“Pasé dos años buscando al asesino de mis hijos”

Marina Figueroa contó que tras año y medio en fuga detuvieron al homicida de sus hijos Kerlyn y Jorge Jaure. Alí Valdespino, recibió 20 años de prisión

 Yohana Marra/@yohanamarra

Caracas. Durante 13 meses Alí José Valdespino se burló de las autoridades, después de matar a su expareja y excuñado, Kerlyn Victoria y Jorge Enrique Jaure, en el barrio El Obispo de El Guarataro.

Después del doble homicidio intentó quitarse la vida pero la bala no entró en su cabeza. Luego de tres días internado en el Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo fue detenido y llevado a los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) en El Paraíso.

Duró poco, 27 días después se escapó junto con otros detenidos más. Marina Figueroa, madre de las víctimas, estuvo al pie del cañón para logar que lo recapturaran. No descansó. Todos los días hacia un papeleo distinto.

Ocho meses después funcionarios de la Policía del Municipio Libertador la llamaron para darle el dato de que estaba rondando los lares de El Guarataro. Incluso su hijo de 10 años, testigo del crimen, llegó un día asustado a la casa porque lo había visto por el barrio.

Pero Marina no supo más nada de Alí, quien trabajó como escolta de varios ministros durante 10 años, hasta el 23 de junio de 2014 cuando le pusieron los ganchos en el barrio Cañaveral de San Felipe, estado Yaracuy.

Tenía una identidad falsa. Se puso nervioso en una alcabala y activó las sospechas de los policías. Resultó ser una joyita por aquellos lares, de acuerdo con El Diario de Yaracuy, pues era el líder de la banda “Los Pitos”, que se dedicaba a robar motos para luego pedir 15.000 bolos de rescate.

“Hasta que lo agarraron fui a todos los lugares posibles y le mandé cartas a la fiscal, a todos los funcionarios del Gobierno para que se hiciera justicia. De no ser porque estuve montada en esto él estaría libre. Pasé dos años buscando al asesino de mis hijos”, soltó.

Sin confianza en la ley

Aunque le dieron 20 años de prisión, Marina duda que los vaya a pagar completicos. De hecho tiene pendiente acercarse un día de estos hasta la cárcel Rodeo III, en Guatire, para comprobar que de verdad esté ahí.

“No confío mucho en la justicia por el alto índice de corrupción que hay en todos lados, por eso estaré pendiente siempre”, dijo.

Alegó que en el expediente no le pusieron todos los delitos que cometió; cree que hubo mano peluda porque no vio por ningún lado la fuga del Cicpc de El Paraíso.