Las acciones de calle de representantes y maestros continúan desde que comenzó el año 2023. Afirman que no abandonarán las protestas hasta que el Gobierno los atienda.
Barquisimeto. Marchas, pancartazos, plantones, cadenas humanas, grafitazos en carros han realizado padres y representantes en diferentes sectores de la capital del estado Lara para apoyar a los docentes. Aseguran que un niño con hambre no estudia y un maestro con hambre no enseña.
El gremio educativo protesta por los bajos sueldos, inexistencia de la contratación colectiva, HCM, seguro funerario y otros beneficios que les han eliminado de manera progresiva.
En vista de la precaria situación que atraviesan cientos de maestros y profesores, los representantes respaldan las manifestaciones, mientras aseguran que no enviarán a los salones de clases a sus hijos hasta que se logre un sueldo justo.
Luz Martínez, madre de una escolar de primaria al oeste de Barquisimeto, considera que es injusto lo que sucede con quienes tienen en sus manos la responsabilidad de educar a los venezolanos del futuro.
Nosotros necesitamos que los docentes estén bien, que no anden con los zapatos rotos, pantalones remendados, quitando plata prestada para ir a dar clases”, destacó.
Aseveró que no es justo que un educador esté pasando tantas necesidades cuando los docentes merecen tener el mejor sueldo del país, “porque real hay”.
Por su parte, Alejandra Alvarado manifestó desde el municipio Palavecino, a pesar de que su hija va a la escuela con regularidad, no tiene clases porque su maestra no asiste, ya que en muchas oportunidades no tiene para pagar el pasaje del transporte público.
Señala que el Gobierno no les da a los educadores la importancia que merecen como sí lo hacen en otros países que están conscientes del rol que cumple un docente en la comunidad.
Se pregunta cómo hace un trabajador que gana seis dólares al mes, y que además tiene que pagar pasajes, comida y cumplir un horario de clases. Tanto Alvarado como el resto de los representantes dicen que entienden y apoyan a los docentes.
Muchas veces la hemos ayudado entre todos y le hacemos una cestica de comida, pero no todo el tiempo podemos hacerlo porque nosotros también estamos alcanzados”, destacó.
Gritan con brío
Los manifestantes se concentran con pitos y pancartas principalmente en las avenidas con más tránsito de vehículos.
Se unen entre varios centros educativos cercanos y comienzan su recorrido para exigir al gobierno de Nicolás Maduro aumento salarial justo, pago completo de beneficios económicos, derogación del instructivo de la Onapre, firma de la convención colectiva y el cese de la persecución a los directivos gremiales.
Nos vamos a mantener en la calle, la protesta no la vamos a abandonar porque es el futuro de nuestros hijos el que está en riesgo”, señaló Desiree Gómez, habitante del sector El Cercado.
Este viernes no fue la excepción y cada vez más representantes se han sumado al apoyo en los reclamos de los educadores. Gómez afirmó que tienen razones para seguir en las calles y exigir los derechos de sus hijos.
Me importan los derechos de mis hijos, por eso apoyo a los docentes. No es por los maestros nada más. Es por mis hijos”, exclamó.
Repudió la respuesta del Gobierno sobre sustituir a los docentes regulares por miembros de las UBCh o la Chamba Juvenil. Indicó que prefiere enseñar a su hijo a leer, escribir, sumar, restar, multiplicar y dividir en su casa.
¿Cómo pretende el Gobierno echar para adelante si tiene a los educadores como esclavos? Un país no surge con ignorantes, surge con gente que viva dignamente, que tenga energías para trabajar y dar lo mejor de sí, no con personas muertas de hambre”, cuestionó Gómez.
Tanto docentes como representantes aseguran que continuarán con las protestas y marchas pacíficas en la región, hasta que el gremio de trabajadores de la educación y otros de la administración pública sean escuchados.
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