La ensambladora no cuenta con proyección de producción para 2018. En lo que va de año han renunciado 100 trabajadores. En la planta, de un total de 1300 empleados, solo mantienen activos a 30.

Valencia. Cuatro años atrás, los trabajadores de Ford Motors de Venezuela devengaban un estimado de cinco salarios mínimos y se alzaban como uno de los equipos mejores pagados del país. En 2018 la historia es otra: apenas cobran el sueldo que rige en la actualidad. La razón es que no han aprobado la convención colectiva que lleva un año y tres meses vencida.

Una preocupación notable entre el personal es que la empresa no cuenta con una proyección de producción para este período. El ensamblaje de vehículos, que ha venido mermando desde 2013, llegó a su punto máximo en 2017 cuando solo se produjeron 400 unidades de las cuales 180 fueron destinadas a los concesionarios. Es de resaltar que la capacidad de producción de la planta ubicada en la Zona Industrial de Valencia es de 35.000 carros al año.

De 1300 trabajadores en nómina solo 30 llevan a cabo labores en planta. De acuerdo con las declaraciones de Jonathan Lugo, secretario del sindicato, durante 2017 habrían renunciado 630 empleados. En lo que va de 2018 contabilizan 100 renuncias.

Llegará el momento en que por falta de personal sea imposible un arranque de planta, tanto en el área de producción como administrativa, apuntó Lugo.

Ante la crisis económica, los trabajadores han tenido que recurrir a la venta de la indumentaria que reciben por dotación en la empresa.

Muchos hemos tenido que vender las botas de seguridad, los pantalones, paños y jabones, relató Jimy Rojas trabajador de Ford Motors de Venezuela.

Rojas, notablemente afectado en sus declaraciones la mañana de este jueves desde el Club Ford, comentó que el grueso de los empleados han perdido peso, otros han tenido que retirar a sus hijos de los colegios privados y buscar cupos en escuelas del Estado.

Asimismo, rechazó que el Gobierno apueste a la compra de vehículos en el extranjero en vez de invertir en la producción nacional. Con esto nos están quitando nuestros puestos de trabajo, 99% de los trabajadores han perdido peso, muchos lloran porque no tienen para comer en sus casas. Los que renuncian y se van del país es en una aventura porque no tienen un empleo seguro.

Los trabajadores insistieron en pedir al Ejecutivo que reactive la industria automotriz, revelaron que para paliar la falta de producción le han propuesto al Gobierno inyectar las divisas necesarias para producir camiones 350 que en Venezuela eran ensamblados y pueden ser de exportación. A su vez, agregaron que la planta puede ensamblar autobuses para mejorar el sistema del transporte público en el país.

Foto: Cortesía


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