El joven caraqueño continúa con su proceso de aprendizaje en la Academia de la NBA en Latinoamérica, con sede en México, donde recibió una beca este año.

Caracas. Jonathan Griman trabaja fuerte y sigue con su desarrollo en el tabloncillo, donde aspira a consolidarse hasta convertirse en el cuarto venezolano en la NBA tras Carl Herrera, Oscar Torres y Greivis Vásquez.

El caraqueño de apenas 18 años de edad recibió este año una beca de la NBA Academy Latin America, con sede en suelo mexicano, por su destacada actuación en el Suramericano Sub-18, realizado en Venezuela.

Griman es hijo del exjugador de Cocodrilos de Caracas Ronald Griman y practica baloncesto desde los 10 años. Se inició en las menores de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y, después de culminar sus estudios de bachillerato en el Liceo Caracas, se unió a la Academia Spartans de Distrito Capital.

Un año movido para el joven atleta

El 2022 ha sido bastante ajetreado para Griman, quien se coronó en los Juegos Deportivos Nacionales con la selección de DC, después brilló en el Suramericano Sub-18, donde promedió 11.4 puntos por partido, y también representó a Venezuela en los Juegos Bolivarianos, celebrados en Colombia.

Su actuación en los diferentes torneos le valió realizar una prueba en la NBA Academy Latin America, gracias a las gestiones de la Federación Venezolana de Baloncesto (FVB) y tras ese proceso recibió la beca del programa que recluta a los mejores talentos del llamado Deporte de los Gigantes fuera de los Estados Unidos.

Para mí es una gran oportunidad de desarrollar mi juego. Estoy dando el 100 % en cada entrenamiento y en aprender lo más posible de los coaches y el resto del staff”, señaló Griman al departamento de prensa de la FVB.

Según el ala-pivot, el trabajo en la Academia compagina la formación deportiva con la académica y recibe, entre otras materias, clases de inglés. Todo se realiza en el Centro Deportivo La Loma de San Luis Potosí.

Agradecido con “Mamá Osa”

Griman dice estar agradecido con su familia y su agente, pero no olvida a los entrenadores que han sido importantes en su corta carrera, entre ellos, el campeón de la Superliga, Néstor “Mamá Osa” Salazar.

Salazar ha sido uno de los que me ha aconsejado y guiado a tomar decisiones importantes. Con Ronald Guillén compartí mucho en el proceso de la Sub-18. Freddy Rizzo fue mi primer entrenador y quien me entrenó en mis últimos meses en Venezuela”, recordó.

El talentoso basquetero concluyó con un consejo que trata de aplicar en su día a día y es válido para los jóvenes que, como él, quieren crecer en el mundo deportivo: “Lucha por tus metas y por lo que quieras en la vida. Soy de los que piensa que cualquiera es capaz de hacer lo que se proponga, solo que no todos hacen lo necesario para que suceda”.

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