En muchos hogares se prefiere convivir con una falla, a darle solución, porque la actual situación no permite gastos imprevistos.

Caracas. Mantener un hogar nunca ha sido fácil, pero producto de la crisis económica actual hasta una pequeña falla en el hogar puede convertirse en una pesadilla debido a los elevados costos que implica la reparación.

Enrique Piñera, vendedor en una papelería y residente de La Candelaria, experimentó de primera mano el golpe que supone un gasto no planificado tras encontrar un problema con la electricidad en su vivienda:

“Regresé a casa después del trabajo y descubrí que no había electricidad, lo primero que pensé es que había una falla general. Consulté con los vecinos y el del problema era yo, sabía que no era un corte eléctrico porque estaba al día con mis facturas, así que al día siguiente contraté a un electricista para que me resolviera el problema rogando que no me saliera muy caro. Resultó que la falla era porque se fundieron los ‘breaker’ eléctricos, 4 en total y cada uno me costó 24.000 bolívares, más la mano de obra, que según el electricista fue un regalo, finalmente terminé pagando 110.000 bolívares aproximadamente. Era un dinero que no tenía presupuestado para el mes, así que fue un golpe duro”.

Franks Gutiérrez, empleado en una ferretería ubicada en Bellas Artes, comentó que a pesar de que llegan constantes clientes al negocio preguntando por determinadas piezas, son muy pocos los que concretan una venta ya que los precios les parecen sumamente caros. “Lo que más suele buscar la gente son piezas de fontanería, que si canillas, grifería, mangueras y esas cosas, que de por sí son caras, incluso las chinas”.

En un recorrido realizado por Crónica.Uno se constató que las griferías no bajan de los 100.000 bolívares y pueden llegar hasta los 300.000. Una canilla ronda los 6000 bolívares y una manguera mínimo vale 17.000 bolívares.

Franks expresó que la mayoría de las fallas del sistema de tuberías se debe a los constantes cortes en el suministro: “Cuando restituyen el servicio, las tuberías que están llenas de aire comprimido mandan todo eso a los hogares, haciendo que el agua salga con mucha presión y eso a la larga daña las piezas de fontanería, lo mismo pasa con las neveras, que al someterse a cortes eléctricos a la larga se van echando a perder si no tienen reguladores”.

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Elena Romero, una jubilada residente de Altagracia, contó que las principales fallas en su hogar tienen que ver con las tuberías. “Casi todas las llaves de mi casa tienen goteras, más que todo porque el edificio es viejo y ese tipo de cosas se suelen dañar al tiempo, pero admito que me descuidé desde que se comenzaron a dañar una a una, ahora no me puedo dar el lujo de reparar ninguna porque sino, no como, yo solo vivo de la pensión y lo que me manda mi hijo”.

Hasta arreglos sencillos como pintar la casa impactan en el presupuesto. Un galón de pintura está por el orden de los 41.000 bolívares. Si hay que ajustar otros detalles, el galón de barniz se encuentra en 25.800 bolívares y el sellador llega a los 83.000 bolívares.

Por otro lado, si se desea tener herramientas en casa para realizar pequeñas reparaciones, hay que invertir una buena cantidad de dinero, porque un pequeño juego de destornilladores no baja de los 15.000 bolívares y una llave inglesa para hacer las reparaciones de fontanería se consigue en ferreterías desde 30.000 bolívares. Un kilo de clavos equivale a 6000 bolívares.

Por los altos precios, muchas personas han reportado que, si no se trata de una falla grave, no suelen darle solución inmediata porque las prioridades actualmente son otras. Analistas señalan que los ingresos están golpeados por la inflación y lo que se gana se orienta principalmente a comida, por tanto, las reparaciones se postergan.

Foto: Omar Villafañe


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