Desde imprimir un documento hasta reparar equipos son actividades que se imposibilitan en las instituciones. Los insumos que provee el Ministerio de Educación no están llegando a los planteles, por lo que han recurrido a la autogestión. Otros buscan apoyo: “Más del 50 % de los gastos cotidianos fueron cubiertos por el aporte de los representantes”, asegura Fausto Romeo, presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Educativas Privadas sección Caracas.

Caracas. Detrás de las rejas se esconde una escuela bolivariana en Caricuao, aunque los martes y miércoles se convierta en una venta artesanal de artículos de limpieza.

En enero, un equipo de representantes y padres, de aproximadamente 17 personas, aportó 100.000 bolívares para comprar el hipoclorito y preparar botellas con cloro que después serían comercializadas. Ellos le llaman “venta social de ayuda a la comunidad”, pero el mayor beneficiario es el plantel. Para entonces se había quedado sin insumos de limpieza. Tras esta iniciativa, 20 litros de cloro comenzaron a ocupar el estante de aseo que el Ministerio de Educación dejó vacío meses atrás: las entregas las hacía de manera trimestral.

Hasta junio el litro tenía un costo de 60.000 bolívares, las ganancias obtenidas son reinvertidas para continuar apoyando a la escuela. También comenzaron a vender lavaplatos y desengrasante.

La lista de necesidades crece: la impresora se dañó y ya no tienen papel, por lo que la directora decidió desconectar la computadora y comenzar a escribir en un cuaderno. Tampoco hay internet. Los comunicados e informaciones —escritos en el cuaderno— son leídos por la directora o la secretaria en cada salón y a cada grupo de empleados.

En otra institución privada ubicada en El Paraíso organizaron una competencia entre los grados: el salón que lograra reunir la mayor cantidad de papel o cartón para reciclar, se ganaría una torta, cuyos ingredientes pondría la misma comunidad de padres. El material lo venderían a una empresa de reciclaje para acumular fondos y poder pagar la impresión de los diplomas de los estudiantes que se graduaron de sexto grado.

“Sobrevivimos gracias al apoyo de los papás. Por ejemplo, los que van llegando tarde cumplen una labor social en la escuela, tienen la opción de hacer una lectura en los salones u ofrecer su mano de obra para realizar alguna reparación. Unos ayudaron con las lámparas de emergencia, otros hicieron el servicio a los aires acondicionados. También se ofrecen a sacar fotocopias. Ya tenemos un grupo dispuesto a venir en vacaciones a pintar el colegio. De verdad que nos hemos mantenido gracias al enorme apoyo de los papás”, cuenta la directora de ese plantel, quien prefiere no identificarse.

“Más del 50 % de los gastos de mantenimiento cotidiano fueron cubiertos por el aporte de los representantes, quienes colaboraron con cloro, jabón. Vimos a emprendedores preparando cloro y desinfectantes. En algunos casos hicieron donaciones o realizaban reparaciones y se les descontaba de la cuota de escolaridad”, dice Fausto Romeo, presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Educativas Privadas (Andiep) sección Caracas.

Finalizando el año escolar, la Fundación de Edificaciones y Dotaciones Educativas (Fede) acudió a pintar el frente de una escuela básica ubicada en Antímano, también entregaron las mesasillas que requerían desde hace un año. El Programa de Alimentación Escolar (PAE) lo recibieron en junio. Este plantel requiere trabajos urgentes de rehabilitación de la infraestructura, sobre todo en el techo, paredes y ventanas.

Aquí el ministerio nada. Todo lo hacemos por autogestión y con los representantes. Las pinturas que tenemos para pintar este nuevo año escolar me las dieron los representantes. O con el plan de reciclaje que tenemos, entre todos reunimos, vamos y vendemos. Con eso pagamos la limpieza. Para las boletas recogemos una cuota y se paga la tinta. Ellos mismos traen sus hojitas”, cuenta la directora de un liceo público en Caricuao, quien prefiere mantener su identidad resguardada.

En otro colegio público de El Paraíso, la última vez que Fede realizó una rehabilitación fue hace algunos años. Constantemente tienen fallas del hidroneumático y con la electricidad. Desde el año pasado están en un listado para recibir la dotación de mobiliario para los salones. Mientras que los insumos como esponjas, coletos, cloro, desinfectantes, son patrocinados por las aseadoras, quienes además exigen al transporte de basura que les regresen las bolsas.

“Las escuelas han entrado deterioro importante. Hacen falta recursos para el trabajo pedagógico, desarrollo de la prácticas educativas, ha generado una desmejora de las escuelas. Casi todas nuestras escuelas están afectadas. Tenemos 1085 centros, 916 están en convenios, las otras son autosustentables”, mencionó Trina Carmona, presidente de la Asociación de la Educación Privada.

En agosto la mayoría de los colegios deberían iniciar la etapa de recuperación y mantenimiento de las instalaciones, pero los recursos no son suficientes para reparar aulas, baños, patios, opina Pedro Castro, presidente de la Cámara Venezuela de Colegios Privados. “Pese a que este año se dieron 5 aumentos, eso nunca había sucedido antes, no se puede”.

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Foto: Carmen Victoria Inojosa

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