Hace 25 años no se menciona el proyecto de conectar Cumaná con el resto del país. Mientras, el Gobierno anuncia labores de desmalezamiento y asfaltado de la autopista Antonio José de Sucre.
Cumaná. En el estado Sucre las últimas obras públicas de gran magnitud se hicieron en el año 2015, cuando el Gobierno anunció la ejecución de 43 proyectos con motivo de la celebración de los 500 años de fundación de Cumaná.
Para entonces, se hicieron labores de bacheo y limpieza en el sector Nurucual de la autopista Antonio José de Sucre, así como la torrentera y drenajes del distribuidor de Yaguaracual. No se terminaron las labores.
Y nadie tampoco habló del proyecto macro para finalizar la autopista que, según referencias históricas, en 50 años apenas lleva 9,5 kilómetros de construcción.
José González forma parte de los más de 500 obreros de la comuna de trabajadores de la construcción Antonio José de Sucre, en Cumaná, y está sin empleo, como todos los demás.
Somos obreros, ayudantes, carpinteros, albañiles y cabilleros que vivimos en las parroquias Altagracia, Santa Inés y Gran Mariscal de Ayacucho, en Cumaná, pero todos estamos desempleados porque en Sucre no se construyen obras de gran magnitud”.
José asegura que ha aprovechado el conuco de la familia para sembrar yuca y lechosa, mientras sus compañeros sobreviven haciendo casabe, vendiendo pescado, semillas de merey y bolsas en el mercado de Cumaná.
“Los que nos quedamos en Cumaná estamos sobreviviendo, pero hay compañeros que han migrado a Ciudad Bolívar para trabajar en las minas y otros se han ido del país, porque es mentira que la crisis se terminó”, enfatiza.
En Sucre no se construye
“En reiteradas oportunidades hemos solicitado al gobernador Gilberto Pinto y a los diputados que hagan honor al Gran Mariscal de Ayacucho y retomen proyectos macro, como la central eléctrica y la autopista Antonio José de Sucre, que se encuentran paralizadas”, detalla el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Construcción del estado Sucre, José Villamizar.
Dice que las construcciones, al igual que la ciudad obrera Nicolás Maduro, ubicada en la avenida Cancamure de Cumaná, no están activas.
El gremio de la construcción denunció en el año 2021 el colapso del distribuidor El Merey, también se paralizaron las labores en el túnel y los viaductos que conectarían desde Bella Vista a Yaguaracual, así como el tramo de autopista que enlaza la población de San Fe con Cumaná.
En alocuciones recientes, el gobernador Pinto anunció labores de limpieza, desmalezamiento, bacheo e instalación de carpetas asfálticas en la autopista.
“Mientras que en otros estados el desarrollo y el progreso llega a través de la industria de la construcción, nosotros como estado emblemático en la lucha de la independencia de Venezuela, vivimos en el olvido y el abandono”, añade Villamizar.
Socialismo y desinversión
Miguel Vásquez, legislador sucrense, opina que el Gobierno debe retomar la culminación de esta importante arteria vial para garantizar el desarrollo económico y social de la entidad.
Recuerda que la construcción de la autopista ha significado grandes avances, pero también denuncias sobre corrupción, como ocurrió con las pantallas atirantadas.
A su juicio, la llegada del socialismo al poder significó “un desprecio a la culminación de la obra” y han sido mínimas las inversiones que se han destinado a este tramo vial en 25 años.
Los gobernantes locales echaron por tierra la lucha por la descentralización y más nunca emplazaron al Gobierno para culminar la vialidad asociada a la promoción del estado Sucre”, recalca Vásquez.
Sostiene que tampoco se vislumbra una posible inversión y mucho menos el otorgamiento de una concesión a un consorcio extranjero frente a la bamboleante estabilidad política y jurídica del país.
La raíz del problema
Cristina Blanco, presidente del Centro de Ingenieros del estado Sucre, explica que la autopista tiene una propuesta de trazado, pero el proyecto no está ejecutado.
No se hicieron los estudios geológicos de suelo, factibilidad y el cálculo estructural que se requieren para complementar el proyecto”.
La construcción comenzó desde el sector Los Bordones hacia El Tacal y se construyó el puente La Leona, donde hubo varias dificultades con el terreno.
“Luego empezaron a hacer el túnel, pero el terreno es muy duro, tiene material mixto con mucha piedra y arena, y no pudieron continuar. Es por ello que se requiere un estudio, con cálculos estructurales de puentes y viaductos”, explica.
Blanco reconoce que los sucrenses necesitan la autopista, pues por las limitaciones de acceso y comunicación, los productos son más costosos.
Hace 35 años, la Cámara de Comercio Industria y Producción de Cumaná encabezó una movilización desde la capital de Sucre hasta Puerto La Cruz, estado Anzoátegui, para llamar la atención del Gobierno sobre la necesidad de construir esta importante vía de comunicación.