De los semáforos instalados en Maturín, solo funciona 20 %; la mayoría se ha dañado o han sido derrumbados por vehículos. Los servicios públicos son intermitentes en las comunidades de la capital monaguense, no hay recolección de desechos ni alumbrado público. El Observatorio de Gestión Pública calcula que por lo menos 80 % de la ciudad esta desasistida.

Maturín. De la otrora ciudad distinta, solo queda el recuerdo. Maturín hoy se encuentra sumida en cientos de carencias que viven a diario sus habitantes, y que van desde la falta de servicios públicos básicos hasta la caída de semáforos, paradas de autobuses y postes de luz.

Las quejas son cada vez más constantes. Los problemas parecen repetirse como bucle con el paso de los años, y las autoridades no ofrecen soluciones. Los ciudadanos muestran su descontento al ver que cada día empeora la situación y que sus exigencias no son escuchadas.

“Maturín se cae a pedazos”, es una frase que se repite y que de manera literal describe lo que sucede en la ciudad. En los últimos días se ha reportado la caída de semáforos, paradas de autobuses y postes de luz, lo que ha generado en los maturineses la sensación de abandono y se convierte en el reflejo de la falta de mantenimiento a las obras públicas.

El pasado 22 de febrero usuarios reportaron la caída de la parada de El Balancín, ubicada en la Alcaldía de Maturín. La indignación se hizo presente en los maturineses, quienes calificaron este incidente como una falta de atención al municipio.

¿Cómo es posible que se va a caer una parada que está en la alcaldía? Esto es un caos urbano, Maturín está totalmente deteriorada y basta caminar por el centro para darse cuenta, y si así está el centro, ¿cómo estará lo demás? Sin ir muy lejos, El Balancín que está también dentro de la alcaldía esta corroído, eso no tarda en caerse”, destaca Víctor Aponte.

Luego de la caída de la parada, se sumó el desprendimiento de un poste de alumbrado publicó que cayó encima del tendido eléctrico y dejó sin luz gran parte del casco central de Maturín. El poste cedió frente al Consejo Legislativo de Monagas y fue otro de los hechos que generó desconcierto en la población.

Esto realmente es una vergüenza; lo que está sucediendo en Maturín se cuenta y no se cree. Se caen paradas, semáforos y postes en las narices de las autoridades, porque cuando se cayó el semáforo de la Juncal, ahí mismo está la gobernación. Ahora viene y se cae este poste al frente de los diputados”, comenta Reinaldo Rodríguez.

Maturín
Los postes se caen frente a las sedes de las instituciones del estado. Foto: Cortesía
80 % de Maturín sumida en la desidia

De acuerdo con datos aportados por el Observatorio de Gestión Pública, por lo menos 80 % de la ciudad está desasistida. La falta de recolección de desechos, el alumbrado público, la seguridad, el aseo urbano y el mantenimiento de pasarelas, semáforos, parques y plazas la ubican como una ciudad en completa desidia.

De los semáforos instalados en Maturín, solo 20 % funciona, el resto se ha dañado, han sido derribados por vehículos y ninguno se ha reparado, sostienen miembros del Observatorio de Gestión Pública.

Su coordinador, Luis Díaz, afirma que la anarquía en materia de servicios públicos se debe a la indolencia de las autoridades, pues tanto el aseo urbano como el alumbrado forman parte de las competencias de la municipalidad.

Maturín está totalmente a oscuras y eso es competencia totalmente del municipio. Podríamos decir que el 80 % de la ciudad está colmada de basura, porque el parque automotor para la recolección de desechos no sé dónde está. Los vecinos han tenido que improvisar vertederos de basura en los laterales de las avenidas porque el servicio de aseo domiciliario no existe”, detalla Díaz.

Maturín
Los basureros improvisados abundan en la ciudad. Foto: Cortesía

Otro de los puntos que resaltan los representantes de este organismo contralor es la cantidad de accidentes automovilísticos que se generan a causa de la falta de semáforos en las principales arterias viales de Maturín.

Sostienen que a diario se reportan accidentes y congestiones vehiculares que obedecen a la carencia de un semáforo para controlar el tráfico. A esto se suma el deterioro de las pasarelas, las cuales prácticamente han dejado de ser usadas por los ciudadanos por el estado en que se encuentran las mismas.

“Todos los días hay accidentes por falta de semáforos. En las vías que son bastante transitadas se reporta congestionamiento vehicular, como es el caso de la avenida Juncal, donde se cayó un semáforo, lo recogieron pero no lo han sustituido. En el caso de las pasarelas, tanto la de la avenida Bella Vista como la de la avenida Libertador, a la altura de barrio Morichal, están totalmente deterioradas. Maturín se cae a pedazos”, precisa Díaz.

La pasarela de la avenida Bella Vista es una estructura totalmente de hierro, los transeúntes han manifestado en reiteradas oportunidades que prefieren cruzar la avenida antes que exponerse al riesgo que representa caminar por la pasarela ya oxidada.

Esta situación se replica en la pasarela de la avenida Libertador, a la altura de Barrio Morichal, la cual se encuentra en mal estado y ha dejado de ser usada por los peatones.


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