Los funcionarios del Estado dispararon lacrimógenas y perdigones durante más de siete horas a los marchistas que estaban por toda la ciudad.
Caracas. El humo de las lacrimógenas y las detonaciones de los perdigones se vieron y escucharon de este a oeste en Caracas. Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) volvieron a reprimir fuertemente a manifestantes opositores durante más de 7 horas impidiéndoles llegar, nuevamente, al centro de la ciudad.
Los funcionarios usaron los recipientes de las lacrimógenas directamente contra los manifestantes, un procedimiento que dejó heridos a varios de los marchistas, entre ellos el diputado de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), José Manuel Olivares, quien, con su cabeza ensangrentada, denunció que fue impactado por uno de estos cilindros metálicos en El Paraíso.
“Gracias por sus mensajes. 12 puntos de sutura y edema cerebral leve. Pero les pido rechacemos todos La Estafa de Constituyente!!!” (sic), escribió luego el parlamentario en su cuenta de Twitter.
En sitios tan distantes entre sí como La Florida, El Rosal, Las Mercedes, Santa Mónica, la avenida Victoria, El Paraíso, Altamira y partes de la autopista Francisco Fajardo se reportó la acción de los cuerpos de seguridad contra los manifestantes.
Para las 3:20 p. m., el alcalde de Chacao, Ramón Muchacho, informó que esa municipalidad atendió a 14 personas que marchaban: 11 por traumatismos, 2 por hipotensión y 1 por perdigones. También se reportó una agresión contra el reportero gráfico de la agencia EFE, Miguel Gutiérrez, por parte de manifestantes quienes le robaron su máscara antigas, mientras que la periodista Keissy Bracho recibió el impacto de una bomba lacrimógena en un brazo. De acuerdo con la organización Foro Penal Venezolano, más de 500 personas permanecen detenidas por las protestas, iniciadas hace un mes.
La represión picó y se extendió
En la avenida Victoria la represión empezó antes de las 11:00 a. m. Unas 50 personas habían logrado llegar hasta esta vía del municipio Libertador. Inmediatamente, un piquete de la PNB llegó hasta ese el lugar y empezó a reprimir a las personas que se refugiaron hacia el principio de la vía.
Comenzó una batalla en la que los policías pasaban en sus motos, disparando a diestra y siniestra bombas y perdigones, mientras que manifestantes y personas de los edificios de la zona les lanzaban todo tipo de objetos contundentes. Se pudo ver a varios marchistas asfixiados por los gases y una mujer herida de perdigón en el sector.
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Este combate se mantuvo hasta que se presentaron los diputados Ismael León (VP), Rafael Guzmán y Juan Miguel Matheus (ambos de PJ) al lugar y empezaron a hablar con los funcionarios. Entonces la PNB se vio rodeada por manifestantes que se acercaron a reclamarles o a pedirles que se unieran “a la lucha”. Hubo una atípica tregua en la que se vieron hasta abrazos entre civiles y uniformados. Algunos de los policías respondían que solo cumplen órdenes.
Los diputados llegaron a un acuerdo con los oficiales para que la gente se pudiera concentrar en la avenida, pero sin avanzar hacia Roca Tarpeya. En ese sitió había un grupo de motorizados con banderas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que merodeó la avenida, en actitud amenazante, en varias oportunidades.
En el Paraíso la represión había empezado incluso unos minutos antes. En Altamira también se concentraron miles de personas. La movilización de gente partió luego del mediodía con dirección a la Cota Mil, pero funcionarios de la PNB evitaron el ingreso de manifestantes con bombas lacrimógenas. De nuevo se pudo apreciar cómo los policías utilizaban los cilindros como proyectiles hiriendo a un joven en un brazo.
En la autopista Francisco Fajardo, a la altura de El Rosal, otro grupo también fue reprimido. El diputado Miguel Pizarro denunció que se dispararon lacrimógenas directamente a los manifestantes, incluso desde la base aérea de La Carlota. También señaló que se escucharon detonaciones similares a las de armas de fuego.
Hacia las 6:00 p. m. continuaron los reportes de represión en algunas zonas de la ciudad. Mientras el Presidente Maduro hacía el anuncio de una “Asamblea Constituyente” en el centro de Caracas, al resguardo de policías y militares.
Fotos: Carlos Crespo | Francisco Bruzco
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