El Ministerio de Comunicación informó el lunes que la falla se debía “a un ataque electromagnético que buscó afectar el sistema de generación hidroeléctrica”. Una versión que mantienen las autoridades desde marzo cuando se produjeron las grandes interrupciones. Asimismo, las actividades laborales y educativas las dieron por suspendidas este 23 de julio.

Caracas. Las advertencias que hicieron algunos expertos a principio de mes sobre la debilitada capacidad termoelétrica que posee Caracas para abastecerse de energía, se cumplieron este lunes 22 de julio a eso de las 4:45 de la tarde, cuando la ciudad se quedó a oscuras, así como unos 20 estados del país. Es difícil estimar cuánto tiempo ha durado este último gran apagón, debido a que varias zonas del Distrito Capital y del resto de Venezuela continúan este martes sin el servicio.

El ingeniero eléctrico José Aguilar alertó, cuatro meses después de que la nación enfrentara un megapagón, que Caracas se aproximaba a una situación similar a la que vive Maracaibo en el estado Zulia, donde los cortes de luz se mantienen desde marzo. El colapso se debe a que las principales termoeléctricas, ubicadas en los estados Vargas y Miranda, que abastecen a Caracas están “inservibles”. La inoperatividad alcanza 90 % de los 4000 MW de capacidad instalada que poseen las plantas.

El Ministerio de Comunicación informó el lunes que la falla se debía “a un ataque electromagnético que buscó afectar el sistema de generación hidroeléctrica”. Una versión que mantienen las autoridades desde marzo cuando se produjeron las grandes interrupciones. Asimismo, las actividades laborales y educativas las dieron por suspendidas este 23 de julio.

foto: Luis Morillo


Hasta este martes la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) no ha revelado un informe detallado de la magnitud de la falla, ni cuáles en total son los estados afectados. En la red social Twitter el organismo señaló que el servicio de luz había sido restablecido 100 % en Caracas y “parcialmente” en los estados: Mérida, Trujillo, Barinas y Aragua. No obstante, en Caracas el servicio continúa intermitente.

El observatorio de internet NetBlocks divulgó que la conectividad en el país había caído a 6 % este lunes. “Todos los estados de Venezuela se han visto gravemente afectados por el nuevo corte de energía, queda apenas una conectividad limitada. El nuevo incidente tiene una gravedad similar a la de las interrupciones de energía a principios de 2019, sin signos inmediatos de recuperación evidentes en los datos de la red en la última hora”, advierten en un reporte.

De acuerdo con NetBlocks la energía sigue interrumpida en gran parte de Venezuela, 17 horas después del apagón masivo. La conectividad nacional a internet se mantiene alrededor de 40 % este martes, luego de una recuperación parcial y una nueva interrupción en el servicio eléctrico.

foto: Luis Morillo

La central hidroeléctrica de Guri, en el Bajo Caroní, donde reposa la mayor presión del Sistema Eléctrico Nacional, podría ofrecer más de 1200 MW a través del sistema interconectado. No obstante, se encuentra en su momento operativo más delicado, después de los apagones del 7 y 25 de marzo. Los dos transformadores incorporados a la central hidroeléctrica, extraídos de Yaracuy y San Jerónimo 2, para suplir los dañados causados por el primer gran apagón, no son suficientes para suplir la demanda de toda la nación.

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El ministro de Energía Eléctrica, Freddy Brito, tampoco ha informado qué magnitud tiene esta interrupción. “Felicito al pueblo venezolano por su carácter cívico, por su compromiso de paz, valorando el esfuerzo que realizan los trabajadores para el total restablecimiento del sistema”, esto fue lo último que declaró en su cuenta de Twitter.

La nación revive desde este lunes las horas oscuras de marzo. En Caracas la población se desplazaba a pie hasta sus hogares la noche del 22 de julio, debido a que el Metro de Caracas quedó fuera de servicio. Las camioneticas pasaban atestadas de pasajeros, mientras que entre Ciudad Universitaria y Los Símbolos, algunos puntos funcionaban con planta eléctrica como el Hospital Clínico Universitario de Caracas y Farmatodo, en el resto de la ciudad apenas se distinguían las luces de los vehículos.


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