Comunidad

Por casos de COVID-19 suspenden consultas externas en el hospital de Coche

By Mabel Sarmiento @mabelsarmiento

August 10, 2022

De acuerdo con las cifras internas, hasta las 7:00 a.m., del martes, 9 de agosto, en la sala de hospitalización del centro asistencial tipo III había 15 pacientes con la enfermedad: ocho mujeres y siete hombres.

Caracas.Únicamente estamos atendiendo las emergencias. Tienes que venir la semana que viene, tal vez se reactiven las consultas externas. Solo eso informan en la puerta de ingreso de pacientes del Hospital Dr. Miguel Ángel Rangel, ubicado en la parroquia Coche de Caracas.

Desde antes de las 6:00 a. m. del martes, 9 de agosto, en las adyacencias de este centro asistencial tipo III –el único que existe para las parroquias El Valle y Coche había pacientes a la espera de su ingreso al área de consultas externas.

A las 8:00 a.m. en la cola se contaban más de 60 personas, entre las que iban al área de traumatología, a triaje y a las consultas.

Solo las que presentaban un caso de Emergencia, es decir un dolor abdominal, una subida de tensión, un problema cardíaco o fiebre, se podían quedar.

El resto de los ciudadanos debía retirarse con la indicación: Venga la semana entrante, tal vez ya tengamos la orden para reprogramar las citas. Las de hoy (martes 9 de agosto) están suspendidas. Pero intente igual en estos días, no es seguro que estén atendiendo, dijo un trabajador del área de seguridad.

La causa de la suspensión de las consultas externas es el brote de COVID-19. De acuerdo con las cifras internas hasta las 7:00 a. m. del martes, 9 de agosto, en la sala de hospitalización había 15 pacientes con el virus: ocho mujeres y siete hombres.

Repunte

Precisamente el 9 de agosto en Caracas se registraron 47 casos de COVID-19 de los 246 contagios, que reportó el gobierno de Nicolás Maduro.

En total, desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020, suman 538.887 casos confirmados en todo el país, de acuerdo con cifras oficiales.

No hay neurocirugía, no hay gastro, no hay odontología, no hay medicina interna, no hay ginecología, no hay psicología, no hay urología. Eso recitaba la portera a todo aquel que se acercaba a las rejas, mientras se le agotaba la respiración.

En la central de citas también reiteran la información que da el portero: No sabemos cuándo nos van a autorizar para dar citas.

Vine a buscar una cita para neurocirugía y me dicen que no están atendiendo. Lo malo es que tardan mucho en darlas. Dos o tres meses, y a veces uno no puede esperar tanto. Aquí, además, no hacen exámenes, no hacen eco de partes blandas, por ejemplo, contó Josefina Castro, usuaria del centro de salud.

Con COVID-19, pero relajados

Este centro asistencial fue reinaugurado el 12 de junio de 2020, luego de pasar más de un año en una remodelación que se inició como consecuencia de la explosión de un transformador en el sótano. Esta falla que dejó sin luz todas las áreas de atención médica.

El hospital de Coche fue reabierto con 140 camas. De estos cupos, 60 estaban destinadas, en ese momento, para la atención del nuevo coronavirus.

Actualmente, hay dos espacios para la atención de estos pacientes: uno en el piso dos y otra área (post COVID-19) en la planta baja, donde están haciendo tratamientos con ozonoterapia. Muy cerca de ese lugar está la Emergencia pediátrica.

Los familiares de los pacientes que llevan algún insumo médico esperan en el estacionamiento. Muchos se quitan la mascarilla para fumar un cigarro o para comer y se sientan en los bordes de las jardineras sin guardar el distanciamiento social.

Por los pasillos del hospital (que una vez se llamó Dr. Leopoldo Manrique Terrero, en honor a ese cirujano caraqueño, residente y benefactor de la parroquia) se observan camilleros, doctores, enfermeras, personal de seguridad y administrativos con trajes de bioseguridad. Pero también se ve que relajan las medidas de seguridad cuando salen a los espacios comunes, donde ya no se cumple el protocolo de desinfección.

Los que están más protegidos son los que están en el área COVID-19. Para el resto de hospital hay disponibilidad de caretas y de batas quirúrgicas, pero no hay tapabocas y hay muy pocos guantes, dijo un trabajador, quien pidió que se reserve su identidad por seguridad.

Más deficiencias 

Lo otro que se recogió en las salas de espera es que los médicos no asisten. Tampoco las enfermeras. Aquí hay puestos que se llenan con enfermeras jubiladas y lo hacen con gusto, señaló el mismo trabajador quien solicitó resguardar su identidad.

Los médicos atendían en odontología, pero le pedían a los pacientes los insumos, incluso la anestesia de uso bucal y guantes. Luego restringieron el servicio a los trabajadores y sus familiares, añadió el trabajador.

En el periférico de Coche hacen Rayos X si el médico emite la referencia. No los imprimen, el paciente debe tener un teléfono para hacer la captura de la imagen. Hay casos en los que les dicen que lleven la placa para agilizar.

La más económica (la placa) en un centro privado de la zona cuesta 20 dólares y si uno viene por una Emergencia, como le pasó a un sobrino que se cayó de la moto, es muy difícil estar rodando de un lugar a otro, contó Delio Santos, quien también esperaba en la entrada.

Ya a las 11:00 a. m. eran menos los pacientes que quedaban en el portón. Algunos con acompañantes y otros aguardaban a ver si por casualidad llega el doctor de su especialidad y, por lo menos, pudiera revisar el resultado de un examen.

Llegué aquí con un dolor en la muñeca derecha, ya tengo una operación y debe verme el cirujano. Me dijeron que me iban a atender, contó Rosa Díaz, quien esperaba en las afueras con su placa en mano.

A muchos les sugerían ir al Hospital Clínico Universitario, por la cercanía. A otros los remitieron al hospital Vargas o al Periférico de Catia, donde también refieren a los pacientes otros centros, en especial a los presuntos casos COVID-19, pues las tomas de oxígeno no sirven.

En todos los casos implica gastar más dinero en pasaje y sin la certeza de encontrar la asistencia requerida en las consultas externas.