Ambas casas de estudios han visto como se retrasan sus calendarios académicos por su cercanía a los sitios donde se realizan las concentraciones tanto de oficialismo como de oposición.
Caracas. Dos universidades. Dos estudiantes. Dos testimonios de quienes explican cómo enfrentan y cumplen su período académico, en el marco de las protestas que ha realizado la oposición en las calles de Caracas desde el 1º de abril del año en curso. Los dirigentes de la Mesa de la Unidad Democrática se las han ingeniado para ejecutar diversas acciones de calle e intentar mantener a los venezolanos en los espacios públicos, lo que ha traído problemas para todos.
La Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada Bolivariana (Unefa) tiene su sede en Chuao, a pocos metros de la autopista Francisco Fajardo, a la altura de La Carlota. En ese punto de la arteria vial, casi todos los días la oposición se reúne para marchar o concentrarse, o plantarse —como lo ha hecho en dos ocasiones— y esas actividades inician en promedio de las 10:00 a. m., es por ello que Luis González*, alumno de esa casa de estudios, tiene al menos dos semanas sin recibir clases.
Estudio de noche y para ir a clase uso el Metro. Por lo general, me bajo en Chacao y camino hasta la universidad o desde Altamira que sale un Metrobús, pero casi todos los días, o está cerrado el Metro o no están operativas las unidades de Metrobús. A mí y a muchos compañeros se nos hace complicado asistir a clase”, aseguró González.
Cursa el 4to semestre de Contaduría, y tanto él como sus compañeros no saben cómo van a hacer cuando retomen el calendario académico. Dijo que la universidad no suspende clases, sino que entre alumnos y profesores llegan a un consenso. “La universidad como tal no emite un comunicado oficial para informarnos de la suspensión de clase. La mayoría de las veces el profesor no tiene cómo llegar a la universidad, o a veces sí puede pero nosotros no”, explicó.
Otras casas de estudio como la Universidad Católica Andrés Bello o la Universidad Central de Venezuela, sí han emitido comunicados oficiales, incluso desde sus propias facultades y hasta “flexibilizan los horarios” para las entregas de trabajos o presentaciones de exámenes.
La Universidad Nacional Experimental de las Artes (Unearte) es otro campus que ha tenido que modificar sus horarios y suspender la asistencia a las aulas. Este centro educativo tiene dos sedes, una en Caño Amarillo y otra en Bellas Artes. La mayoría de los alumnos recibe clases en esta última. Ambos puntos están ubicado al oeste de Caracas, sitios donde nunca ha llegado una marcha de oposición durante este año, sin embargo, los seguidores del oficialismo se reúnen más que todo en Bellas Artes, en la plaza Morelos.
“Aquí hay estudiantes que viven muy lejos y a veces pierden su viaje porque llegan y les dicen que no hay clase. Lo deberían anunciar al menos con un día de anticipación. De paso, a veces nos obligan a venir porque esta estación [Caño Amarillo] casi siempre está abierta”, se quejó Daniela Ramos*, estudiante de la licenciatura en Artes Plásticas, mención Escultura, de la Unearte.
La Unearte, según su página web, depende del Ministerio de Educación Universitaria y del Ministerio para la Cultura. Ambos entes del Estado son los encargados del funcionamiento de esa institución. Ramos opina que por pertenecer directamente a dos Ministerios, “no pueden emitir comunicados oficiales que autoricen la suspensión de clases a causa de las marchas de oposición. Es una contradicción”.
Para la realización de este trabajo, el equipo de Crónica.Uno también busco el testimonio de un estudiante de la Universidad Bolivariana de Venezuela, ubicada en Los Chaguaramos pero los consultados se negaron a declarar por temor.
Los nombres de los estudiantes fueron modificados para proteger su identidad*
Foto referencial: Angeliana Escalona
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