Los trabajos de mejoras del estadio de beisbol donde se formó el pitcher Ángel Padrón superan los 250.000 dólares. Mientras que la grama artificial del campo de fútbol la remiendan con aguja e hilo porque no hay presupuesto para repararla.
San Cristóbal. Al igual que los hospitales, planteles educativos y hasta las empresas del Estado, los estadios y espacios deportivos en el estado Táchira no escapan del abandono y la desidia.
Canchas donde entrenan niños y adolescentes, promesas del deporte del país, no cumplen con las condiciones idóneas para que realicen sus prácticas, lo que limita su desempeño en cada entrenamiento.
Tal es el caso del estadio de Alí Ramírez Roa, en Cordero, municipio Andrés Bello, el cual está abarrotado de huecos. El tiempo sin mantenimiento no perdonó la grama artificial, por lo que los entrenadores no les quedó más remedio que suspender sus actividades en este lugar.
El presidente de la escuela de beisbol comunitaria Cardenales de Cordero, Alirio Gómez, indicó que esta organización agrupa a 110 niños, con edades entre 4 y 16 años, quienes deben entrenar en campos alternos.
Un proyecto para las mejoras del campo, que se calcula en 250.000 dólares, se entregó ante las autoridades y debe reposar en alguna gaveta gubernamental.
“Queremos recuperar el campo, pues en Cordero solo contamos con una escuela de beisbol. Necesitamos tener operativo el estadio para continuar formando hombres de bien y los futuros peloteros de las grandes ligas”, expresó.
Cuna del tiburón Ángel Padrón
Esta expresión del entrenador cobra más vigencia porque allí se formó el pitcher tachirense Ángel Padrón, quien hizo historia en la Serie del Caribe, al lograr la hazaña del no hit no run con su equipo Tiburones de La Guaira. Luego de la proeza, el pelotero visitó su tierra natal, donde el pueblo lo recibió con júbilo y lo acompañó en una caravana que partió desde Táriba hasta Cordero.
Padrón se sorprendió al ver las condiciones del estadio donde se formó como beisbolista. Comentó a su fanaticada que mantendría una reunión con el presidente Nicolás Maduro para pedir los recursos y lograr la reparación de la cancha.
Nosotros jugamos por la fanaticada, y si la fanaticada está cómoda, nosotros vamos a estar cómodos”, indicó Padrón.
Aprovechó la oportunidad para mencionar que en todo el país ocurre lo mismo. Hay estadios que se encuentran en total deterioro, las sillas destruidas, baños cerrados, entre otras carencias.
Remiendan con aguja e hilo
Con una medida de 80 x 84 metros, la cancha de fútbol de Puente Real, en el municipio San Cristóbal, se encuentra en completo deterioro, desde hace al menos tres años. A pesar de los intentos de la junta directiva de este campo por recuperarla, al momento ninguno ha dado frutos.
Desde entonces los trabajadores han realizado remiendos con agua e hilo en la grama artificial. Este paño de agua tibia permite dar continuidad al entrenamiento de los niños, jóvenes y adultos que a diario ocupan este espacio. Cada metro cuadrado de grama supera los 20 dólares.
Carlos Moreno, representante de uno de los niños que entrena en la cancha, explicó que por más llamados al Gobierno, no se tiene una solución a corto plazo. A pesar de ello opta por traer a su hijo a Puente Real para que entrene allí, pues reside en la zona.
De manera extraoficial se pudo conocer que en cuestión de semanas podrían iniciar los trabajos de recuperación; sin embargo, los usuarios se muestran incrédulos ante el anuncio.