A 200 años de la gesta, jóvenes estudiantes desconocen significado histórico de la Batalla de Carabobo

Batalla de Carabobo

Historiadores y docentes coinciden en que la nueva generación de estudiantes de bachillerato y primaria poco conoce la historia del país. Solo reciben información ajustada a los 21 años que lleva implementada la Revolución Bolivariana emprendida por el presidente fallecido Hugo Chávez, y continuada por Nicolás Maduro.

Valencia. Este 24 de junio se celebran 200 años de la Batalla de Carabobo, gesta que selló la independencia de Venezuela. Sin embargo, jóvenes estudiantes carabobeños de educación media no reconocen su significado histórico debido a la deficiencia en el sistema curricular, el cual prácticamente relega el tema a un segundo plano. 

A diferencia de sus pares de bachillerato, quienes aún pueden discernir sobre este suceso histórico son los estudiantes de primaria. Los docentes de educación básica asignaron trabajos alusivos a este evento de 1821. 

Los estudiantes de bachillerato divagan sobre el significado e importancia de la Batalla de Carabobo, el currículum escolar que aborda el Área de Formación Geografía, Historia y Ciudadanía (GHC), no tiene como objetivo estudiar el día en que se logró que el ejército realista se rindiera al ejército patriota formado por campesinos y comandado por el libertador Simón Bolívar.

Daniela Araque culminó su carga académica hace dos semanas en un colegio privado del municipio Naguanagua de Carabobo. Está esperando su acto de graduación de bachiller. Al ser consultada sobre cuándo se realizó la Batalla de Carabobo dijo en voz baja y apenada un rotundo: no sé.

Justificó su desconocimiento con el hecho de que durante cinco años de bachillerato no recibió esa información.

Es que no sé, la profesora de GHC no mandó a hacer nada sobre ese tema, creo que en primaria me dieron esa clase, pero ahorita no la recuerdo″, sostuvo la joven que pretende iniciar sus estudios universitarios en Comunicación Social.

Javier Sousa tiene 13 años de edad, acaba de ser promovido a tercer año de bachillerato en una institución pública de Valencia, y, al igual que Araque, tampoco recordó qué celebran cada 24 de junio los venezolanos. Aseguró que en GHC, el docente se refirió más a estudiar geografía del país que la historia. 

Lo último que me mandaron a investigar fue sobre la dictadura de Pérez Jiménez, entregué la tarea la semana pasada, y ya terminamos las clases″, dice.

Samuel Andrade estudia sexto grado, tiene 12 años. Recordó con facilidad: “El 24 de junio se celebra la independencia de Venezuela, fue la Batalla de Carabobo”, su maestra de primaria le asignó realizar un mapa mental con las claves de ese hecho histórico. Sólo resaltó que el responsable del triunfo fue Simón Bolívar.

Samuel en su trabajo no mencionó que el enfrentamiento entre los ejércitos patriotas y realistas duró unas dos horas, que el general José Antonio Páez y el Negro Primero jugaron un papel importante en la batalla, e inclusive se contó con el apoyo de fuerzas británicas. 

“Analfabetas funcionales”

Luis Guillermo Padrón, presidente de la junta sindical transitoria del Sindicato de Venezolano de Maestros en Carabobo (Sinvemaca), sostiene que el sistema curricular actual busca formar “analfabetas funcionales”, porque se ha sesgado la historia al punto de que los jóvenes no están siendo formados para tener un pensamiento crítico.

Aseguró que están resumiendo la historia y mencionan a personajes como Manuelita Sáenz y Ezequiel Zamora como grandes héroes acreedores de la independencia de Venezuela. Alertó que en la discusión de la nueva Ley del Docente se está borrando la historia de Venezuela, “quieren hacer una fusión con la historia de Cuba y los héroes del comunismo”.

Padrón también manifestó preocupación porque hay un alto déficit de docentes en el área de sociales: las universidades no están graduando profesores en esta área.

Hay un déficit de profesores de Historia porque la universidad no está graduando docentes. En las escuelas nacionales de Carabobo había en nómina 47.000 docentes, ahora solo hay 32.000″, dijo.

El programa GHC es la fusión de tres materias que anteriormente eran estudiadas de manera individual. María Teresa Martínez, docente de sociales, criticó este programa al asegurar que está desordenado y poco articulado.

Asimismo, dijo que está ajustado a intereses ideológicos, a la historia de los últimos años enfocada en los logros de la revolución bolivariana.

Martínez, que es docente jubilada, recalcó que estudiar la historia del país es lo que da identidad a los venezolanos como nación, y que debe ser estudiada con imparcialidad, además de preparar a los estudiantes como futuros profesionales con pensamiento crítico e identidad nacional.

Historia de Venezuela distorsionada

Carlos Cruz, presidente de la Academia de la Historia en Carabobo, sostuvo que la historia de Venezuela ha sido mal manejada desde el pasado, porque ha sido catalogada como una historia épica y distorsionada con fines políticos.

Tenemos un uso excesivo de la figura de Simón Bolívar. A los jóvenes hay que incentivarlos brindando una historia real (…) Hay un desconocimiento total de la identidad, un pueblo que no conoce de dónde viene. Aquí se ha magnificado una historia negra, diciendo que somos afrodescendientes, cuando realmente somos un pueblo multiétnico″, sostuvo Cruz.

Además reveló que para la celebración de los 200 años de la Batalla de Carabobo no fueron convocados por la gobernación de la entidad para conocer las obras que se realizaron en el Campo de Carabobo.

“Eso fue un secreto bien guardado, nos enteramos de qué hicieron el día del desfile”, dijo el historiador.

Cruz informó que desde la última semana de mayo están realizando una serie de conversatorios con el apoyo de las cámaras de comercio de Valencia, Puerto Cabello y otras instituciones.

Historiadores y docentes coinciden en que la nueva generación de estudiantes de bachillerato y primaria poco conocen la historia del país. Proponen que la Historia de Venezuela sea deslindada de tintes políticos y que se realce la identidad nacional contando los hechos históricos con objetividad, sin parcialidad ideológica ni política.


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