El presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela, Jesús Mendoza, comentó que el comedor reabrió el Día del Estudiante Universitario, como un proyecto piloto, pero solo tenían recursos para 500 platos de comida hasta el 1° de diciembre.
Caracas. Ya a las 11:55 a. m. había una larga fila fuera del comedor de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Al menos 500 estudiantes esperaban, con su carnet estudiantil en mano. Unos pocos minutos después la fila comenzó a avanzar de manera rápida.
Los estudiantes entre conversaciones y con tranquilidad aguardaban su turno para ingresar al lugar que ofrece un almuerzo por alumno gratis. El menú del martes, 29 de noviembre, fue arroz con granos, el del miércoles arroz con pollo y el del jueves pasta con pollo.
El martes fue la tercera vez que Dayni Pacheco, estudiante de Comunicación Social, recibió un almuerzo en el comedor de la universidad. “Tenía buena sazón pero este plato no tenía proteína, ni frutas, tampoco jugo”.
Dayni recibió la comida rápido y estaba caliente, sin embargo, era poco alimento y no cumplía las características de un almuerzo balanceado.
Jean Vieira, estudiante de décimo semestre de Nutrición de la UCV, recuerda que en sus tiempos en el campus el comedor proporcionaba un servicio bastante completo. Las bandejas incluían proteínas, carbohidratos, acompañados de una ensalada, cocida o cruda, un jugo y una porción de postre o fruta.
Pero a medida de que la situación económica se agravó, la UCV hizo ajustes en el menú, hasta la desaparición por completo del comedor durante casi tres años.
Acondicionamiento
Andrés José Camacho, director del comedor, aclaró que el sitio estuvo dos años y ocho meses sin funcionar por la pandemia de COVID-19 y posteriormente fue intervenido por el Estado venezolano para su reparación. Aún se continua el acondicionamiento del espacio y la dotación de equipos de cocina.
Así mismo dijo que los recursos para el funcionamiento del comedor deberían venir del Ministerio para la Educación, pero es algo que no se cumple por presunta falta de recursos.
Solo el almuerzo
El presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV (FCU-UCV), Jesús Mendoza, estuvo en el comedor y ayudó a organizar a los estudiantes para que recibieran el alimento.
Agregó que el comedor reabrió el Día del Estudiante Universitario, el 21 de noviembre. Ese lunes el menú fue arroz chino con ensalada y jugo.
Mendoza también contó con pesar que en el comedor solo tienen insumos para dar alimentos hasta el jueves 1° de diciembre. La FCU-UCV hizo una donación de una tonelada de pollo y el Ministerio para la Educación suministró unas bolsas del Comité Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) que estaban guardadas en el comedor.
Solo se estableció el almuerzo, los desayunos no estuvieron contemplados en el plan piloto.
Mendoza explicó que el 21 de noviembre inició un plan piloto que contempló el alimento de los días lunes, martes, miércoles y jueves de ambas semanas. Así mismo mencionó que están haciendo el mayor esfuerzo para conseguir el financiamiento necesario para continuar con el proyecto de manera permanente.
Comer por primera vez en el comedor universitario
Luis Fernando López, estudiante de primer año de Derecho, hizo la fila desde las 11:00 a. m. para recibir su plato de comida, pero al llegar supo que el menú era arroz con granos y el joven no los consume, así que prefirió dejarle el plato de comida a otro estudiante. “A mi no me gustan los granos así que prefiero no quitarle el plato de comida a quienes están detrás de mí”.
A Luis le hacía ilusión comer por primera vez en el comedor, así que se comió un trozo de pan que le había quedado de su desayuno.
Vieira mencionó que ya no hay presencia de todos los componentes en los alimentos del comedor, especialmente de las proteínas. Las porciones de pollo fueron bajando, antes servían 200 gramos, bajaron a 100. Actualmente hacen pisillo de pollo para poder rendir al máximo la porción de proteína y que alcanzara para los alumnos, trabajadores y profesores.
Un plato con arroz con granos no tiene todo el valor energético, para las necesidades que tiene día a día el estudiante universitario.
Un almuerzo navideño
Camacho comentó que esperan poder darle a los estudiantes un almuerzo navideño. Una comida completa y tradicional que lleve hallaca, pan de jamón, ensalada, jugo y postre.
El director dijo que esto solo sería posible con la colaboración y donación, de las empresas privadas y del Ministerio para la Educación.
Vieira, por su parte, aseguró que a la UCV llegan estudiantes de todas partes de Venezuela, y muchos dependen de la comida que ofrece el cafetín. Cada vez son más los estudiantes que se ven afectados por la situación económica que los lleva a presentar un nivel alto de estrés. Muchos no pueden procurarse los alimentos, esto ocasiona que no rindan en sus actividades diarias.
“Cada vez los estudiantes se ven más delgados y anémicos”, dijo Vieira.
Un servicio de “Nueva York”
Entre las remodelaciones realizadas al comedor universitario se agregaron unos filtros inteligentes que hacen sentir a Marian en “Nueva York”, así lo expuso la estudiante mientras llenaba su termo de agua para posteriormente catar la calidad de la misma.
Así mismo entre bromas sugirió que ni la Universidad Católica Andrés Bello cuenta con tan alta tecnología.
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