Jornadas agotadoras, cosechas perdidas, imposibilidad de trabajar entre otras, son las consecuencias que produce la escasez de combustible en Monagas. Conductores aseguran que deben pasar hasta 72 horas en cola, para obtener un ticket que les permita surtir gasolina. En zonas foráneas de la entidad la situación es más crítica.
Maturín. Desmoralizados. Así se sienten los conductores de Maturín quienes aseguran que pasan hasta tres días en cola para poder surtir gasolina. Hasta ahora, luego de varias promesas, el gobernador Ernesto Luna no se ha pronunciado sobre este tema.
En los municipios foráneos de la entidad la situación se torna más complicada. Habitantes de Caripe, Sotillo, Uracoa y Púnceres han reportado que pueden pasar hasta 20 días sin combustible, situación que les genera estrés a quienes trabajan directamente con sus vehículos.
En el caso de Caripe, por ser un municipio agrícola y en el que se produce gran parte de las hortalizas, vegetales y verduras que se comercializan en la región, la situación es más alarmante.
Los productores han mencionado que deben comprar la gasolina a los bachaqueros, (mercado negro), para poder movilizar la mercancía.
Yo no sé como los bachaqueros tienen gasolina, el asunto es que la tienen cuando aquí en el municipio Caripe pasamos hasta 15 días sin poder surtir. En diciembre fue así, se olvidaron de que existíamos y quienes pagamos somos los productores y los que vivimos en la zona alta”, comentó el productor César Ramírez.
En Maturín se deben cumplir tres pasos para poder acceder a la gasolina. Estos pasos se traducen en tres días de cola para recibir un ticket que será la garantía para que el conductor acceda a la gasolina.
“Tenemos que venir tres días antes para poder agarrar el ticket. Son tres pasos: hacemos la cola para que nos den el ticket, nos marcan y luego venimos el otro día a buscar el ticket, para después venir un tercer día a echar gasolina. Esto es inaguantable”, precisó José Carvajal.
Los conductores sostienen que de manera urgente las autoridades deben dar solución a un problema que lo que ha generado es desgaste en la población. Aseguran que dentro del proceso de organización hay mucho “matraqueo”.
Todos los días es un problema con la gasolina por sinvergüenzura que tienen en las bombas. Pasamos tres días para echar gasolina y siempre es una vagabundería y matraqueo. Meten personas en la cola por amiguismo. Esto nos tiene con el autoestima baja y es un estrés. No podemos seguir así”, mencionó Hermes Rausseo, conductor en cola.
Los madrugonazos, la horas en vela e incluso la mala alimentación, son varias de las tantas consecuencias derivadas de la escasez de gasolina, sin contar la desmoralización que mencionan los conductores que sienten al ser expuestos a este tipo de situaciones.
“Yo me vengo desde las 4:30 de la mañana y hago la cola de tres días para poder echar 40 litros porque hay mucho chanchullo. No podemos hacer nuestras diligencias porque si salimos de la cola andamos pendiente que tenemos que regresar. Aquí hay que traerse desayuno y hasta almuerzo”, acotó Jorge Herrera.
Conductores hacen guardias
Quienes acuden en grupos a las estaciones de servicio de la ciudad han optado por hacer guardias en las que un grupo se retira del lugar, descansa y regresa, mientras el otro se queda en la cola cuidando los puestos para evitar malos entendidos.
José Pérez, conductor, cuenta que le ha tocado dormir dentro de su carro para no perder su turno y poder acceder a lo que se ha convertido en un privilegio para los venezolanos: llenar su tanque de gasolina. Asegura que desconoce incluso el partido político que se encarga de la organización porque ni siquiera a eso suele prestarle atención.
Estamos desde las seis de la mañana hasta el día siguiente a la misma hora. Entre el grupo nos apoyamos, unos van a sus casas y traen almuerzo a los que se quedan. Nos traemos agua, café y dormimos en los carros. Uno viene es porque le toca pero ni se como se llama esa gente que entrega los tickets (Somos Venezuela). Esto nos afecta demasiado”, detalló Pérez.
Promesas en el aire
Ernesto Luna, gobernador de Monagas, poco habla del tema de la gasolina y las posibles soluciones a este problema. Por tratarse de un tema de agenda nacional, Luna casi no lo incluye en sus alocuciones ni en la producción de su programa de radio transmitido cada martes.
El 15 de diciembre de 2022, a través de su programa, Luna prometió que el suministro de gasolina sería normalizado, sin embargo esto no sucedió. Posterior a eso, el jefe de gobierno regional se refirió nuevamente al tema y anunció la eliminación de las colas nocturnas el 13 de febrero de 2023, para ese momento reconoció que la situación con el combustible era “crítica”.
El 24 de abril pasado, Luna tocó una vez más el tema gasolina, e indicó que sostuvo una reunión con los encargados de las estaciones de servicio internacionales con la intención de mejorar el suministro en estas bombas y que las mismas pudieran trabajar 24 horas continúas.
Las estaciones de servicio premium o no subsidiadas en Maturín reportan colas de aproximadamente 60 carros. Choferes consultados comentaron que duran más de dos horas en cola para surtir combustible a precio internacional.