El movimiento estudiantil convocó a los caraqueños a acompañarles este jueves 21 de noviembre a marchar hasta Fuerte Tiuna. Juan Guaidó llamó a la protesta sostenida: el lunes, “todos a protestar por los problemas de su comunidad”; el martes, junto con las enfermeras; el miércoles, con los maestros y el jueves, con los estudiantes.
Caracas. El presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela, David Sosa, convocó a los caraqueños a acompañar este jueves 21 de noviembre al movimiento estudiantil hasta Fuerte Tiuna.
“La invitación que le hacemos a cada venezolano es para que nos acompañen el 21 de noviembre, Día del Estudiante Universitario, que celebra la gesta de la generación de 1957 que elevó la voz contra el dictador Marcos Pérez Jiménez. Como en aquel entonces, hoy volvemos a levantar la voz y marcharemos a Fuerte Tiuna a decirles a los militares que se pongan del lado de la gente”, dijo Sosa.
El exhorto se produjo este sábado durante la concentración realizada en la avenida Francisco de Miranda en Caracas. Dijo que, además del llamado a unirse a la lucha por la restitución de la democracia, el objetivo es comprobar “si realmente hay una Fuerza Armada Democrática que respeta la Constitución”.
Sosa recordó que la víspera, el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, le respondió al Comando Sur que la FAN venezolana sí respeta el legítimo derecho a la protesta: “Nosotros vamos a Fuerte Tiuna a comprobar si eso es verdad y a decirles a los militares que se pongan del lado de nosotros”, afirmó Sosa en medio de los aplausos y el respaldo de los manifestantes.
La respuesta de los asistentes fue clara: “¡El jueves a la calle, con los estudiantes!”, corearon los caraqueños.
El mensaje no llegó a todos
La tarima para la actividad de este sábado se instaló unos 300 metros antes de la plaza José Martí, ubicada en la intersección entre Country Club, El Rosal y Chacaíto. No fue una estructura apoteósica, como las que se han visto en otras protestas opositoras, sino más bien pequeña y endeble.
Los voceros de los sectores se subían por turnos y en números controlados.
Además, el andamiaje se armó unos 30 minutos antes de que llegara Guaidó al lugar. “Nos retuvieron los camiones con la tarima. Esto fue lo mejor que logramos conseguir en tan poco tiempo”, dijo una integrante del equipo logístico de VP. El sonido fue otro inconveniente. Personas que estaban a una cuadra de la tarima no se enteraron nunca de lo que dijo Guaidó o alguno de los otros dirigentes sectoriales que intervinieron.
“¿Y entonces, en qué quedó? ¿Qué dijo el hombre?”, le preguntaba una pareja de motorizados a otra al término de la actividad, a menos de 500 metros de Guaidó.
Calle sin retorno, pero con compromiso
Antes de Guaidó, y además de Sosa, hablaron Hilda Rubí, en nombre de las mujeres; Juan Pablo Guanipa, por la Asamblea Nacional; Gustavo Padrón, por los maestros; Lustay Franco, por la juventud, y Ana Rosario Contreras, por las enfermeras.
Hoy no es un día de fórmulas mágicas. Es un día para persistir. Si tenemos que llamar a la calle sin retorno, lo haremos, pero en conjunto”, dijo Contreras.
Cuando intervenía Franco, un grupo de personas comenzó a corear: “¡Calle sin retorno, calle sin retorno!”. Franco replicó: “Esa calle sin retorno que estamos pidiendo no puede quedarse en discurso. ¡Tenemos que comprometernos para salir de esta vaina!”.
A la 1:25 de la tarde le correspondió hablar a Guaidó, que la víspera había dicho que él “asumiría su responsabilidad” y esperaba que la gente hiciera lo propio. También había dicho que no temía generar expectativas sobre lo que pasaría hoy. Muchos se hicieron expectativas y al final no hubo un gran anuncio.
Habló 20 minutos. Reiteró que la denominada calle sin retorno no es más que “una agenda de lucha y calle permanente”. Como parte de esa agenda convocó a protestar este lunes en todo el país a las 9:00 de la mañana contra los problemas de cada comunidad. Para el martes pidió que todos los sectores se unan a la protesta que realizarán las enfermeras a escala nacional. Pidió que el miércoles la gente salga al lado de los maestros. Y para el jueves pidió acompañar a los estudiantes en la protesta del 21 de noviembre.
“¡La lucha es hasta que cese la usurpación, hasta lograr la transición, hasta lograr elecciones libres!”, subrayó.
Apoyo a Bolivia
En su discurso, Guaidó Saludó el proceso político que vive Bolivia y envió un mensaje de apoyo a su presidenta interina.
Al término de su intervención pidió a los asistentes que lo acompañaran hasta la sede de la Embajada de Bolivia en Altamira. Se bajó de la tarima y se fue caminando hasta el sitio.
Aunque muchos manifestantes se retiraron, otro grupo le acompañó. Desde la sede diplomática, que estaba custodiada por un contingente de la PNB, Guaidó volvió a tener palabras de apoyo para los bolivianos.
Esta es una embajada amiga de la democracia, de la libertad. Nuestra hermana Bolivia. La hija predilecta del Libertador logró su libertad con la movilización de todos los factores. Es momento de seguir”, dijo.
Finalmente, Guaidó y los presentes entonaron el Himno Nacional en tributo a Bolivia y a todos los mártires de la lucha por la libertad en Venezuela.
Ningún funcionario salió a recibirlos, puesto que el nuevo gobierno encabezado por Yanine Áñez aún no ha designado nuevo personal, y el asignado por Evo Morales no reconoce a Guaidó.
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