Vecinos de Baruta continúan encerrados en sus viviendas tras cumplir una semana sin el servicio eléctrico

Funcionarios de Corpoelec informaron este jueves a la comunidad que la luz será restablecida en 48 horas. La Alcaldía de Baruta anunció que 25 % de los sectores continúan sin energía. Mientras esto sucede, la vida de los habitantes no ha sido fácil, algunos cocinan con leña y otros perdieron sus alimentos.

Caracas. “Las noches se hacen largas. No quedó de otra que cocinar con leña y una parrillera que nos regalaron los vecinos”,  cuenta una señora de 60 años que caminaba junto a su esposo desde Alto Prado. Vecinos de varios sectores del municipio Baruta, en el este de la ciudad, cumplieron una semana sin electricidad. Trabajadores de Corpoelec comunicaron a los residentes de la avenida Parque Humbolt que a más tardar el sábado 16 de marzo será restituido el servicio.

El alcalde de Baruta, Darwin González, indicó que los siguientes sectores continúan sin fluido eléctrico: Alto Prado, Lomas de Prados del Este, algunas zonas de Prados del Este, Las Minas de Baruta, Terrazas del Club Hípico, La Ciudadela, Santa Cruz del Este, Santa Inés y Las Mesetas.

Varias viviendas siguen a oscuras debido a que explotó un transformador el pasado domingo 10, ubicado en la subestación del sector Concresa, La Ciudadela. Este hecho se sumó a las fallas intermitentes ocurridas en el país desde el pasado jueves 7 de marzo.

La comunidad tampoco cuenta con los servicios de Internet y no les llega señal de la telefonía móvil Movilnet.

Trabajadores de Corpoelec continúan las reparaciones. Foto: Luis Morillo

Encerrados en sus viviendas

Quienes habitan en los edificios y casas adyacentes al sector Concresa se encuentran postrados en las puertas, atentos a cualquier anuncio que les puedan comunicar. Reclaman que permanecen encerrados sin muchas distracciones.

La solidaridad de la comunidad fue notoria en el edificio Karina, ubicado en la avenida Parque Humbolt. En la entrada varios residentes cargan la batería de sus celulares gracias a una planta eléctrica que les prestó un vecino del piso 12. Dicen que sin este artefacto estarían incomunicados, pues no podrían contactar con sus familiares.

Adultos de la tercera edad permanecen en los pisos altos del edificio. No han podido bajar a realizar sus quehaceres de rutina. Algunos se organizaron para brindarles apoyo, por lo que hicieron una recolección para llevarles alimentos y agua hasta sus apartamentos. En otros casos, hay quienes no les quedó más opción que residenciarse en otro lugar mientras se restablece el servicio.

Varias madres expresaron su descontento porque no pueden ir a sus trabajos ni mandar a los niños al colegio, y los estudiantes universitarios dudan asistir la próxima semana a clases si el problema persiste. “Estudio último semestre de Ingeniería en Petróleo en la UCV y si continúo en esta situación no podré ir a mis clases. Mi vida se va a paralizar por completo”, comentó un chico que cargaba su celular en la entrada del edificio Karina.

En este mismo contexto, algunas personas tienen que comprar comida todos los días para sobrevivir a las penurias, incluso en dólares. Los alimentos dependientes de refrigeración como carnes, frutas y vegetales se dañaron en las neveras; realizan almuerzos a punta de comidas enlatadas.

En las afueras de la subestación La Ciudadela, los funcionarios del organismo trabajan a puertas cerradas. A lo lejos solo se ven las cuadrillas desplegadas para la reparación de cableados y la policía municipal de Baruta, quienes resguardan los alrededores.


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