Escuelas en Bolívar agonizan por el colapso de infraestructuras y servicios

Escuelas en Bolívar agonizan con infraestructuras colapsadas

Aulas de preescolar sin techo y estacionamientos convertidos en vertederos de basura. Así están las escuelas en Bolívar.

Ciudad Guayana. El estado de ruina de las escuelas en Bolívar es la evidencia de la poca o nula prioridad que el Gobierno da a la educación en todos sus ámbitos. Los dos años de pandemia y de clases a distancia no se aprovecharon para el mantenimiento. Las clases presenciales se retomaron con la infraestructura colapsada, incluso con aulas sin techo.

Este es el caso de la escuela Andrés Bello, en el sector Los Sabanales, en San Félix. Allí fue donde Erika Carvajal, miembro del Colegio de Profesores en Bolívar, se inició en la docencia. Durante el año escolar 2021-2022 el plantel sufrió 19 hurtos. El más grave fue cuando se llevaron el zinc de dos aulas de preescolar. En esa área hay una matrícula de 110 niños, de los cuales resultaron afectados 69.

Las aulas sin techo siguen igual. No recibió ninguna atención, a pesar de las denuncias del Colegio de Profesores. Y la autoridad única de Educación, Brizeida Quiñones, está al tanto. No han querido dar aportes porque los directivos no son afectos al partido. Es como un castigo que tienen con esa escuela”, denunció Carvajal.

Las clases para esa matrícula se habilitaron en un salón al que le faltaba menos de la mitad del techo, y se completó con unas láminas de zinc más pequeñas que donó una empresa.

Sin embargo, por la falta de mobiliario, la cantidad de alumnos que pueden asistir diariamente por aula es entre 28 y 30 estudiantes.

“Terminaron el año escolar asistiendo dos veces por semana. Los atendían en la biblioteca y se turnaban con las demás secciones para que pudieran usar el espacio”, agregó Carvajal.

Instituciones colapsadas

En el área de primaria, la cantidad de alumnos de primero a sexto grado es 625. En sus espacios hay filtraciones en 90 % de la infraestructura, deficiencia de alumbrado, falta de agua potable y baños inutilizables.

“Solo funcionan dos salas de baño, recuperados por Unicef, al igual que la cocina para preparar los pocos alimentos que llegan”, lamentó.

De las 1392 escuelas públicas que existen en el estado Bolívar, de acuerdo con la información de la Secretaría de Educación y el Colegio de Profesores en la entidad, 80 % de ellas no están aptas para recibir a los alumnos por los problemas de infraestructuras y servicios básicos.

Escuelas en Bolívar agonizan con infraestructuras colapsadas
La escuela Andrés Bello, en San Félix, tiene dos aulas sin techo, lo cual afecta a casi 70 niños de preescolar. Foto Cortesía Erika Carvajal
Madres y estudiantes

En la Unidad Educativa Nacional Guayana, en el sector de Villa Brasil (Puerto Ordaz), hay cuatro modalidades.

En el liceo hay 181 alumnos de primero a quinto año. Allí también funciona la Unidad Educativa Nacional Creación San Félix (educación para adultos), con una matrícula de 115 estudiantes. Pero además, hay un salón para maternal, con 10 niños.

El salón solo cuenta con unas sillas plásticas. Pero más allá de las condiciones, es de destacar que no debería operar un área de maternal donde hay estudiantes de básica, bachillerato y adultos. Sin embargo, el espacio se habilitó por aquellas alumnas que salieron embarazadas. “Para que no dejen de estudiar, dejan allí a sus bebés y van a clases”.

La cuarta modalidad es la universitaria, con la UPEL, que funciona los fines de semana para formar a docentes.

Vertedero de basura

La indolencia hacia las escuela en Bolívar llegó hasta al punto de permitir que al estacionamiento de la escuela Ramón Antonio Pérez, en la parroquia Simón Bolívar de Ciudad Guayana, lo convirtieran en un vertedero de basura. Habitantes de la comunidad contribuyen con el basurero. Al lado, un grupo de personas invadió y cohabitan entre los desechos.

Esta institución con 686 alumnos y 27 docentes y personal directivo tiene la segunda planta inhabilitada desde hace cuatro años. Esto como consecuencia del temblor de agosto de 2018, cuya estructura quedó afectada.

En el Centro de Educación Inicial San Félix, con 109 alumnos, dos espacios administrativos tuvieron que ser habilitados como aulas de clases, por el mal estado de las otras.

Cuando llueve, los niños no van a clases porque llueve más adentro que fuera de la escuela”, agregó Carvajal.

Deserción

Mayra Mejías, después de 10 años de docencia, abandonó el ejercicio de su profesión. Además, del bajo salario, denunció el acoso de la directiva de la institución en la que laboró y las pésimas condiciones del lugar.

“Además, de que el sueldo no te alcanza ni para el transporte, estar allí era exponerte a enfermedades. Las paredes y techo con moho de tantas filtraciones. Los baños sin agua. Cuando se limpiaban era porque las maestras llevábamos cloro para las pocetas y no agarrar una infección”, denunció.

Yliach Alcalá, secretario de Organización del Colegio de Profesores en Bolívar, señaló que no todas las escuelas cumplieron con el reintegro a clases 100 % presenciales.

“Las escuelas en Bolívar no reúnen las condiciones humanas y materiales para ir a las aulas, ni siquiera con condiciones de higiene. Preferimos no enviar a nuestros hijos a clases. Nosotros mismos llevamos un control y una educación asistida a nuestros hijos, porque no vamos a exponerlos a una jornada diaria sin ni siquiera una alimentación adecuada”, afirmó Alcalá.

De acuerdo con el informe “Estudiar entre Ruinas”, elaborado por Cecodap, de 56 escuelas que visitaron en todo el país, se determinó que 32.656 estudiantes se ven perjudicados por el estado de los planteles. De ellos, 3407 son de Bolívar.

Aunque, desde 2015 no hay cifras oficiales en materia educativa, con el Plan Victoria Bicentenaria, el Estado reconoció una matrícula de 8,7 millones para el año escolar 2021-2022. De acuerdo con el estudio de Cecodap, 48,5 % de la matricula se distribuye en instituciones públicas.


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