En septiembre aplicarán encuesta en Lara, Miranda y Bolívar para conocer riesgos del adulto mayor

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La herramienta a implementar, luego de una alianza entre Convite y HelpAge, es sencilla y se trata de un cuestionario de 9 fases que incluyen preguntas relativas a las situaciones actuales del adulto mayor: si está enfermo, si trabaja, si tiene seguridad social, si tiene casa, si tiene familia, si vive en un refugio, si está expuesto a algún tipo de violencia.

Caracas. Las organizaciones Convite y HelpAge, a través de su sede para América Latina, aplicarán para el próximo mes de septiembre una encuesta en los estados Lara, Miranda y Bolívar, a fin de conocer el grado de vulnerabilidad del adulto mayor.

No será una encuesta masiva. Pero recogerá a través de estas tres regiones las necesidades por las que atraviesa la población que está envejeciendo.

Marcela Bustamante, coordinadora del Secretariado Regional para América Latina y el Caribe, explicó que ya se consolidó una alianza con Convite, para el levantamiento de los datos, lo cual se hará a través de una encuesta que ya se ha aplicado en ocho países, donde han ocurrido emergencias y catástrofes naturales.

La herramienta a implementar, dijo, es sencilla pues se trata de un cuestionario de nueve fases que incluyen preguntas relativas a las situaciones actuales del adulto mayor: si está enfermo, si trabaja, si tiene seguridad social, si tiene casa, si tiene familia, si vive en un refugio, si está expuesto a algún tipo de violencia.

Es un cuestionario, pero es una evaluación rápida para conocer las necesidades puntuales del adulto mayor, explicó.

Este año la herramienta se aplicó en Malawi, luego de la ocurrencia de un ciclón.

Aquí, por las condiciones locales, mencionó que conjuntamente con Convite, se hizo un ajuste a la encuesta porque no se usa el término ayuda humanitaria, ahora se va a adaptar con las palabras apoyo y asistencia.

En dos semanas, dijo se puede hacer el trabajo de campo. En los sitios donde, por seguridad, no se puedan usar dispositivos móviles, o en las localidades donde falla la electricidad, se hará de manera manual y luego se hace la descarga sistematizada de las baterías de preguntas. “Lo importante es llegar hasta dónde estén los más vulnerables”, destacó.

La experiencia que ha podido recopilar la agencia que representa, es que los adultos mayores son los más excluidos cuando se dan respuestas humanitarias. “No son beneficiarios, porque no acceden a la información, porque no pueden desplazarse por su misma condición de discapacidad, y eso nos ha permitido a hacer algunos programas de incidencia con las autoridades y con los tomadores de políticas en materia de seguridad social.

La agencia HelpAge maneja un índice de envejecimiento que ranquea los países, dependiendo de la información que faciliten los gobiernos. El último fue de 2015 y uno de los retos que tienen ahora es que no hay información para respaldar los datos levantados. Aunque también la información que sistematicen puede ser un espejo de lo que ocurre con las personas cuando envejecen.

Dónde están

La red HelpAge cuenta con 120 miembros en 75 países. En América Latina cuenta con 35 organizaciones afiliadas y contrapartes en más de 11 países.

Luis Francisco Cabeza, director de Convite, dijo que para 2015, según un estudio de Banco Interamericano de Desarrollo, en Venezuela 9,6 % de las personas mayores de 60 años vivían solas. Eso era más o menos 305.000. Pasados cuatro años, la cifra es otra y la vulnerabilidad mayor.

“La cifra de abandono de las personas mayores es una realidad. Los familiares dan direcciones falsas, números de teléfonos errados o se van del país. Esa información nos la dan los encargados de los ancianatos. Simplemente los adultos mayores enfrentan la peor crisis de país de la región para envejecer”, destacó.

333 abuelos murieron de forma violenta en 2018. Esa cifra sale de un análisis de 45 medios digitales. No es un dato que lo da el Ministerio de Interior y Justicia. Por tanto, es parcial, no habla de la totalidad de las agresiones. Sin embargo, es una muestra clara y pública de un patrón de violencia que no estaba antes en las estadísticas: los matan, golpean y secuestran para quitarles las casas, las joyas, el dinero, las remesas.

Con el levantamiento de la encuesta en septiembre se espera tener datos que permitan ampliar más el riesgo de vulnerabilidad de cara a al desarrollo de la asistencia humanitaria en el país.


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