Obispos al Gobierno: El pueblo no quiere cambiar la Constitución, quiere alimentos y medicinas

En un comunicado emitido este viernes, la Presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana rechazó la propuesta del Ejecutivo de convocar una Asamblea Nacional Constitucional, por considerarla una burda maniobra que solo pretende burlar al Parlamento elegido el 6 de diciembre de 2015.

Caracas. Por considerarla como “una iniciativa divorciada de las urgentes necesidades del país y como un paso más en el socavamiento del Estado Social de Derecho”, los obispos rechazaron la propuesta del Gobierno de convocar una nueva Asamblea Nacional Constituyente (ANC) y tras exigirle que cumpla la actual Constitución, le demandaron que ataque los problemas que en realidad preocupan a los ciudadanos.

“Actualmente, lo que más necesita el pueblo venezolano es comida, medicamentos, libertad, seguridad personal y jurídica, y paz. Todo ello se conseguiría si el Gobierno actuara apegado a lo previsto en el texto constitucional vigente y con mayor sensibilidad ante tantas carencias”, se lee en el comunicado que este viernes difundió la Presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV).

En el texto también se agrega que: “Los temas presentados por el Presidente de la República para apoyar su propuesta no apuntan a resolver los graves problemas que aquejan a los venezolanos, sino a prolongar la permanencia de su Gobierno en el poder”.

Los prelados fustigaron con dureza el planteamiento presidencial de elegir a la mitad de los 500 constituyentistas mediante una elección sectorizada, proceso que consideraron peligroso para la “democracia venezolana” porque no permitiría la participación de todos los ciudadanos habilitados para elegir y podría abrir las puertas a un organismo “monocolor y excluyente”.

En su escrito, los monseñores Diego Padrón, José Luis Azuaje, Mario Moronta y los cardenales Jorge Urosa Savino y Baltazar Porras, denunciaron que el objetivo fundamental de la Constituyente “es ‘constitucionalizar’ el ‘Estado Comunal’”, el cual fue rechazado en 2007 cuando no se aprobó la propuesta de reforma constitucional impulsada por el fallecido Hugo Chávez.

“Esta propuesta quiere imponer el “Plan de la Patria”, traducción operativa del “Socialismo del siglo XXI”, sistema totalitario, militarista, policial, violento y represor, que ha originado los males que hoy padece nuestro país”, alertaron, al tiempo que afirmaron que otro objetivo es terminar de liquidar a la Asamblea Nacional elegida el 6 de diciembre de 2015.

Protestando y rezando

Por los motivos arriba mencionados, los jerarcas de la Iglesia católica rechazaron la iniciativa y llamaron a la población “a no resignarse, a levantar su voz de protesta”, pero “sin caer en el juego de quienes generando violencia quieren conducir al país a escenarios de mayor confrontación con el fin de agravar la situación y mantenerse en el poder”.

Coincidiendo con la noticia de dos nuevos fallecidos a consecuencia de la represión policial y militar, los obispos volvieron a criticar la actuación de los organismos de seguridad, en particular la Guardia Nacional, a la que acusaron de haber “hecho alarde de su naturaleza represiva” durante las últimas semanas.

“¡Ya basta de tanta represión!”, reclamaron los directivos de la CEV, los cuales se solidarizaron con las víctimas y sus familiares y anunciaron que el próximo domingo 21 de mayo se celebrará en todo el país una nueva jornada de oración por la Paz.

Foto referencial


Participa en la conversación