Jorge Rodríguez dijo que se logró un “preacuerdo”. Julio Borges lo desmintió. Las partes regresan a Caracas para hacer consultas. El próximo lunes será definitivo: o se firma un acuerdo o se acaban las conversaciones. Chile suspendió su participación indefinidamente.
Caracas. Dos días y medio duró la quinta ronda de conversaciones entre las delegaciones del Gobierno y la oposición venezolana que se realizan en República Dominicana para buscar soluciones a la crisis social, política, económica e institucional que atraviesa Venezuela. Al final de la ronda, no hubo acuerdo y Chile suspendió su participación, siguiendo los pasos de México que hizo lo propio días atrás.
El presidente anfitrión, Danilo Medina, informó que los negociadores se devuelven a Caracas con la misión de hacer consultas sobre los puntos que siguen sin resolver.
“Tengo en mi poder un acta de los avances de la agenda que está firmada por las partes y de la cual soy custodio. Basado en el principio de que nada está acordado hasta que todo esté acordado, no podemos dar detalles de los avances. Quedan aún asuntos pendientes que tienen que ser discutidos en Caracas y las partes se trasladan a Caracas para hacer las consultas”, dijo.
Medina informó que se fijó un plazo de tres a cinco días para volver a verse las caras: “El lunes se reúnen las partes aquí en República Dominicana para tratar de llegar a un acuerdo. Va a depender mucho de la discusión que se dé en Caracas sobre los asuntos que están pendientes. Hasta que todo no esté discutido no hay nada aprobado. Estamos a la espera de esa discusión”.
La matriz
El segundo en declarar a la prensa fue el ministro de Comunicación de Nicolás Maduro, el psiquiatra Jorge Rodríguez, quien en un tono celebrativo y con una sonrisa sostenida a lo largo de su intervención, afirmó en repetidas ocasiones que las partes habían firmado un preacuerdo.
“Es un día para la alegría. La mesa nos ha permitido aterrizar en un preacuerdo entre las partes que permitió firmar un acta donde están contenidos los elementos de entendimiento entre la derecha y la República de Venezuela. Saludamos el esfuerzo de la oposición venezolana que a pesar de las presiones se ha mantenido firmemente discutiendo con nosotros hasta lograr este preacuerdo”.
Dijo que los aspectos faltantes serían resueltos en las próximas 72 horas luego de las cuales “se firmará un acuerdo definitivo”.
Rodríguez dijo que “la gran mayoría de los puntos electorales están acordados” y que se establecieron “elementos de seguimiento” al cumplimiento de los puntos tanto para el gobierno y como para la oposición.
El desmentido
El jefe de la delegación de la oposición, el diputado Julio Borges (PJ) enfatizó la premisa de que nada está acordado hasta que todo esté acordado: “El día de hoy no hay un acuerdo que podamos mostrar porque a pesar de que hay avances en algunos temas, no todos han podido ser cerrados”.
Resaltó que el retorno de la delegación de la oposición a Caracas tiene como objetivo consultar con los partidos, los precandidatos presidenciales y la sociedad, “para que cualquier paso que se dé sea unitario”.
“No vamos a dar ni un paso que no favorezca una solución democrática y pacífica para Venezuela”, indicó.
Interpelado sobre el preacuerdo citado por Rodríguez, Borges replicó: “No se ha firmado ningún preacuerdo. Lo que tenemos en blanco y negro son los aspectos en los que hay avances”.
Explicó que tal como lo indicó el presidente Medina, el mandatario se queda con “un acta que plasma los avances”.
Adelantó que el próximo lunes será a todas luces el cierre del proceso: “Ahora se abre un compás de varios días en los cuales se tomara la decisión de si se avanza en los temas faltantes o no. O se logra un acuerdo integral en los cuales estamos satisfechos o no se logra un acuerdo y tendríamos que cerrar este capítulo, porque lamentablemente no se logre un acuerdo. Estas horas son para determinar si se firma un acuerdo o no”.
Los asesores
Casi en paralelo a las declaraciones de los negociadores, la plataforma comunicacional del Gobierno, dirigida por Jorge Rodríguez, posicionó la etiqueta #TriunfaLaPaz en la red social Twitter. En la misma interactuaban por igual instituciones del Estado, constituyentes, medios de comunicación gubernamentales y militantes del PSUV, replicando lo dicho por el ministro de Comunicación.
De su lado, los integrantes del equipo técnico que asesoró a la delegación política de la oposición difundió mensajes tratando de contrarrestar la campaña gubernamental que intentaba hacer ver la existencia de un preacuerdo.
El secretario de la Mesa de la Unidad, Ángel Oropeza escribió: “1) ¿Se logró un acuerdo? No. 2) ¿Y un preacuerdo? Tampoco. 3) ¿Entonces qué se firmó? Nada. 4) ¿Y ahora? Los puntos en los que ha habido avance, y en los que no, se llevan a consulta a Caracas”.
La psicóloga social Colette Capriles advirtió a los usuarios de la red social no caer en “la manipulación” del Gobierno: “No hay acuerdo, no hay preacuerdo, no hay firma de nada. Recuerden que el Gobierno está desesperado por legitimar su situación”.
El abogado constitucionalista Juan Manuel Raffalli también tuiteó sobre el resultado de las reuniones de esta semana: “Los acuerdos implican voluntades concurrentes. Cuando una de las partes dice que no hay acuerdo, no hay dudas al respecto. Las actas recogen lo que se dice y ocurre, no lo que se acuerda. No manipulen más. La oposición no cedió en la lucha por los derechos de los ciudadanos”.
Chile se paró de la mesa
En esta quinta ronda de negociaciones, el gobierno de Chile no estuvo representado por su canciller, Heraldo Muñoz (quien luego de la convocatoria unilateral a presidenciales expresó sus dudas sobre el éxito del proceso) sino por un embajador especial.
Sin embargo, al finalizar la jornada de este miércoles, la cancillería del país austral emitió un comunicado en el que expresa su decisión de suspender indefinidamente su participación como acompañante del diálogo, si no se concretan a la brevedad las condiciones entre las partes para la realización de elecciones presidenciales democráticas, transparentes y conforme a estándares internacionales”.
La decisión de Chile deja a la oposición sin acompañantes internacionales toda vez que Paraguay nunca se incorporó al proceso y México se retiró la semana pasada. Entretanto el gobierno sigue teniendo de su lado de la mesa a Nicaragua, Bolivia y San Vicente.
Fotos: cortesía @mirexrd, @unidadvenezuela, @vtvcanal8