Aún no logra la meta de recaudar la totalidad del dinero. Lo donado en un mes solo alcanza para cuatro mujeres con cáncer de mama y eso porque el resto de los especialistas, desde las enfermeras hasta los patólogos, decidieron participar sin cobrar. La clínica asumirá el resto de los costos.
Caracas. “Con que opere a una ya es ganancia”. Eso dijo a Crónica.Uno el médico oncólogo Enrico Hernández, quien inició el pasado 1° de octubre la campaña “Dona una operación”. Su meta era intervenir de forma gratuita a 50 mujeres con cáncer de mama. Por ahora tiene en lista a cuatro, de las 16 que llenaron los recaudos durante este mes.
Con la campaña logró recaudar 652 dólares por gofundme y otros 300 dólares que fueron donados por otra vía. Ese dinero solo le alcanza para intervenir a cuatro mujeres. “Todavía estamos en la selección, ha sido muy dura, pues llegaron muchas que ya no son operables por presentar metástasis. Creemos que la primera entra a quirófano la semana entrante”, dijo Hernández.
Este viernes 13 de noviembre en horas de la mañana entrevistó a dos de las aspirantes. Otras están en el interior del país y se les ha hecho un poco difícil el contacto. Hasta ahora, de 12 que cumplieron los requisitos, cinco han presentado metástasis, “eso es 45 % de la muestra y es un porcentaje muy alto”.
El IVSS solo entrega dos medicinas de manera irregular: Tamoxifeno y Femara; mientras que Anastrazol y Exemestano no volvieron a traerlos. Hoy en día, las pacientes se enfrentan a un desabastecimiento que supera 80 %, tienen que pagar consultas y exámenes. En el mes rosa no hubo campañas de prevención ni sobre sensibilización de esta patología, el mandatario Nicolás Maduro solo envió un mensaje de «solidaridad» vía Twitter.
La más joven de las pacientes que está observando el médico oncólogo tiene 31 años y la mayor no pasa de los 70 años. Todas estaban en control menos una.
El dinero recaudado no alcanza para una operación. Se requieren mínimo 3000 dólares. “No obstante, enfermeras, anestesiólogos, ayudantes y patólogos decidieron también dar su apoyo completamente gratis y la clínica decidió asumir el resto. Ambas cosas nos están permitiendo operar a cuatro. En otras condiciones, ni una sola se hubiese podido intervenir. Una vez que salgan de quirófano y se recuperen, con su autorización podemos contar sus historias, para dar la mayor transparencia a la campaña”, indicó.
El galeno agradeció a través de sus redes sociales a los que se sumaron a la iniciativa. “Juntos somos más, ayudemos a prolongar vidas”.
Los requisitos para ser beneficiada eran ser paciente de bajos recursos económicos, tener un cuadro clínico de gravedad y tiempo en espera. Por ahora, cuatro ya tienen esperanzas renovadas gracias a este médico oncólogo.
Los datos de esta enfermedad
- De acuerdo con el último estudio sobre el pronóstico de incidencia y mortalidad del cáncer en Venezuela, publicado por la Sociedad Anticancerosa Venezolana, en 2019 hubo 7093 nuevos casos y 2819 decesos por cáncer de mama. Eso fue un aumento significativo en las cifras que se ha venido observando desde 2015.
- En Venezuela es difícil conseguir tratamiento, pero por la pandemia las afectadas no pueden ni siquiera ir a Colombia. El Estado no atiende la emergencia. En casi ocho meses de confinamiento no ha promovido servicios esenciales de diagnóstico, cuidado y rehabilitación. Desde 2014 los pacientes se enfrentan a un creciente desabastecimiento. Actualmente, la escasez de medicamentos oncológicos supera 80 %.
- Los servicios de radioterapia pública en más de 50 % tienen problemas para administrar tratamientos radiantes.
- Las tomografías de tórax, abdomen y pelvis cuestan 160 dólares cada una, cuando las mujeres cuentan con el apoyo y el subsidio de una fundación. En las clínicas la sesión más económica de radioterapia está entre 2000 y 3000 dólares, son 25 y 30 radioterapia por paciente. Por eso muchas están sin cumplir esos esquemas de tratamiento
- Naciones Unidas en su informe Provocando 2019 indicaba que la mortalidad por cáncer de mama en 2020 sería de 3199 mujeres, proyecciones estimadas antes de la pandemia. Con la COVID-19 el impacto en las mujeres es de amplio espectro, pues las que estaban en tratamiento no lo han podido continuar por las medidas de aislamiento, por no poderse movilizar, por la falta de combustible y de atención en los centros públicos.