El presidente de la comisión de Política Exterior, Luis Florido, remitió una comunicación a la Organización de Naciones Unidas a la que adjuntó el acuerdo adoptado por la cámara el pasado 27 de febrero que califica el proceso comicial convocado por el CNE como un “simulacro electoral”.
Caracas. “Creemos que la ONU no debe ser parte de este simulacro y avale y legitime un acto que no tiene las garantías mínimas de una contienda electoral justa”. Con esas palabras la Asamblea Nacional de Venezuela increpó a la Organización de Naciones Unidas para que rechace la solicitud formulada por el gobierno de Venezuela de conformar una misión de observación electoral que avale las elecciones presidenciales y de los cuerpos deliberantes de estados y municipios, prevista para el 20 de mayo.
El Parlamento destaca en la comunicación que “la ONU solo debe participar como observador electoral internacional solo en elecciones competitivas, confiables y libres”, cualidades que a juicio de la oposición no tiene el acto de votación inicialmente convocado para el 22 de abril y postergado para el 20 de mayo.
En la misiva, la AN denuncia la ilegalización de dos de los cuatro partidos que acudieron a la mesa de negociación y diálogo con el gobierno de Nicolás Maduro en República Dominicana, así como la eliminación de la tarjeta de la unidad, como una de las irregularidades más resaltantes de todo el proceso.
Como se sabe, el pasado 7 de febrero la presidenta del CNE, Tibisay Lucena anunció la realización de elecciones presidenciales para el 22 de abril y dijo que el organismo había librado las invitaciones a la ONU y otros organismos internacionales para que fungieran de acompañantes. Sin embargo, para el 21 de febrero, el portavoz de la Organización de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, dijo no haber recibido invitación alguna, pero que la misma sería considerada en su momento. Posteriormente, la semana pasada el CNE anunció la postergación de la votación para el 20 de mayo y presentó a los candidatos inscritos un “acuerdo de garantías” que prevé la observación y acompañamiento internacional.
Foto: Luis Miguel Cáceres / Archivo
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