La economía empeoró durante el decreto de emergencia

A lo largo del 2016, el Gobierno recortó las importaciones e impuso más controles a los privados. Ecoanalítica estima que la inflación subyacente es 1.008 %.

Caracas. El presidente Nicolás Maduro en el transcurso de 2016 ha gobernado a través de un decreto de emergencia económica, bajo el argumento de que por esa vía se “estabilizaría” el país, pero durante el año la economía empeoró.

“El decreto me da el poder suficiente para derrocar la guerra económica, para estabilizar socialmente el país y enfrentar las amenazas nacionales e internacionales”, aseveró Maduro en una alocución. Con esa emergencia, el Gobierno anunció la conformación de mesas para impulsar los “motores de la economía”, pero en paralelo impuso más controles y recortó las importaciones, de manera que la producción bajó y se incrementó el desabastecimiento de medicinas, comida y artículos de higiene personal.

¿Qué ha pasado durante la emergencia?

Inflación acelerada. El país tiene una “inflación crónica”, afirmó el economista Asdrúbal Oliveros. El 2015 cerró con un índice nacional de precios de 180,9 %. En el 2016, la variación ha sido elevada, y según cálculos de Ecoanalítica, a octubre la inflación fue 412,2 %, pero la inflación subyacente —que incluye precios de los productos no controlados— llegó a 1.008 %. Ese incremento de los precios deteriora el poder de compra del salario del venezolano.

Producción a pique. A principios de 2016, el Ejecutivo creó el Consejo de Economía Productiva Nacional para nuevamente revisar los obstáculos de la producción e instaló mesas por “motores” para impulsar la economía. Sucedió lo contrario: los sectores clave se desplomaron por el modelo de controles del gabinete presidencial. Asdrúbal Oliveros indicó que “hay una depresión económica debido a que la caída es profunda y larga”. Destacó que las actividades que generan más empleo como comercio, construcción y manufactura están en contracción.

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Recorte de importaciones. Con un precio del barril alto, la administración de Nicolás Maduro ya había bajado la asignación de divisas a las empresas, ahora que el crudo continúa en descenso, el recorte es más fuerte. Las cifras de la firma señalan que en octubre las liquidaciones de divisas diarias fueron 12,5 millones de dólares, cuando en septiembre estaban en 35,3 millones de dólares. Esos datos evidencian que las industrias han tenido limitaciones para importar materia prima y equipos, por lo cual operan a baja capacidad. Y de las compras que se han realizado, más de 60 % son del sector público.

Incremento de controles. A través del decreto de emergencia económica, el Gobierno creó la Gran Misión de Abastecimiento Soberano (GMAS) y los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap) para controlar la producción y la distribución de las industrias. En un foro sobre el decreto de emergencia organizado por la Asamblea Nacional, el presidente de la Comisión de Finanzas, Alfonso Marquina, señaló que el decreto sirvió “para designar militares a fin de controlar el aparato productivo nacional”.

Ingresos palo abajo. En el transcurso de este año, la producción petrolera ha decaído como consecuencia de la menor inversión, las deudas con los proveedores, la baja de las importaciones y la disminución de gas, y ello ha impactado en los ingresos. El economista Oliveros detalla que la producción ha descendido en 300.000 barriles diarios y “con los precios actuales son 2 millardos de dólares que se han dejado de percibir”.

La extracción en octubre fue de 2,3 millones de barriles diarios, indican cifras de la Organización de los Países Exportadores de Petróleo. Pero frente al menor flujo de ingresos, Pdvsa ha buscado vías para atender sus compromisos y en este último trimestre realizó un canje de sus bonos. Aunque logró postergar el pago de 2,7 millardos de dólares, la operación implicó un aumento de la deuda en 1,1 millardos de dólares.

Foto referencial: AVN


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