Más de 300 personas llegaron este domingo al sector La Sosa, de Las Adjuntas, para beneficiarse con una jornada médica que forma parte de la Ayuda Humanitaria ofrecida por Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional y juramentado como presidente encargado de la República.

Caracas. La información se difundió boca a boca, se repartieron algunos volantes, por los grupos de WhatsApp se repitió la convocatoria, todo se organizó con muy bajo perfil para esquivar cualquier saboteo, pero el objetivo se cumplió: la primera fase de la ayuda humanitaria llegó a Macarao.

Desde antes de las 5:00 a. m. el movimiento era inusual en el sector La Sosa. La gente, incluso desde la carretera vieja Caracas-Los Teques, llegó hasta el sitio, con la esperanza de ser atendida por médicos y para que le dieran medicinas.

Con bastones, muletas, con discapacidad visual, con niños en brazos con afecciones respiratorias, con recipes, se fueron agrupando y formando un cola frente al espacio donde se instalaba el primer campamento itinerante, uno de los tantos que Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional y juramentado como presidente encargado de Venezuela, dijo que se realizarían este domingo 17 en varios estados del país.

Ya a las 8:00 a. m. los organizadores tenían en lista 260 personas, de acuerdo con los números repartidos. A las 10:00 a. m., la calle principal de La Sosa estaba desbordada. Una lista nueva se había generado. Más de 100 personas esperaban para entrar en el lote de la asistencia.

En la fila lo que más demandaban era medicinas. Jimmy López fue uno de los que llegó a las 5:00 a. m. Lleva 5 días sin tomar anticonvulsivos, lo que le impide tener una vida con rutina normal.

No los puede comprar. No tiene trabajo fijo por la discapacidad y la esperanza la puso en la jornada que este domingo se extendió hasta pasado el mediodía.

Una veintena de médicos, estudiantes de Medicina y enfermeras llegaron a eso de las 10:00 a. m. Fueron ovacionados y aplaudidos.

“Es por ellos que este país se debe reconstruir, gracias a esa juventud es que este país va a cambiar”, dijo María Campos, quien esperaba en la reja un chance para ser atendida.

“Quiero medicamentos para la fiebre y para el estómago. Que no se consiguen por ningún lado”, acotó.

El sol se hizo más fuerte a medida que avanzó la mañana. Los partidos políticos llegaron graneaditos, sin banderas, sin colores. El blanco fue el símbolo que identificó a lo voluntarios.

Pediatría, Medicina General, Odontología y Nutrición fueron el fuerte de la jornada médica.

A los de la tercera edad les tomaban la tensión y los hidrataban mientras esperaban el turno. Igual con los niños, algunos con gripe, tos o lechina.

La organización Rescate Venezuela, a cargo del evento, logró la entrega de medicinas gracias a la cooperación de venezolanos en el exterior. De Coche, El Valle, La Pastora, Catia, Caricuao y El Paraíso llegaron al lugar para sumar voluntades.

El dirigente comunitario José Gregorio “Chegoyo” Ochoa destacó que la asistencia humanitaria debe verse como algo circunstancial, hasta tanto pase la crisis humanitaria que atraviesa el país.

Ochoa considera que no es una tarea populista, como pretende hacerlo ver el Gobierno, al compararlo con los Clap. La ayuda humanitaria debe ir dirigida a los casos de extrema urgencia que no pueden ser atendido en los hospitales y que estén ocasionando la muerte de pacientes, como por ejemplo los que necesitan diálisis.

Explica el dirigente comunitario que “el solo hecho de que sea una posibilidad real la llegada de asistencia humanitaria ha provocado la importación acelerada de medicamentos por parte de entes gubernamentales, lo que demuestra las mentiras del gobierno de Maduro cuando habla de bloqueo. Un ejemplo es la gran cantidad de fármacos que están llegando al galpón del IVSS, ubicado en la 4ta calle Carapa”.

Según informó Ochoa, la contraloría ciudadana ha detectado algunos vehículos particulares y militares llevándose medicamentos de ese lugar “y los cuales deben ser destinados a hospitales del Seguro Social”.

Al final de la asistencia entregarían un refrigerio a los asistentes. No hay hora fija de culminación debido a que se suman más vecinos.

Macarao es una parroquia grande en extensión, tiene el parque nacional Macarao, pero sus habitantes no pasan de 200.000. Critican que los servicios de salud, como Barrio Adentro, no funcionan.

Fotos y videos: Mabel Sarmiento


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