caracciolo Parra de León los docentes tampoco asistieron. Sin embargo, un grupo de personas identificadas como “el grupo político de El Valle”, no permitió a Crónica.Uno permanecer en el plantel.
En otras instituciones educativas, como la Escuela Técnica Comercial Robinsoniana Distrital Juan España los docentes asistieron. “Yo pensé que no iban a venir”, dice sorprendida la directora Neida Hernández. En la Unidad Educativa Distrital Abigaíl González la entrada recibe a los estudiantes con un cartel que dice: “El día de mañana, actividades normales”.
Maestros a la calle
Los maestros no estuvieron en las aulas, pero sí en la calle. Las federaciones coordinaron cuatro puntos de concentración en Caracas y una protesta en el Ministerio de Educación. En las estaciones de Metro los carteles que agitan los maestros advierten que con hambre no se educa, cantan en consignas las tragedias de los planteles y repiten que este miércoles una vez más estarán en la calle.
¿Estamos cuidando qué?, ¿qué sueldo?, ¿qué condiciones? Si le compro un helado a mi hija descompleto para comprar el arroz”, dice el profesor Ángel Marín, acompañado de otros docentes en las afueras de la estación Los Jardines.
Desde Caricuao, profesores de 68 planteles protestaron. Parra les repite que así los directivos les manden mensajes, mañana es otro día de paro. Mientras que en Parque Carabobo un profesor no deja de gritar: “No es solo que el salario no alcanza para vivir, sino que tampoco alcanza para morirnos”.
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